La guerra en el Cauca es injusta
¡Viva la Lucha de los Pueblos Indígenas!
¡Viva la Lucha de los Pueblos Indígenas!
“Váyanse con su guerra a otra parte”. Esta es el justo reclamo con el que se han levantado los pueblos indígenas del Cauca contra la guerra reaccionaria, cansados de los bombardeos del Ejército, detenciones ilegales acusándolos de guerrilleros, de los asesinatos selectivos a indígenas y campesinos, las tomas guerrilleras, y masacres paramilitares. Han dicho ¡NO MÁS! a una guerra que no les pertenece, demostrando así el gran poder que tienen las masas cuando se organizan y luchan.
La justa actuación de los pueblos indígenas, valiente y decidida, su denuncia a la guerra reaccionaria ha contado y cuenta con el apoyo irrestricto del semanario Revolución Obrera, órgano que ha denunciado esta guerra y sus nefastas consecuencias para las masas trabajadoras del campo. Por ello, este periódico, voz del proletariado revolucionario, llama a la clase obrera y a todo el pueblo trabajador a apoyar la lucha de los hermanos indígenas mediante manifestaciones en las calles, expresando la solidaridad mediante comunicados y rechazando las mentiras y calumnias de los reaccionarios.
Los pueblos indígenas necesitan el apoyo de los trabajadores porque enfrentan una lucha contra el Estado burgués, terrateniente y proimperialista, la cual hace parte de la lucha general que el pueblo colombiano viene librando contra el terrorismo de Estado, contra el despojo de los pobres del campo, contra el hambre y la miseria, por salud, educación y vivienda… movimiento que tiende hacia un gran enfrentamiento de todo el pueblo contra el Estado o Huelga Política de Masas.
Los hermanos indígenas, con beligerancia rechazan la guerra reaccionaria, porque en ella no están en juego los intereses del pueblo, sino las multimillonarias ganancias del negocio de la cocaína, la explotación de oro y el control de las rutas por donde transportan droga, oro y armas; este es un capítulo de una larga lucha contra la expropiación que de sus tierras ancestrales han hecho los Mosquera, los Chaux -viejos terratenientes del Cauca; es otro episodio de rechazo a las masacres del ejército, los paramilitares y los “pájaros”, como las del Nilo y el Naya; es parte y continuación de décadas de lucha contra sus centenarios enemigos explotadores y opresores.
Levantamiento majestuoso contra el Plan Cauca del Gobierno Santos, hecho para explotar tierras ricas en oro, fuentes de agua, desarrollar cultivos para la industria de los biocombustibles, en beneficio de los capitalistas nacionales y extranjeros, siendo estos los nuevos motivos de la ofensiva de los señores de la guerra.
Intereses económicos, que hacen que el Estado burgués, terrateniente y proimperialista, defienda a sangre y fuego la sacrosanta propiedad privada que les permita a los capitalistas apropiarse de las ganancias; así como también explican la actuación de los guerrilleros de las FARC, que no están con el pueblo, y en palabras de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), “solo se cuidan ellos mismos… no impiden que lleguen las transnacionales; para conseguir los recursos que sostengan su ejército, hacen acuerdos con ellas.”
El gobierno de Santos miente descaradamente: no está en el Cauca para proteger la población, está para cometer atrocidades contra el pueblo a nombre de la ley, para matar compañeros como Fabián Eduardo Guetio, asesinado por el ejército en Caldono, a nombre de la defensa de la patria y sus instituciones.
Los compañeros están confrontando uno de los pilares del Estado, el ejército, y han puesto a temblar a todo el mundo, especialmente al gobierno de los “falsos positivos” de Santos, que no ha ordenado una masacre (como anteriormente lo hizo la burguesía en el Nilo y el Naya) por la movilización y beligerancia de las masas, por el estado de ánimo de todo el movimiento; no se han atrevido a ejecutar una nueva masacre, a pesar de los medios de comunicación reaccionarios que, como Caracol, han promovido todo el tiempo la mano dura, han llamado a ejercer la autoridad “legítima” de las armas, han manipulado la información y han ocultado los ríos de sangre de campesinos e indígenas masacrados por todo el departamento y el país.
Es una lucha contra el ejército, contra el Estado y por ello no deben hacerse falsas ilusiones de lograr la paz sin destruir ese Estado que defiende los privilegios de los que viven del trabajo ajeno; deben prepararse para luchar junto con sus hermanos obreros y campesinos, para barrer con la violencia revolucionaria de la guerra popular, la guerra de las masas, el podrido Estado de los explotadores, y así eliminar la causa de esta guerra reaccionaria, cuyo fondo es la lucha por la renta diferencial del suelo que produce la explotación capitalista del campo.
La justa rebeldía de los pueblos indígenas contra la guerra reaccionaria, contra el ejército burgués y la guerrilla, exige la unión de todos los explotados y oprimidos, para derrocar el poder de la burguesía y los terratenientes por medio de la Revolución Socialista, y construir el nuevo Estado de los Obreros y los Campesinos, única garantía de que los pueblos indígenas y las masas trabajadoras, puedan vivir en paz y armonía.
Reiteramos nuestro apoyo a la reivindicación de los compañeros indígenas:
¡Váyanse con su Guerra a Otra Parte!
¡Contra el Despojo de los Pobres del Campo:
Viva la Alianza Obrero Campesina!
Comité Ejecutivo
Unión Obrera Comunista (MLM)