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Un interesante artículo del Pravda sobre los serbios de la Krajina y la Guerra de Yugoslavia.
Traducido con el google y cotejado con la versión rusa.
NOTA: tengo un par de dudas sobre alguna cosa que aparece en el artículo, pero aún así es mucho mejor que cualquier mierda que nos mostraron sobre el asunto los medios de comunicación occidentales, que se pasaron toda las guerras de la ex-Yugoslavia mintiendo descaradamente y haciendo con gusto de propaganda de los terroristas asesinos de la OTAN.
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El 7 de agosto se cumplieron 15 años de la invasión del ejército croata en la República Serbia de Krajina (Croacia). Miles de serbios fueron asesinados entonces, alrededor de medio millón tuvieron que huir. En la tragedia de los serbios de Croacia Occidente también jugó su papel.
Ситуация в Хорватии обострилась в 1990 г., когда президентом тогда ещё входящей в состав Югославии республики стал Франьо Туджман. La situación empeoró en Croacia en 1990 cuando Franjo Tudjman se convirtió en el presidente de la república de Croacia, todavía entonces constitutiva de Yugoslavia. Planteó la cuestión de la salida de la federación yugoslava. En diciembre de 1990, el Sabor (parlamento local) adoptó una nueva constitución, según la cual Croacia se declaró un "estado nacional del pueblo croata". La cuestión de la posible autonomía para la minoría serbia, de unas 700 mil personas, casi el 15% de la población de Croacia, no fue mencionada.
La respuesta no tardó en llegar. En algunas zonas del sur y el este de Croacia, donde los serbios eran mayoría, se celebró un referéndum según cuales se autoproclamaron tres autonomías serbias. Y éstas, en verano de 1991, declararon su decisión de separarse de Croacia.
Aquí se enfrentaron dos verdades. Por un lado, los croatas habían tenido su estado propio hacía mil años. Y querían recuperarlo. Además, el país era próspero en relación con el resto de Yugoslavia, y los contribuyentes croatas financiaban las repúblicas más pobres, como Kósovo, Macedonia o Bosnia. La insatisfacción con el hecho de alimentar a las zonas más pobres, intensificó el sentimiento separatista entre los croatas.
Por otro lado la minoría serbia vivía en Croacia desde hacía cientos de años, ellos también tenían su verdad. No querían perder el contacto con su país de origen étnico y convertirse en una minoría nacional. Además, el entonces presidente serbio, Slobodan Milosevic había prometido que no dejaría en la estacada a sus compatriotas serbios. Y los serbios de Croacia se consolaban con la esparanza de que Belgrado los ayudaría.
El 25 de junio de 1991 los diputados del Sabor, dominado por los croatas, anunciaron la secesión de Yugoslavia. Los serbios no deseaban esa separación y a finales de 1991 su gobierno autónomo en Croacia Oriental y Meridional se unieron formando la República Serbia de la Krajina, con capital en Knin. Esta nueva unidad política decidió separarse de Croacia.
Al mismo tiempo comenzó la lucha armada, y en verano de 1991 el conflicto se extendió por la mitad del territorio croata. Las unidades militares croatas abandonaron el Ejército Popular Yugoslavo y fundaron el nucleo de un ejército nacional. Los serbios locales recibieron ayuda del JNA (Ejército Popular Yugoslavo). Uno de los símbolos sombríos de la guerra fue la ciudad de Vukovar, que se convirtió en ruinas. Su población era mixta. Todos sufrieron. Y todos perdieron.
Los intentos de encontrar un acuerdo común entre croatas y serbios fracasaron. La situación se agravó por el hecho de que no había muchas zonas en Croacia que fueran étnicamente homogeneas. Los dos pueblos vivían entremezclados y reclamaban por lo tanto el mismo territorio. Y esto le dio una naturaleza aún más cruel al conflicto que se desarrolló entre 1991 y 1995. Tanto los croatas como los serbios asesinaron de manera masiva a "los extranjeros", ni siquiera tomaban prisioneros. El destino de Vukovar fue compartido por cientos de pueblos, tanto serbios como croatas.
En diciembre de 1992 surgió la experanza de poder solucionar el conflicto. El gobierno croata propuso la creación de dos regiones autónomas serbias, pero las autoridades de la Krajina se negaron. Zagreb no quiso hablar más de ningún tipo de autonomía.
La ONU, UE y los distintos paises occidentales tomaron partido en la situación de Croacia. Los EEUU y Europa apoyaron abiertamente al lado croata. Reconocieron la independencia croata, pero rechazaron hacer lo mismo con la Krajina serbia. Bajo la presión de Occidente, el JNA se retiró de Croacia. En enero de 1992 llegaron a la zona los cascos azules de la ONU. Sin embargo, el derramamiento de sangre continuó, aunque fuera a menor escala.
La reacción internacional a la conducta de cada una de las partes era totalmente diferente. El Tribunal de La Haya no hacía más que ocuparse de los serbios y los medios de comunicación repetían incansablemente sus "crímenes". Sin embargo no examinaban esas mismas acciones cuando venían de parte croata. Por ejemplo, los observadores de la ONU prepararon un informe sobre los crímenes que cometieron las fuerzas croatas en el destrito de Medak, pero aún no ha sido examinado en La Haya.
Poco a poco, los croatas hicieron cada vez más evidente su superioridad militar. A pesar del embargo de la ONU sobre los envíos de armas a la antigua Yugoslavia, los croatas recibieron armas de última tecnología de los países occidentales. En noviembre de 1994 los EEUU y Croacia firmaron un acuerdo de colaboración militar. Al mismo tiempo la Krajina Serbia tenía una aguda escasez de equipos militares y de municiones. En esos momentos ya ni siquieran recibían ayuda de Belgrado.
En mayo de 1995 tuvo lugar un punto de inflexión, el ejército croata lanzó la "Operación Relámpago" y ocupó la región de Eslavonia Occidental. Los cascos azules no hicieron absolutamente nada para evitarlo. En Junio el secretario de estado de los EEUU Warren Christopher y el ministro de asuntos exteriores de Alemania, Klaus Kinkel, dieron el visto bueno a una nueva operación militar de los croatas, "Oluja" (Tormenta), que comenzó el 4 de agosto de 1995.
Los 15 mil soldados de la Krajina Serbia, con un armamento anticuado, tuvieron que enfrentarse a un ejército croata de 70 mil soldados. La OTAN ofreció ayuda aerea a los croatas y bombardeó posiciones serbias. Los serbios no tuvieron ninguna opción. Las fuerzas de la ONU miraron tranquilamente como el ejército croata incendiaba decenas de aldeas serbias. El 5 de agosto Knin, la capital, era ocupada por el ejército croata. El 7 de agosto los croatas anunciaron la supresión de la autoproclamada república.
(Fin de la primera parte del artículo)
Traducido con el google y cotejado con la versión rusa.
NOTA: tengo un par de dudas sobre alguna cosa que aparece en el artículo, pero aún así es mucho mejor que cualquier mierda que nos mostraron sobre el asunto los medios de comunicación occidentales, que se pasaron toda las guerras de la ex-Yugoslavia mintiendo descaradamente y haciendo con gusto de propaganda de los terroristas asesinos de la OTAN.
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La tragedia no reconocida de la Krajina Serbia
El 7 de agosto se cumplieron 15 años de la invasión del ejército croata en la República Serbia de Krajina (Croacia). Miles de serbios fueron asesinados entonces, alrededor de medio millón tuvieron que huir. En la tragedia de los serbios de Croacia Occidente también jugó su papel.
Ситуация в Хорватии обострилась в 1990 г., когда президентом тогда ещё входящей в состав Югославии республики стал Франьо Туджман. La situación empeoró en Croacia en 1990 cuando Franjo Tudjman se convirtió en el presidente de la república de Croacia, todavía entonces constitutiva de Yugoslavia. Planteó la cuestión de la salida de la federación yugoslava. En diciembre de 1990, el Sabor (parlamento local) adoptó una nueva constitución, según la cual Croacia se declaró un "estado nacional del pueblo croata". La cuestión de la posible autonomía para la minoría serbia, de unas 700 mil personas, casi el 15% de la población de Croacia, no fue mencionada.
La respuesta no tardó en llegar. En algunas zonas del sur y el este de Croacia, donde los serbios eran mayoría, se celebró un referéndum según cuales se autoproclamaron tres autonomías serbias. Y éstas, en verano de 1991, declararon su decisión de separarse de Croacia.
Aquí se enfrentaron dos verdades. Por un lado, los croatas habían tenido su estado propio hacía mil años. Y querían recuperarlo. Además, el país era próspero en relación con el resto de Yugoslavia, y los contribuyentes croatas financiaban las repúblicas más pobres, como Kósovo, Macedonia o Bosnia. La insatisfacción con el hecho de alimentar a las zonas más pobres, intensificó el sentimiento separatista entre los croatas.
Por otro lado la minoría serbia vivía en Croacia desde hacía cientos de años, ellos también tenían su verdad. No querían perder el contacto con su país de origen étnico y convertirse en una minoría nacional. Además, el entonces presidente serbio, Slobodan Milosevic había prometido que no dejaría en la estacada a sus compatriotas serbios. Y los serbios de Croacia se consolaban con la esparanza de que Belgrado los ayudaría.
El 25 de junio de 1991 los diputados del Sabor, dominado por los croatas, anunciaron la secesión de Yugoslavia. Los serbios no deseaban esa separación y a finales de 1991 su gobierno autónomo en Croacia Oriental y Meridional se unieron formando la República Serbia de la Krajina, con capital en Knin. Esta nueva unidad política decidió separarse de Croacia.
Al mismo tiempo comenzó la lucha armada, y en verano de 1991 el conflicto se extendió por la mitad del territorio croata. Las unidades militares croatas abandonaron el Ejército Popular Yugoslavo y fundaron el nucleo de un ejército nacional. Los serbios locales recibieron ayuda del JNA (Ejército Popular Yugoslavo). Uno de los símbolos sombríos de la guerra fue la ciudad de Vukovar, que se convirtió en ruinas. Su población era mixta. Todos sufrieron. Y todos perdieron.
Los intentos de encontrar un acuerdo común entre croatas y serbios fracasaron. La situación se agravó por el hecho de que no había muchas zonas en Croacia que fueran étnicamente homogeneas. Los dos pueblos vivían entremezclados y reclamaban por lo tanto el mismo territorio. Y esto le dio una naturaleza aún más cruel al conflicto que se desarrolló entre 1991 y 1995. Tanto los croatas como los serbios asesinaron de manera masiva a "los extranjeros", ni siquiera tomaban prisioneros. El destino de Vukovar fue compartido por cientos de pueblos, tanto serbios como croatas.
En diciembre de 1992 surgió la experanza de poder solucionar el conflicto. El gobierno croata propuso la creación de dos regiones autónomas serbias, pero las autoridades de la Krajina se negaron. Zagreb no quiso hablar más de ningún tipo de autonomía.
La ONU, UE y los distintos paises occidentales tomaron partido en la situación de Croacia. Los EEUU y Europa apoyaron abiertamente al lado croata. Reconocieron la independencia croata, pero rechazaron hacer lo mismo con la Krajina serbia. Bajo la presión de Occidente, el JNA se retiró de Croacia. En enero de 1992 llegaron a la zona los cascos azules de la ONU. Sin embargo, el derramamiento de sangre continuó, aunque fuera a menor escala.
La reacción internacional a la conducta de cada una de las partes era totalmente diferente. El Tribunal de La Haya no hacía más que ocuparse de los serbios y los medios de comunicación repetían incansablemente sus "crímenes". Sin embargo no examinaban esas mismas acciones cuando venían de parte croata. Por ejemplo, los observadores de la ONU prepararon un informe sobre los crímenes que cometieron las fuerzas croatas en el destrito de Medak, pero aún no ha sido examinado en La Haya.
Poco a poco, los croatas hicieron cada vez más evidente su superioridad militar. A pesar del embargo de la ONU sobre los envíos de armas a la antigua Yugoslavia, los croatas recibieron armas de última tecnología de los países occidentales. En noviembre de 1994 los EEUU y Croacia firmaron un acuerdo de colaboración militar. Al mismo tiempo la Krajina Serbia tenía una aguda escasez de equipos militares y de municiones. En esos momentos ya ni siquieran recibían ayuda de Belgrado.
En mayo de 1995 tuvo lugar un punto de inflexión, el ejército croata lanzó la "Operación Relámpago" y ocupó la región de Eslavonia Occidental. Los cascos azules no hicieron absolutamente nada para evitarlo. En Junio el secretario de estado de los EEUU Warren Christopher y el ministro de asuntos exteriores de Alemania, Klaus Kinkel, dieron el visto bueno a una nueva operación militar de los croatas, "Oluja" (Tormenta), que comenzó el 4 de agosto de 1995.
Los 15 mil soldados de la Krajina Serbia, con un armamento anticuado, tuvieron que enfrentarse a un ejército croata de 70 mil soldados. La OTAN ofreció ayuda aerea a los croatas y bombardeó posiciones serbias. Los serbios no tuvieron ninguna opción. Las fuerzas de la ONU miraron tranquilamente como el ejército croata incendiaba decenas de aldeas serbias. El 5 de agosto Knin, la capital, era ocupada por el ejército croata. El 7 de agosto los croatas anunciaron la supresión de la autoproclamada república.
(Fin de la primera parte del artículo)
