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    Orígenes de la Segunda Guerra Mundial y la Gran Guerra Patriótica. Realidad contra revisionismo histórico.

    Camarada Víctor
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    Orígenes de la Segunda Guerra Mundial y la Gran Guerra Patriótica. Realidad contra revisionismo histórico. Empty Orígenes de la Segunda Guerra Mundial y la Gran Guerra Patriótica. Realidad contra revisionismo histórico.

    Mensaje por Camarada Víctor Miér Dic 07, 2011 4:15 pm

    NOTA DEL PCPE AL PRESENTE TEXTO

    El próximo 9 de Mayo se cumple el LXV Aniversario de la derrota del nazifascismo a manos del Ejército Rojo en la llamada II Guerra Mundial, acontecimiento que para los pueblos que conformaron la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), pasará a la historia como la Gran Guerra Patria.

    Las burguesías europeas trataron en un primer momento de enmascarar este acontecimiento histórico declarándolo en el ámbito de la Unión Europea como “Día de Europa”.

    No obstante, y no contento con intentar adulterar la verdadera significación de este episodio épico, el imperialismo de la UE está impulsando, por un lado, una furiosa ola anticomunista centrada en legitimar ilegalizaciones de organizaciones comunistas, persecución y encarcelamiento de militantes de carácter revolucionario (comunistas o no), retirada e ilegalización de simbología comunista o soviética... Por otro lado, trata de abrir camino y convertir como verdad inmutable un discurso que, desde el más burdo revisionismo histórico, intenta poner en un mismo plano la criminal ideología nacionalsocialista (imperial, racista y burguesa) con la teoría marxista-leninista, fundamentada en el internacionalismo proletario, la emancipación humana de cualquier explotación, y la cooperación y la paz entre los pueblos, políticas que fueron seña de identidad de la antigua URSS y de las organizaciones comunistas, que fueron vanguardia en la lucha a muerte contra el expansionismo nazifascista durante el siglo pasado.

    El intento de relegar al olvido la vital participación de los pueblos y naciones de la URSS en su lucha contra el totalitarismo fascista, el desprecio al brutal precio pagado por este país (más de 20 millones de personas asesinadas) o por los cientos de miles de partisanos y resistentes comunistas que combatieron al terror nazi en toda Europa...
    constituyen la expresión práctica del terror que la burguesía y sus gestores políticos sienten a que las organizaciones revolucionarias y comunistas volvamos a jugar el papel que nos corresponde en nuestra histórica tarea de desterrar su hegemonía en Europa o cualquier otra latitud del mundo.

    Sirva este texto como homenaje a una verdad histórica que será imposible desterrar de la memoria colectiva de los pueblos: el papel determinante de todos los ciudadanos y todas las ciudadanas de la URSS, del glorioso Ejército Rojo y del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) en la liberación de Europa del yugo nazi.

    La militancia revolucionaria y comunista del PCPE asume con orgullo la tarea de no permitir que este pasado sea borrado o mancillado por los herederos (en su plano político y económico) de quienes un día mantuvieron una posición titubeante o directamente genuflexa ante los delirios fascistas, así como la de combatirlos con todas nuestras fuerzas para mandarlo a su lugar natural: el basurero de la historia, al lado del oprobioso III Reich.

    La Rioja, a Mayo de 2010

    ORÍGENES DE LA II GUERRA MUNDIAL Y DE LA GRAN GUERRA PATRIA
    VERDAD VS REVISIONISMO HISTÓRICO

    Después de la depresión económica de 1929, todo el orden capitalista mundial se tambaleó y se agitó. La atmósfera estaba fuertemente cargada presagiando una nueva guerra mundial. Y ésta no tardó mucho en estallar. Pero, ¿en qué lugar? ¿Qué amplitud alcanzaría? ¿Quién lucharía contra quién? Todas estas preguntas estuvieron mucho tiempo sin repuestas. Incluso después de la declaración “oficial” de esta catástrofe, en 1940, la cuestión no estaba completamente zanjada.
    Estas preguntas sin respuestas permiten comprender mejor la política exterior de Stalin en el curso de los años treinta.

    - EL PACTO GERMANO-SOVIÉTICO

    Hitler llegó al poder el 30 de Enero de 1933. Sólo la Unión Soviética comprendió el peligro para la paz que ello significaba. En Enero de 1934, Stalin declaró en el congreso del partido que “la nueva política (alemana) recordaba en sus grandes líneas la política del ex-Káiser, que hizo ocupar, durante un tiempo, a Ucrania y emprendió una campaña contra Leningrado, después de haber transformado a los países Bálticos en una base de operaciones para esta campaña”. Declaró también que: “Si los intereses de la URSS precisan de un acercamiento con tales o cuales países que no tengan intereses de violar la paz, lo vamos a hacer sin dudar” (1)

    Hasta la llegada de Hitler, Inglaterra dirigía la cruzada contra la URSS. Churchill había sido en 1918 el instigador principal de la intervención militar que movilizó a 14 países. En 1927, Inglaterra había roto sus relaciones diplomáticas con la Unión Soviética y decretó un embargo sobre sus exportaciones.
    En 1931 Japón había invadido el norte de China y sus tropas habían llegado a la frontera soviética, por la parte de Siberia. La Unión Soviética tuvo que decretar un embargo sobre sus exportaciones. En 1935 la Italia fascista ocupó Etiopía. Ante la expansión fascista, la Unión Soviética propuso desde 1935 un sistema de seguridad en Europa. En esta perspectiva, concluyó tratados de asistencia mutua con Francia y Checoslovaquia. Trotsky lanzó folletos emponzoñados contra Stalin que acababa con estos tratados, de “traicionar” al proletariado francés y a la revolución mundial.
    Al mismo tiempo que voces autorizadas de la burguesía francesa afirmaban que el país no estaba obligado a ayudar a la URSS, en caso de que fuese atacada.
    En 1936 Italia y Alemania nazi enviaban sus tropas de elite a España para combatir contra el gobierno legal de la república. Francia e Inglaterra adoptaron una política de “no-intervención”, dejando plena libertad de acción a los fascistas, mientras los barcos de guerra y submarinos italianos hundían a los barcos soviéticos que traían material militar y alimentos a la República española.
    En Noviembre del mismo año, Alemania y Japón firmaban el pacto Antikomintern, al cual se adhirió Italia más tarde. La URSS se encontró cercada.
    El 11 de Marzo de 1938, Radio Berlín anunciaba una “sublevación comunista en Austria” y la Wehrmacht invade este país que es anexionado dos días más tarde. La URSS toma la defensa de Austria y hace un llamamiento a Inglaterra y a Francia para estudiar una defensa colectiva. “Mañana pudiera ser tarde”, subraya la declaración soviética.
    A mitad de Mayo Hitler concentra sus tropas en la frontera checoslovaca. La URSS, ligada por un tratado al país amenazado, agrupa más de 40 divisiones en su frontera occidental y llama a filas a 330.000 reservistas. Pero, en septiembre, Inglaterra y Francia se reúnen en Munich con las potencias fascistas, Alemania e Italia. Ni Checoslovaquia ni la URSS fueron invitadas. Las grandes “democracias” deciden entregar a Hitler la región de los Sudetes, parte integrante de Checoslovaquia. En la locura de este acto tan criminal, Inglaterra firma el 30 de Septiembre una declaración con Alemania en donde se dice que las dos potencias expresan su deseo “de jamás entrar en una nueva guerra la una contra la otra”. (2)
    Francia sigue el ejemplo en Diciembre. No obstante, la URSS propone a Checoslovquia su ayuda en caso de agresión alemana, pero esta oferta es desestimada. El 15 de Marzo de 1939, la Wehrmacht ocupa Praga. Desmembrando a Checoslovaquia, Hitler ofrece un pedazo del pastel al gobierno reaccionario polaco, que muere el anzuelo con avidez.
    Una semana más tarde, el ejército alemán ocupa el territorio lituano de Klaipeda, importante puerto del sur del Báltico. Stalin sabe que el monstruo se lanza hacia el Este y que Polonia será la próxima víctima.
    En Mayo de 1939, el Ejército japonés invadió Mongolia, aliada de la URSS por un tratado de asistencia militar. Al mes siguiente, las tropas soviéticas, dirigidas por un oficial desconocido, Zhukov, entran en batalla con el Ejército Japonés. Es un enfrentamiento militar de envergadura: Japón perdió unos 200 aviones y más de 50000 soldados fueron muertos o heridos. El 30 de Agosto de 1939, las últimas tropas japonesas se retiran de Mongolia.
    A la mañana siguiente, otra frontera de la URSS se incendió: Alemania invade a Polonia.
    Todo el mundo conocía esta agresión inminente: para obtener una posición óptima y declarar la guerra sea contra Inglaterra y Francia, sea contra la URSS, Hitler debía “ajustar el destino” de Polonia. Volvamos algunos meses hacia atrás.

    En Marzo de 1939, la URSS inició negociaciones para formar una alianza antifascista.
    Inglaterra y Francia dejan correr la cosa, maniobrando. Por esta actitud, las dos grandes “democracias” hacen comprender a Hitler que puede marchar contra Stalin sin ser inquietada por el Oeste. De Junio a Agosto de 1929, hay negociaciones secretas anglo-alemanas en el curso de las cuales, a cambio del respeto e integridad del imperio británico, los ingleses prometen a Hitler libertad de acción en el Este. El 29 de Julio, Charles Roden Buxton, del Labour Party, realiza una misión secreta para el primer ministro Chamberlain, en la embajada alemana. Y propone el plan siguiente: “Gran Bretaña se declara presta a concluir con Alemania un acuerdo delimitando sus esferas de influencia. (...)”

    1)Alemania promete no inmiscuirse en los asuntos del imperio británico
    2)Gran Bretaña promete respetar enteramente las esferas de intereses alemanes en el Este y Sudeste de Europa. Esto tendría como consecuencia que la Gran Bretaña renunciaría a las garantías que ella había acordado a ciertos estados situados en la esfera de los intereses alemanes. Gran Bretaña se pondría enseguida a trabajar para que Francia rompiese su alianza con la URSS.
    3)Gran Bretaña pondría fin a las conversaciones actuales llevadas con la URSS en vista de la conclusión de un pacto. (3)

    Los servicios de inteligencia soviéticos pusieron a Stalin al corriente de todas estas maniobras.
    En Agosto de 1939, las negociaciones entre Inglaterra, Francia y la URSS entraron en la fase final.
    Pero las dos potencias occidentales enviaron a Moscú delegaciones de segundo rango, sin mandato para concluír una convención. Voroshilov exigió el compromiso contractual y preciso para que en caso de una nueva agresión alemana, los aliados entrasen en la guerra juntos. Quería saber cuantas divisiones inglesas y francesas opondrían a Hitler en caso de agresión contra la URSS. No obtuvo respuesta alguna. Quiso concluir un acuerdo con Polonia para que las tropas soviéticas pudieran batallar contra los nazis en territorio polaco en caso de agresión alemana. Polonia lo rechazo, dejando imposible todo acuerdo militar efectivo. Stalin comprende perfectamente que tanto Francia como Inglaterra preparan un nuevo Munich, que están dispuestas a entregar a Polonia con la esperanza de hacer marchar a Hitler contra la URSS. Harold Ickes, ministro encargado de los asuntos interiores de los Estados Unidos, anoto en la época en su diario “Inglaterra acariciaba la esperanza de provocar un enfrentamiento entre Rusia y Alemania y no de comprometerse a sí misma”. “Francia deberá renunciar a la Europa Central y Oriental en favor de Alemania con la esperanza de verla entrar en guerra contra la URSS. Así, Francia podría quedarse segura detrás de la linea Maginot.” (4)
    La URSS se encontraba frente a un peligro mortal al ver como iba constituyéndose un frente único anti-soviético de todas las potencias imperialistas. Con el sostén tácito de Inglaterra y Francia, Alemania podría, después de ocupar Polonia, continuar sobre la marcha y llevar a cabo su “guerra relámpago” contra la URSS, mientras que Japón atacaría por Siberia.
    En este momento, Hitler había llegado ya a la conclusión de que tanto Francia como Inglaterra no tenían ni capacidad ni voluntad de resistir. Y decidió ocupar Europa Occidental antes de su ataque a la URSS.
    El 20 de Agosto, Hitler propone a la URSS un pacto de no-agresión. Stalin reacciona inmediatamente y, el 23 de Agosto, el Pacto es firmado.
    El 1 de Septiembre, Hitler ataca a Polonia. Inglaterra y Francia son pilladas en su propia trampa.
    Estos dos países han facilitado todas las aventuras de Hitler con la esperanza de utilizarla contra la URSS. Desde 1933, no cesaron de airear los meritos de Hitler en su combate contra el comunismo.
    Ahora se veían obligadas a declarar la guerra a la Alemania nazi. Sin tener la menor intención de hacerla efectiva. Su rabia estallo en una virulenta campaña anti-comunista bajo el tema: “El bolchevismo es aliado natural del fascismo”. Medio siglo mas tarde, esta propaganda estúpida se encuentra en los libros de escuela como una verdad incontestable. No obstante, la historia ha demostrado que el pacto germano-soviético constituyo la clase de la victoria en la guerra antifascista. Esto parece paradójico, pero el pacto fue un momento crucial que permitió la preparación de las condiciones para la derrota alemana.
    En efecto, la URSS firmo este pacto con la clara conciencia de que, pronto o tarde, la guerra contra Alemania nazi era inevitable. Una vez que Alemania decidió concluir su acuerdo con la URSS, Stalin arranco a Hitler las máximas concesiones a fin de colocarse en las mejores posiciones para la guerra por venir. PRAVDA del 23 de Septiembre escribía: “La única cosa que era aun posible, era preservar a Ucrania occidental y a Bielorrusia occidental de la invasión alemana (las dos provincias que habían sido arrancadas la URSS en 1920) así como a los países Bálticos. El gobierno soviético ha obligado a Alemania a comprometerse a no franquear la linea formada por el Thase, el Narew, el Boug y el Vistula” (5)
    En Occidente, aquellos que siempre simpatizaron con la política anti-comunista de Hitler, gritan ahora: “El fascismo y el bolchevismo, estos dos totalitarismos, se han repartido Polonia.” Pero el avance de las tropas soviéticas se correspondía con los intereses de las masas populares de los territorios concernidos, ya que permitían desembarazarse tanto de los fascistas, como de los terratenientes y los capitalistas. Este avance corresponde también a los intereses del conjunto del movimiento anti-hitleriano mundial. Las burguesías más realistas vieron claramente que haciendo avanzar a sus tropas, la URSS se colocaba en una posición de partida mejor para la guerra futura. Así fue como Churchill declaro el 1 de Octubre de 1939: “Hacer que las armas rusas se mantengan sobre esta linea es claramente necesario para la seguridad de Rusia frente a la amenaza nazi. En todo caso, la linea esta allí y se ha creado un frente del Este al que Alemania no osa atacar”. (6)
    Equivocados en sus esperanzas de ver avanzar al ejercito nazi a través de Polonia contra la URSS, Francia e Inglaterra se vieron en la obligación de declarar la guerra a Alemania... Pero, sobre el frente Oeste, ninguna bomba vino a turbar la tranquilidad de los nazis... En revancha, una verdadera guerra política interna se declaro contra los comunistas y el 26 de Septiembre, el PCF fue prohibido y millares de sus miembros encarcelados. Henri de Kerillis, escribió: “Una tempestad indescriptible sublevo a la conciencia burguesa. El espíritu de cruzada soplo con furia. Solo había un grito: guerra a Rusia. Fue en este momento cuando el delirio anti-comunista llevo a su paroxismo”. (7)
    En estos momentos, Stalin dijo con gran perspicacia a Zhukov: “El gobierno francés, que preside Daladier, y el gobierno ingles de Chamberlain no querían entrar en guerra de manera seria contra Hitler. Esperaban siempre empujar a Hitler a una guerra contra la URSS. Si rehusaron en 1939 realizar con nosotros un bloque anti-hitleriano, es por que no querían atar las manos de Hitler, no querían llevarle a renunciar su agresión contra la URSS. Pero de nada les valdrá todo ello. Les ara falta pagarlo ellos mismos debido a su miope política.” (Cool
    Sabiendo que la guerra contra Alemania era inevitable, el gobierno soviético sé inquieto seriamente por la suerte de Leningrado, situada a 32 kilometros de la frontera finlandesa. El 14 de Octubre de 1939, Stalin y Molotov enviaron al gobierno finlandés un memorandum sobre el problema de la defensa de Leningrado.
    La URSS quería asegurar “la imposibilidad del bloqueo de la entrada al golfo de Finlandia”. Pedía que Finlandia le cediese en alquiler el puerto de Hanko y le dejase cuatro pequeñas islas. Para hacer posible la defensa de Leningrado, pedían una parte del istmo de Carelia perteneciente a Finlandia. A cambio, la URSS ofrecía a Finlandia una parte de la Carelia soviética, dos veces mas grande. (9)
    Empujada por Alemania, Finlandia rehusó y el 30 de Septiembre de 1939, la URSS le declaro la guerra. Algunos días mas tarde, Hitler dio instrucciones para la guerra futura contra la URSS. En ellas se decía entre otras cosas: “Sobre el flanco de nuestra posición, sé podrá contar sobre la intervención activa de Rumania y de Finlandia en la guerra contra la Rusia soviética.”(10)
    Inglaterra y Francia, preocupadas por no meterse en la “drole guerre” (“la extraña guerra”), se lanzaron inmediatamente en una guerra a sangre y fuego...¡contra la amenaza bolchevique! En tres meses, Inglaterra, Francia, los EE.UU. Y la Italia fascista enviaron 700 aviones, 1500 cañones y 6000 ametralladoras a Finlandia, “victima de la agresión”. (11)
    El general francés Weygand fue a Siria y Turquía para preparar un ataque a la URSS a partir del Sur.
    El plan del Estado mayor general francés preveía el bombardeo de los pozos petrolíferos de Bakú. En estos momentos el general francés Serrigny, escribió: “En realidad, Baku, con su producción de 23 millones de toneladas de crudo, domina la situación. Si llegásemos a dominar el Caucaso, o si sus refinerías las abrasásemos por nuestras fuerzas aéreas, el monstruo se hundirá exangüe.” (12)
    ¡Cuándo aun no había dado ordenes de disparar un solo tiro contra los hitlerianos a los que había declarado la guerra, el gobierno francés reunió un ejercito expedicionario de 50000 hombres, para combatir a los rojos!.
    Chamberlain declaro que Inglaterra enviaría a 100000.soldados. (13)
    Estas tropas no llegaron a Finlandia porque antes el Ejercito Rojo había derrotado a los finlandeses: un acuerdo de paz fue firmado el 14 de Marzo de 1939. Mas tarde, en plena guerra, una publicación gaullista que aparecía en Rió de Janeiro, afirmaba: “A fines del invierno del 39-40, fracasado el complot politico y militar de Chamberlain y Dadalier que tenia como fin provocar un cambio de alianzas en la guerra para dirigirla contra la URSS, poniendo fin al conflicto entre la alianza franco-inglesa y Alemania por un compromiso y una alianza anti-Komintern. Este complot consistía en enviar un cuerpo expediccionario franco-ingles para ayudar a los finlandeses, cuya intervención debía preparar un estado de guerra contra la Unión Soviética.” (14)
    Así fue como el pacto germano-soviético y la derrota de Finlandia habían preparado las condiciones de la victoria del Ejercito Rojo contra los nazis.
    Estos dos acontecimientos tuvieron consecuencias primordiales. Por un lado, impidió la formación de un frente unido de las potencias imperialistas contra la URSS socialista. Un ataque alemán en 1939 habría llevado también a una intervención japonesa en Siberia. Por el contrario, la URSS consiguió un éxito al consolidarse y firmar con el Japón un pacto de no-agresión que mantuvo hasta la derrota del fascismo.
    Francia e Inglaterra, que habían rechazado a lo largo de años constituir un sistema de seguridad colectivo, se vieron obligadas a entrar en una alianza militar efectiva con la URSS en el momento en que Alemania rompía el pacto germano-soviético.
    La Unión Soviética pudo avanzar sus defensas en unos 150 a 300 Km. Este factor tuvo una gran influencia en la defensa de Leningrado y Moscú en 1941. La Unión Soviética gana 21 meses de paz que le permitieron reforzar de forma decisiva su industria de defensa y a sus fuerzas armadas.

    NOTAS:
    1. -Informe al XVII Congreso. Ed. En Lenguas Extranjeras. Moscú, 195.pp.22-23.
    2.-Documentos y materiales referentes a la vigilia de la II guerra mundial. Ed.en Lenguas Extranjeras. Moscu. Tomo I, p.282.
    3.-Ibidem. Archivos Dirksem. Tomo II.Ed.Moscu.1973.p.262.
    4.-The secret diary of Harld Ickes.vol.IIP.705, citado en: En la vigilia de la II guerra mundial, Sipols y Kharalmov.Ed.Novosti, Moscú,1973,p.262.
    5.-Grigori Déborine, Los secretos de la II guerra mundial.Ed.Progreso.Moscú.1972.p.20.
    6.-Churchill,op.cit.T2.pp.51-52.
    7.-Citado en: La gran guerre national de L´Union Soviétique.Ed.Progrés.Moscú.1974.p.20.
    8.-Zhukov, Mémories,T1.Ed.Fayard.París.1970.pp.250-251.
    9.-Documents sur les relations finno-soviétiques.Ministro de asuntos Exteriores de Finlandia.1940.pp.93-95-109.
    10.-Hans Adolf Jabobsen.La II guerra mundial.T1.Ed.Casterman.París.1968.p.118.
    11.-Pavel Jiline.Ambitions et méprise du troisieme Reich.Ed.Progreso.1972.p.74.
    12.-General Serrigny.L´Allegmane face a la guerra total.Ed.Grasset.1940.p.228.
    13.-Falsificateurs de L´Historie.Ed.ABS.Bruxelles.1948.p.68.
    14.-Petite encyclopedie politique du monde.Ed.Chantecler.Río de Janeiro.1943.p.136.

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