Lunes, 30 de abril de 2012
Jorge Rafael Videla explicó ante la Justicia que las desapariciones evitaban la reacción de la sociedad
“No producían el impacto que tendrían los fusilamientos”
El dictador debió declarar en una causa que busca saber dónde están los restos del ex jefe del ERP Roberto Santucho. Dijo que no había una lista de los desaparecidos, pero que cada jefe de área llevaba la suya.
Por Alejandra Dandan
El ex dictador Jorge Rafael Videla declaró durante más de tres horas.
El dictador Jorge Rafael Videla declaró el viernes pasado como testigo ante la Justicia y reconoció que el método de las desapariciones les resultó una figura “cómoda”, que “no provocaba el impacto de un fusilamiento público porque la sociedad no lo iba a tolerar”. Mientras le allanaban su casa con motivo de otra causa, Videla fue convocado por la jueza Martina Forns en el marco de un expediente en el que se busca saber dónde están los restos del ex jefe político del ERP, Mario Roberto Santucho. En ese juzgado, Videla declaró tres horas seguidas. Habló de las listas, dijo que cada uno de los jefes de áreas y de zonas tenían las suyas y explicó que nunca se publicaron porque no hubo acuerdo entre las Fuerzas. En uno de los párrafos más sabresalientes, se explayó sobre los “vuelos de la muerte”, una “cosa” que le atribuyó “específicamente a la marina”, pero en la que aceptó tener entendido que allí viajaban los que iban a ser “ejecutadas o sufrir una condena”, en una obvia referencia a los asesinatos. Videla fue convocado a pedido de la querella representada por Pablo Llonto. A 14 años de su primera declaración, en la que dijo no saber nada sobre Santucho, ahora aceptó haber decidido a hablar “tal como lo viene haciendo en sus (recientes) declaraciones”: reconoció haber ordenado el secreto con el que se decidió esconder el cuerpo de Santucho para evitar homenajes. Y el dato informativo más importante es que señaló al ex general Santiago Riveros como quien sabría dónde está su cuerpo.
“Era difícil pensar que tantas personas podían ser juzgadas y la Justicia estaba asustada por la persecución que habían sufrido los jueces de la Cámara Federal en ese momento”, indicó sobre los desaparecidos, según la copia de su testimonio brindado el viernes pasado en la sede del Juzgado Civil en lo Contencioso Administrativo Federal Número 2 de San Martín. La idea de los desaparecidos, dijo, “salió así, espontáneamente. La figura del desaparecido era la que se tenía que usar, era una figura ‘cómoda’, entre comillas, porque no impactaba en la sociedad”. En ese sentido, poco más tarde agregó: “Se puede discutir el procedimiento aplicado en ese momento a personas desaparecidas, que no era el impacto de un fusilamiento público porque la sociedad no lo iba a tolerar”. También dijo que todo esto ahora lo dice “debido a que las circunstancias cambiaron y que hace 14 años él no hubiera manifestado esto”.
Videla fue convocado al juzgado de San Martín en el marco de una causa civil, no penal, abierta en los años ’90 para investigar el destino de los cuerpos de Santucho y de Benito Urteaga. Llonto representa a Blanca Santucho, la hermana de Roby Santucho, que hoy tiene 82 años y está buscando saber dónde pusieron el cuerpo. Videla fue convocado como “testigo” y no imputado porque el expediente funciona en ese sentido como un juicio por la verdad: no busca responsables penales sino saber qué pasó con el cuerpo (ver aparte). Luego de la difusión del libro de Ceferino Reato con veinte horas de entrevista al ex dictador, en el que habla específicamente sobre el caso Santucho, la querella le pidió al juzgado que convocaran a Reato. Reato declaró cuatro días antes de Videla y eso abrió las chances de esta declaración. Quienes estuvieron presentes se quedaron completamente sorprendidos por lo que entendieron como una predisposición de Videla a declarar: habló sin parar durante tres horas y aunque, tal como viene sucediendo, en ningún momento hizo una autocrítica a lo que sigue definiendo como una guerra contra la subversión, expresó su voluntad de “querer colaborar” y señaló creer que “hay que abrir un poco más la información para blanquear la situación” y “así lo he demostrado con las declaraciones”.
Pese cierto tono reflexivo en algunos pasajes, cuando habló de cuestiones como los listados de los desaparecidos, reclamados desde hace años por los organismos de derechos humanos, asumía la descripción con una postura de tipo administrativo con la lógica que pueden imprimirles a los relatos los burócratas.
Las listas
El juzgado de todos modos preguntó por las listas de los desaparecidos: “Usted dijo en la entrevista (con Reato) que en un momento tuvo en su poder unas carpetas que le entregaron y además unas cartas sobre el tema de desaparecidos”. Dijo que el tema era la gran inquietud que tenían los familiares y que “sí conoció carpetas”. Y sobre qué se hizo con esas listas, explicó que no se difundieron por dos razones: por una cuestión de desorden en los datos y porque no hubo acuerdo entre las Fuerzas. En sus palabras: “Hubo un intento de ser publicadas, pero era una lista muy defectuosa porque los datos que daba el Ministerio del Interior eran globales. Estaban los desaparecidos producto de la acción militar y una persona que fallecía en la calle, como por ejemplo un borracho que se moría en la vía pública”. Las “listas se presentaron ante la Junta y se rechazaron y luego, como síntesis, no se publicaron porque hubo un desacuerdo entre las Fuerzas y además porque no era conveniente publicar las listas con errores porque generaba mayor desconcierto”. Y dijo: “Se sabía que las personas que estaban desaparecidas después de dos años era obvio que estaban muertas, pero no (se sabía) el destino de sus restos”.
Cuando el juzgado preguntó si las listas que contenían datos ciertos tenían el destino de los muertos, respondió claramente, pero pareció decir que no. “En las listas de desaparecidos nunca se hablaba del destino, eso es lo que nunca se ha dado a conocer. No es fácil cumplir con esa obligación moral por la forma tabicada en que se procedía y en algunos casos no hay rastros de eso y no puede publicarse a medias.” Dijo que “una lista que mereciera fe por equilibrada es hoy muy difícil (de reconstruir)”.
Pablo Llonto, que estuvo en la declaración, agrega algunos comentarios sobre ese mismo pasaje. Explica que Videla subrayó que en su momento no se difundieron las listas por dos razones: por desorden en los nombres, que podían tener datos de quienes no habían sido asesinados por el accionar militar, como él lo dijo. Y porque no hubo acuerdo entre la Armada, la Fuerza Aérea y el Ejército. Sobre el eje del “desorden”, hay alguna otra precisión que dio el dictador y hoy es importante: Videla dijo claramente que “no había un lugar que centralizara las listas porque cada responsable de cada cuerpo y de cada zona tenía autonomía para dirigir la lucha contra la subversión, entonces había que recopilar la información de cada uno de esos lugares”. Y eso no se habría hecho. Un dato que dejaría en claro que nunca hubo una lista única con todos los nombres.
“Sobre ese famoso sueño de que haya una lista donde estén todos los nombres, creo que nos va quedando claro hace tiempo que no existió nunca –-dice Llonto–. Cada aparato de represión, como Bahía Blanca, Tucumán, Córdoba y demás, por todo lo que va apareciendo, parece indicar que cada uno concentró su propia información, que no hubo nunca una única lista.”
Los vuelos
Videla llegó al juzgado, esposado, desde la guarnición militar de Campo de Mayo. Estaba vestido de traje y corbata. Llegó con una carpeta azul en la mano, que no abrió. Varias veces repitió ese gesto que se observa todavía en las imágenes que lo muestran describiendo la figura de los desaparecidos: las manos moviéndose en el aire. Cuando lo hacía, les decía a los que estaban presentes que no lo malinterpretaran: dice que en esa imagen él no niega al desaparecido.
En un momento, sobre ese tema intenta discutir los números que le dio a Reato. Y la definición que él dio sobre los 7 u 8 mil desaparecidos de los que habló. “El saldo de la guerra no estaba calculado y los 7 u 8 mil desaparecidos no era la gente que había que matar, como menciona el periodista, sino que fue una consecuencia de la guerra”, dice la declaración, como si fueran dos cosas distintas.
El juzgado le preguntó también por los vuelos de la muerte. Si había escuchado hablar de ellos. Aquí es donde mostró una de sus descripciones más crudas: lo que para él son “condenados” son los militantes asesinados. “Personalmente no los ordenó (a los vuelos) –dijo–. Ni los dirigió y le llegaron (los datos) porque se los habían contado. Era una cosa más de la Armada. Supone que en los vuelos iban la tripulación y las personas que iban a ser ejecutadas o a cumplir una condena, no pudiendo asegurar –dijo– si el Ejército en algún momento utilizó sus elementos aéreos para este tipo de procedimientos.”
También explicó que intentó escribir un libro con su biografía. Entre los asuntos sobre los que trabajó mencionó el caso Beagle, un dato que permite entender ahora que parte de los objetos encontrados en el allanamiento a su casa podrían tener que ver con eso. También dijo que había recibido dos tipos de respuestas entre sus camaradas de armas sobre las declaraciones que está dando. Unos que lo criticaron por haber hablado, otros que no. Una de las expectativas más importantes que generan las declaraciones de Videla entre los querellantes son los efectos que podría tener su decisión entre los oficiales de rango inferior para que se abra de esa manera un camino para que hablen.
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Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
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Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
LiberArce92- Revolucionario/a
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Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
Cada vez me veo más cercano de la consigna de paredón.
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Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
Sábado, 14 de julio de 2012
EL DICTADOR JORGE RAFAEL VIDELA FUE CAREADO CON SU EX JEFE DE INTELIGENCIA CARLOS ALBERTO MARTINEZ Y EL GENERAL SANTIAGO OMAR RIVEROS
De nuevo los tres juntos, pero esta vez en el juzgado
Interrogados sobre Santucho, Riveros y Videla coincidieron en que la muerte del líder del ERP les produjo “alegría”.
Por Diego Martínez
El ex jefe del Comando de Institutos Militares Santiago Omar Riveros, responsable de Campo de Mayo.
El dictador Jorge Rafael Videla, su ex jefe de inteligencia Carlos Alberto Martínez y el ex jefe del Comando de Institutos Militares Santiago Omar Riveros protagonizaron ayer un careo sobre el destino de los restos del ex jefe del ERP, Roberto Mario Santucho, abatido por un pelotón del Ejército en julio de 1976. Videla reiteró que dio la orden “de que el cuerpo no aparezca”, pero relativizó su afirmación de abril, cuando apuntó a Riveros como el encargado de cumplirla. “Era una suposición”, explicó. El ex jefe de la Zona IV y de Campo de Mayo, sede del mayor campo de concentración del país, dijo impávido que no hubiera acatado “una orden de esa naturaleza, que lastima mi conciencia”. Ambos admitieron ante Ana Santucho, una de las hijas del guerrillero, su alegría por la muerte “del hombre más importante de la subversión”. El abogado Pablo Llonto, impulsor de la causa fundada en el derecho a la verdad, destacó el esfuerzo de la jueza civil Martina Forns, que luego de ordenar el careo y formular preguntas durante dos horas exhortó a los ancianos a enviar un mensaje a sus ex subordinados para que rompan el pacto de silencio.
Los militares retirados, citados como testigos, bajo juramento de decir la verdad, llegaron al Juzgado de San Martín al mediodía en móviles del Servicio Penitenciario Federal: Videla desde la cárcel de Marcos Paz, Riveros desde su casa de Belgrano y Martínez desde la suya en San Miguel, ambos con arresto domiciliario. El ex titular de la Jefatura II de Inteligencia es el único sin condena: fue detenido por primera vez hace apenas dos semanas. Riveros bajó del celular sin esposas, según los penitenciarios porque estaba mareado.
El careo inicial fue entre Videla y Riveros. El dictador ratificó la orden de desaparecer el cuerpo por “lo que implicaba su figura”, aunque aclaró que “fue una resolución de la Junta (que compartía con Emilio Massera y Orlando Agosti), dada la trascendencia del problema”. Riveros, que en mayo consideró “de una mendacidad absoluta” los dichos del dictador, agregó ayer que “no hubiera aceptado hacer desaparecer el cuerpo de Santucho”.
–¿A quién le dio la orden? –indagó la jueza.
–Supongo que el destinatario fue quien tenía responsabilidad en esa zona, que era Riveros, pero no sé si él la recibió. La lógica orgánica indica que debió recibirla, pero no fue una orden dada personalmente y tampoco por escrito –respondió Videla. Sobre los intermediarios, arriesgó que pudo haber sido el secretario de presidencia, léase el general Rogelio Villarreal.
Riveros, sordo del oído derecho, admitió que “tenía capacidad para darle muerte a Santucho y hacer desaparecer su cuerpo”, pero aseguró que no participó porque nadie pidió la intervención del Comando de Institutos Militares. “La muerte de Santucho era para el Ejército un galardón. El personal militar se motivaba para detenerlo o matarlo porque era un adversario importante”, afirmó ante la hija y ante Julio Santucho, hermano del jefe del ERP. “Lo hubiera cumplido con todo gusto”, abundó, y agregó por si fuera necesario que “tenía capacidades para cavar un pozo y enterrarlo o tirarlo”.
–¿Le informaron si se cumplió la orden? –volvió la jueza hacia Videla.
–No tuve respuesta en forma personal. Era un secreto y no saberlo era la mejor forma de guardarlo.
Martínez, parco, dijo no recordar cómo se enteró de la muerte de Santucho. “Supongo”, dijo, que por intermedio de Videla, con quien se reunía “dos o tres veces por semana”. Cuando la jueza le recordó que en el enfrentamiento murió el capitán Juan Carlos Leonetti, miembro del Batallón de Inteligencia 601 que dependía de su jefatura, insistió en que “desconoce” los hechos aunque “imagina” que Leonetti “acompañó a la patrulla para guiarlos con precisión” al departamento donde se reunía la cúpula del ERP.
Riveros, verborrágico, dijo que “muchas veces me preguntaron por el cadáver de Santucho, incluso (Martín) Balza me lo preguntó, pero Santucho no era San Martín como para que lo entierren en Campo de Mayo”. “Puede que algún trasnochado o tarado mental se le haya ocurrido, pero no me consta”, afirmó. “Santucho fue la búsqueda del tesoro para el Ejército por ser el hombre más importante de la subversión”, aseguró.
–¿Sabían de la orden de desaparecer el cuerpo? –preguntó la jueza a Riveros y a Martínez.
Ambos aseguraron que no. “Me sorprendió la decisión. ¿Cómo puede ser que a un cadáver que apareció ‘por derecha’ en un enfrentamiento lo hicieron desaparecer ‘por izquierda’?”, se preguntó Riveros, ex jefe de una zona militar donde todo fueron secuestros y desapariciones “por izquierda”.
–¿Qué piensa de esa pregunta? –le planteó la jueza a Videla.
–El destino del cuerpo fue analizado por la Junta, fue una decisión compartida, una especie de pacto de silencio. Ojalá hoy se pudiera revelar ese secreto. Las condiciones actuales son distintas y el problema de la veneración del cuerpo de Santucho hoy no tiene sentido –supone Videla.
El dictador coincidió con Riveros en que “más allá del respeto a los familiares, la muerte de Santucho” les causó “íntimamente alegría, porque se había abatido al enemigo” y “en combate abierto”. “Si viera a alguien que le deja una flor a Santucho lo aplaudiría por el respeto que se merece”, agregó Videla, responsable de que miles de argentinos no tengan siquiera una tumba donde dejar flores para sus seres queridos.
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IonaYakir- Moderador/a
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- Mensaje n°4
Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
El dictador coincidió con Riveros en que “más allá del respeto a los familiares, la muerte de Santucho” les causó “íntimamente alegría, porque se había abatido al enemigo” y “en combate abierto”. “Si viera a alguien que le deja una flor a Santucho lo aplaudiría por el respeto que se merece”, agregó Videla
Es increíble que las ratas miserables éstas se reivindiquen como soldados que creen en el honor, cuando se cansaron de violar, torturar y asesinar personas atadas.
Razion- Moderador/a
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- Mensaje n°5
Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
IonaYakir escribió:El dictador coincidió con Riveros en que “más allá del respeto a los familiares, la muerte de Santucho” les causó “íntimamente alegría, porque se había abatido al enemigo” y “en combate abierto”. “Si viera a alguien que le deja una flor a Santucho lo aplaudiría por el respeto que se merece”, agregó Videla
Es increíble que las ratas miserables éstas se reivindiquen como soldados que creen en el honor, cuando se cansaron de violar, torturar y asesinar personas atadas.
Esa frase me impactó mucho. Estos tipos son unos fanáticos fascistas. Estaba viendo anteayer un documental de ex Montoneros, y una mujer contaba que había conocido al torturador Cavallo, que eran tipos de personalidad oscura y ultra convencido de lo que hacía, como si les mejorara la vida a los que torturaba. Esto es muy jodido, dado que a estos fanáticos criminales, torturadores, en muchos casos sociópatas, si les das como lo hizo la iglesia, argumentos y bendiciones que vienen desde arriba y desde quienes representan a Dios, les producís delirios místicos en los que se terminan creyendo que su trabajo sucio es una misión divina.
Claro está que después están los hijos de puta sin más, lúmpenes y demás escoria que está al mismo nivel que los fanáticos, pero sin necesidad de convencimiento, y que disfruta con lo suyo. Sino no se explican las violaciones y el sadismo en la tortura.
IonaYakir- Moderador/a
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- Mensaje n°6
Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
El soporte ideológico siempre lo dio la iglesia, que se pone del lado del opresor, tenemos a los protestantes que quemaban “brujas”, Torquemada, los inquisidores, los que quemaron a Giordano Bruno por sostener que la Tierra giraba alrededor del sol (por algo se retracto Galileo), etc, etc.
Otro factor que pudo haber ayudado en su sadismo es el entrenamiento que se les dio en la escuelita de las americas.
Saludos.
Otro factor que pudo haber ayudado en su sadismo es el entrenamiento que se les dio en la escuelita de las americas.
Saludos.
AnarcComunis- Miembro del Soviet
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- Mensaje n°7
Re: Caso Santucho: Declaró el Dictador Genocida
Esto me hizo acordar:
https://www.youtube.com/watch?v=81Nbo0iVGbU&feature=related
Buen Articulo.
https://www.youtube.com/watch?v=81Nbo0iVGbU&feature=related
Buen Articulo.