El carácter inagotable de la materia
MELIUJIN, S. El problema de lo finito y lo infinito - Editorial Grijalbo, México, 1960, páginas 45-46.
tomado de la web Diamat.es
¿En qué consiste el carácter inagotable de los cuerpos? Ante todo, en que cada objeto material posee incontables propiedades en virtud de la ilimitada diversidad de sus enlaces con otros cuerpos. En que todo objeto material posee una compleja estructura especifica, que representa un tipo determinado de enlaces entre los elementos de la materia que lo integran. Por fin, en que los cuerpos experimentan constantes variaciones internas, ya que el movimiento (en sentido general) es una propiedad universal de la materia. Subrayando la complejidad de todas las clases de materia, Lenin señalaba que “la materia es infinita en profundidad”.
La tesis de que la materia es inagotable e infinita en profundidad no debe ser interpretada en el sentido que le da la teoría de la infinita divisibilidad de aquélla, ni considerar que los objetos están fomrados por una serie ilimitada de sistemas cada vez menores, cada uno de los cuales se encuentra dentro del otro lo mismo que en un cascarón, siendo idénticos en todo. La teoría de la divisibilidad inifnita de la materia es puramente especulativa y no toma en cuenta las peculiaridades de las diversas formas de la materia ni su mutua irreversibilidad. El hecho de que podamos dividir mentalmente los cuerpos en partes tan pequeñas como queramos no significa que esas partes existan objetivamente. Podemos imaginarnos la mitad de una molécula, la cuarta parte de un átomo o la quinta de un electrón, aunque objetivamente esas partes no existen en la naturaleza. Las micropartículas no son ni simples ni compuestas, aunque poseen estructura compleja. Existe un límite cualitativo para la división, pasado el cual la operación de fraccionamiento en partículas todavía más pequeñas pierde todo sentido físico.
Eso no significa, empero, que la ciencia vaya a encontrar algún día partículas carentes de toda estructura, que sean los elementos de máxima sencillez del cosmos. Cualesquiera que sean los microobjetos que se descubran en el futuro, todos poseerán estructura compleja y propiedades inagotables.
Esto se hace evidente si nos ponemos a pensar en la naturaleza de las propiedades de los cuerpso. en efecto, las propiedades fisico-químicas de todo objeto material están supeditadas fundamentalmente a su estructura, es decir, a sus nexos internos. Por ejemplo, las propeidades de los cuerpos macroscópicos dependen de su estructura molecual, las propiedades de las moléculas dependen del carácter de las uniones de los átomos que las componen y las propiedades de éstos de la interacción de partículas elementales del núcleo y la capa electrónica. Si existiesen microobjetos sin estructura, carecerían de las propiedades correspondientes y serían, por tanto, incapaces de interactuar con las diversas partículas. pero en tal caso dichos objetos no podrían agruparse en sistemas de grandes dimensiones y no se formarían ni átomos, ni moléculas, ni cuerpos macroscópicos.
Todo objeto material, por pequeño que sea, constituye una unidad de lo finito y lo infinito, unidad que tiene muchas manifestaciones concretas. anto todo, el concepto de finito caracteriza al cuerpo en el sentido de su limitación en el espacio y en el tiempo. Cada cuerpo tiene determinados límites y en la mayoría de los casos se le puede separar de otros cuerpos. Pero eso no significa que dentro del volumen espacial dado se encuentre toda la materia que forma o ha formado dicho objeto. Lo finito tiene como complemento indispensable lo infinito, es decir, lo que se sale del límite de lo finito.
MELIUJIN, S. El problema de lo finito y lo infinito - Editorial Grijalbo, México, 1960, páginas 45-46.
tomado de la web Diamat.es
¿En qué consiste el carácter inagotable de los cuerpos? Ante todo, en que cada objeto material posee incontables propiedades en virtud de la ilimitada diversidad de sus enlaces con otros cuerpos. En que todo objeto material posee una compleja estructura especifica, que representa un tipo determinado de enlaces entre los elementos de la materia que lo integran. Por fin, en que los cuerpos experimentan constantes variaciones internas, ya que el movimiento (en sentido general) es una propiedad universal de la materia. Subrayando la complejidad de todas las clases de materia, Lenin señalaba que “la materia es infinita en profundidad”.
La tesis de que la materia es inagotable e infinita en profundidad no debe ser interpretada en el sentido que le da la teoría de la infinita divisibilidad de aquélla, ni considerar que los objetos están fomrados por una serie ilimitada de sistemas cada vez menores, cada uno de los cuales se encuentra dentro del otro lo mismo que en un cascarón, siendo idénticos en todo. La teoría de la divisibilidad inifnita de la materia es puramente especulativa y no toma en cuenta las peculiaridades de las diversas formas de la materia ni su mutua irreversibilidad. El hecho de que podamos dividir mentalmente los cuerpos en partes tan pequeñas como queramos no significa que esas partes existan objetivamente. Podemos imaginarnos la mitad de una molécula, la cuarta parte de un átomo o la quinta de un electrón, aunque objetivamente esas partes no existen en la naturaleza. Las micropartículas no son ni simples ni compuestas, aunque poseen estructura compleja. Existe un límite cualitativo para la división, pasado el cual la operación de fraccionamiento en partículas todavía más pequeñas pierde todo sentido físico.
Eso no significa, empero, que la ciencia vaya a encontrar algún día partículas carentes de toda estructura, que sean los elementos de máxima sencillez del cosmos. Cualesquiera que sean los microobjetos que se descubran en el futuro, todos poseerán estructura compleja y propiedades inagotables.
Esto se hace evidente si nos ponemos a pensar en la naturaleza de las propiedades de los cuerpso. en efecto, las propiedades fisico-químicas de todo objeto material están supeditadas fundamentalmente a su estructura, es decir, a sus nexos internos. Por ejemplo, las propeidades de los cuerpos macroscópicos dependen de su estructura molecual, las propiedades de las moléculas dependen del carácter de las uniones de los átomos que las componen y las propiedades de éstos de la interacción de partículas elementales del núcleo y la capa electrónica. Si existiesen microobjetos sin estructura, carecerían de las propiedades correspondientes y serían, por tanto, incapaces de interactuar con las diversas partículas. pero en tal caso dichos objetos no podrían agruparse en sistemas de grandes dimensiones y no se formarían ni átomos, ni moléculas, ni cuerpos macroscópicos.
Todo objeto material, por pequeño que sea, constituye una unidad de lo finito y lo infinito, unidad que tiene muchas manifestaciones concretas. anto todo, el concepto de finito caracteriza al cuerpo en el sentido de su limitación en el espacio y en el tiempo. Cada cuerpo tiene determinados límites y en la mayoría de los casos se le puede separar de otros cuerpos. Pero eso no significa que dentro del volumen espacial dado se encuentre toda la materia que forma o ha formado dicho objeto. Lo finito tiene como complemento indispensable lo infinito, es decir, lo que se sale del límite de lo finito.
Última edición por pedrocasca el Lun Abr 30, 2012 7:58 pm, editado 1 vez