Duran Lleida afirmó ayer que gracias a las aportaciones fiscales de Cataluña al conjunto del Estado los campesinos andaluces "reciben un PER para pasar una mañana o toda la jornada en el bar del pueblo".
Esta afirmación ha suscitado una encendida polémica hasta el punto que el PSOE ha anunciado que presentará el lunes en el Parlamento andaluz una iniciativa de reprobación del candidato de CiU a las elecciones generales.
El político socialcristiano se ha reafirmado esta tarde en sus críticas, pero ha aclarado que no van dirigidas a los que reciben el subsidio sino a sus gobernantes.
"No es la primera vez ni será la última que critique el sistema de prestaciones existentes en el mundo rural andaluz y extremeño. Lo hago, y lo seguiré haciendo, no como desprecio, insulto, ni tan siquiera critica al pueblo andaluz o extremeño", ha escrito Duran.
"A quien sí critico -añade- sin insultar, educadamente y con el respeto que me caracteriza, pero con fuerza y firmeza, es a los gobernantes que Andalucía y Extremadura han tenido en los últimos años".
Según Duran, las críticas son "porque no comparto en absoluto el principio de las sociedades subsidiadas", que considera "condenadas al fracaso" y un atentado "contra la dignidad de las personas".
"En Andalucía y Extremadura una parte del mundo rural (no todo, por favor) es víctima de este tipo de sociedad subsidiada que, por cierto, siempre tiende a ser más cautiva del poder político", argumenta el político catalán.
Duran insiste en que "los responsables de ello no son los andaluces, ni los extremeños, sino los gobernantes socialistas" y expresa su lamento por que el PP lo criticara también "con dureza" y ahora "haya cambiado de actitud"
En su apunte, Duran se pregunta: "¿Por qué no reciben el mismo trato los agricultores de Aragón o de Cataluña?".
"Critico también -abunda el dirigente democristiano- que eso se haga y que además encima haya fraude, porque una parte (no todos, por el amor de Dios) de los beneficiarios hacen otros trabajos en la economía sumergida".
Duran califica de "sorprendente e insólito" que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, propugne su reprobación en el parlamento andaluz y le recuerda que él siempre ha defendido públicamente "la aportación de los andaluces a la construcción de una Cataluña más rica, con mayor bienestar y cohesionada".
Esta afirmación ha suscitado una encendida polémica hasta el punto que el PSOE ha anunciado que presentará el lunes en el Parlamento andaluz una iniciativa de reprobación del candidato de CiU a las elecciones generales.
El político socialcristiano se ha reafirmado esta tarde en sus críticas, pero ha aclarado que no van dirigidas a los que reciben el subsidio sino a sus gobernantes.
"No es la primera vez ni será la última que critique el sistema de prestaciones existentes en el mundo rural andaluz y extremeño. Lo hago, y lo seguiré haciendo, no como desprecio, insulto, ni tan siquiera critica al pueblo andaluz o extremeño", ha escrito Duran.
"A quien sí critico -añade- sin insultar, educadamente y con el respeto que me caracteriza, pero con fuerza y firmeza, es a los gobernantes que Andalucía y Extremadura han tenido en los últimos años".
Según Duran, las críticas son "porque no comparto en absoluto el principio de las sociedades subsidiadas", que considera "condenadas al fracaso" y un atentado "contra la dignidad de las personas".
"En Andalucía y Extremadura una parte del mundo rural (no todo, por favor) es víctima de este tipo de sociedad subsidiada que, por cierto, siempre tiende a ser más cautiva del poder político", argumenta el político catalán.
Duran insiste en que "los responsables de ello no son los andaluces, ni los extremeños, sino los gobernantes socialistas" y expresa su lamento por que el PP lo criticara también "con dureza" y ahora "haya cambiado de actitud"
En su apunte, Duran se pregunta: "¿Por qué no reciben el mismo trato los agricultores de Aragón o de Cataluña?".
"Critico también -abunda el dirigente democristiano- que eso se haga y que además encima haya fraude, porque una parte (no todos, por el amor de Dios) de los beneficiarios hacen otros trabajos en la economía sumergida".
Duran califica de "sorprendente e insólito" que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, propugne su reprobación en el parlamento andaluz y le recuerda que él siempre ha defendido públicamente "la aportación de los andaluces a la construcción de una Cataluña más rica, con mayor bienestar y cohesionada".