[Iniciativa Comunista d´Asturies] La lucha de Tenneco, al combate con la unidad obrera

En la noche del 23 de Enero nos acercamos hasta la planta de Tenneco en Xixón con el objetivo de que los trabajadores pudiesen hablarnos de primera mano sobre  las últimas novedades del conflicto. Conocida como La Monroe, los trabajadores llevan en ella casi 5 meses de lucha. La posibilidad de que la multinacional americana intente llevarse la maquinaria para trasladar la producción a Polonia, obliga a los 230 obreros de La Monroe a turnarse para hacer guardias tanto diurnas, como nocturnas.

Raúl, de 39 años y con 13 trabajando en la cadena de montaje, era tajante en sus palabras: defenderemos la planta hasta las últimas consecuencias; pienso estar aquí encerrado hasta que haga falta-.

El día 17 de Octubre marcó un punto de inflexión en la lucha, la asamblea de trabajadores reunió a 15.000 personas en Xixón que clamaban contra el cierre de la fábrica. Pero esta lucha, y lo que ha conseguido hasta el día de hoy no sale de la nada, tenemos que dar un repaso a la historia sindical de la planta para formarnos una idea de lo lejos que se remonta esta heroica lucha.

La semilla de una lucha

La trayectoria de la fábrica siempre fue de lucha. Bernardino, miembro de la CSI, y que lleva 20 años de tornero, nos explica algunas de las luchas. -Los conflictos previos se basaron en la defensa de los derechos del trabajador eventual, en esta empresa siempre se luchó para que un eventual cobrara lo mismo que un fijo. Que entraran el mayor número de eventuales a ser fijos y que entraran con los mismos derechos- señala Benardino.

Heredamos unos buenos convenios, y unas condiciones laborales decentes porque siempre se luchó- completa Ignacio, miembro del comité de empresa por la CSI, con 12 años de trabajo. Incluso en el último convenio se consiguió que en la empresa no hubiera ETTs: -siempre se luchó porque hubiera trabajo de calidad-.

Luis, que trabaja en el mecanizado de ejes, es el entrevistado más veterano; entró a la fábrica en el 77. -En aquellos años hacíamos 2.000 amortiguadores diarios. En el momento de mayor producción llegamos a hacer unos 17.000. En 2008 la producción empieza a bajar y la empresa empieza a eliminar gente- nos cuenta Luis. Comienzan los EREs, y aunque los 2 primeros no fueron aceptados, los posteriores sí, y -a partir de ahí la empresa nos llevó al cierre-.

La Monroe siempre fue una empresa sindicalmente fuerte, y -gracias a eso se consiguió que desde el año 80, no existieran las horas extra. Así conseguimos que entrara mucha gente- concluye Luis.

El conflicto actual

En marzo de 2013 se despide al hasta entonces gerente de la planta xixonesa. Entonces llegó otro gerente, que era el que llevaba la fábrica de Ermua y -siguió todos los pasos, que, vistos desde la distancia, eran los pasos lógicos de un cierre, aunque aquí no lo queríamos ver- opina Raúl, de la CSI.

Se empieza a fabricar un stockaje, cuando la política de empresa hasta el momento era la de stockaje cero. -Pero como teníamos carga de trabajo, nos dijimos: vamos a seguir trabajando-.

Los trabajadores, tras el cambio de gerente, escuchaban rumores sobre una posible reestructuración de mano de obra indirecta (oficinas, administración), pero el 5 de septiembre de 2013, el gerente anuncia ante todos los obreros que la compañía ha decidido el cese de la actividad en Xixón.

Preguntamos por las primeras reacciones a Agustín, con 12 años de labor en el transporte de materiales. -Normalmente, cuando te dan una patada en los cojones, lo primero que haces es caer de rodillas. Ese día hubo compañeros que me lloraron. No nos entraba en la cabeza, sabíamos que la empresa tenía beneficios-.

Los primeros momentos no podían tener otra expresión: una mezcla de rabia y resignación al ver que de la noche a la mañana todos estaban en la calle. Un estado de incertidumbre predominaba en los trabajadores ante lo que se les venía encima. -Yo no aspiraba a tener un chalet en Somió ni un Mercedes, yo quería vivir tranquilo- nos cuenta Tomás de 47 años, y desde el año 92 en la cadena de montaje.

Pero la situación no podía mantenerse en el tiempo, y los trabajadores se vieron obligados a despertar y ponerse manos a la obra de defender sus puestos de trabajo: nadie lo iba a hacer por ellos.

En opinión de Tomás, -reaccionó muy rápido el comité de empresa. Tenemos una buena parte del comité, que trabajó mucho al principio, y nos unió.

Los trabajadores tenían claro que evitar el cierre de la planta, pasaba por aglutinarse en torno a la asamblea. Bernardino nos explica de que manera -el ‘éxito’ de este conflicto, es que las decisiones se acordó que se tomaran en la asamblea. Hacía nada que había cerrado Suzuki, y sabíamos que a las 48 horas del anuncio del cierre, se estaba negociando dinero. Por eso no permitimos que se metieran las federaciones sindicales-.

-Existe otra manera de hacer sindicalismo- resalta Ignacio,- y es no vender el puesto de trabajo del compañero. En las negociaciones se acordó desde la asamblea, que lo único que íbamos a pedir era el puesto de trabajo. Nunca dinero. Nos ponían delante el ‘plan social’ para firmar, y nosotros ni lo mirábamos-.

Según la última reforma laboral, se indemnizan los despidos con 20 días por año trabajado. En este caso, Tenneco llegó a ofrecer hasta 50 días. -La respuesta fue no. Queríamos que la fábrica siguiera abierta.

En ningún momento las intenciones de la empresa fueron otras que las de cerrar la fábrica. No querían negociar nada. Por eso, en palabras textuales de Ignacio, en la última reunión en el SASEC se dijo: yo no voy a firmar el despido de ningún compañero, me pongas lo que me pongas-.

Asturies, morriendo

-Asturies siempre ha sido una de las grandes olvidadas, siempre hemos estado en la esquina. Con la nueva reforma laboral, esa reforma que iba a generar trabajo, lo que nos ha generado es deslocalización. Vemos que las empresas se van, se va Suzuki, se va Coca-Cola, nos vamos nosotros… Las legislaciones que se han sacado no sirven para mantener el empleo. Asturies actualmente pende de un hilo, es dramático- nos responde con claridad Raúl, cuando le preguntamos por la situación que está viviendo Asturies y el pueblo asturiano.

Todos coinciden en la valoración, pero insisten en que el proceso de desindustrialización de Asturies puede pararse, si se pasa por la unidad obrera y por la lucha continua.

Proyecto de Unidad Obrera

El mismo 23 de Enero por la mañana, la asamblea de trabajadores de Tenneco convocaba a varias empresas asturianas en la misma o parecida situación: Cocinas Asturianas, Benito Sistemas, Cajastur, Subcontratas de Hunosa, Cébrano, Fundición Nodular, la lavandería del Hospital de Cabueñes, la Fábrica de Armas de Trubia, Matadero de Noreña, Coca-Cola, y afectados por la intoxicación con mercurio de Asturiana de Zinc.

Este proyecto se lleva a cabo por la necesidad crear un frente común de los trabajadores de todas las empresas afectadas por cierres o despidos. -¿Por qué lo hacemos nosotros?-se pregunta Tomás: porque no lo hace nadie- apunta. La falta de una estructura bien cimentada que defienda los intereses de los trabajadores, hace que los obreros de La Monroe tomen la iniciativa de la unidad obrera e intenten con todos sus medios parar el expolio industrial y la pésima situación laboral en Asturies.

-Creemos que hay muchísimos motivos para hacer una huelga general, al menos en Asturies, y no se ha hecho porque los sindicatos mayoritarios están en las poltronas y de ahí no se mueven- comenta Luis, que espera que -este proyecto que se inició hoy 23 de Enero, plante las bases para, si es necesario, hacer una huelga general en Asturies-.

Raúl también tiene claro el planteamiento del proyecto, y así nos lo explica: -Aunar el esfuerzo de toda la gente posible es importantísimo. Porque para la clase obrera, nuestra gran arma es la unión-. Y apunta de forma certera a los enemigos de clase que colaboran, de una u otra forma con las empresas que dejan Asturies sin industria ni trabajo: -Conseguir aunar distintos conflictos laborales, conseguir sacar a la gente a la calle… es ponerle las cosas difíciles tanto a los sindicatos mayoritarios, que están mirando para otro lado, mientras cobran las subvenciones estatales, como a los que están en el poder apoltronados y que huyen de nuestras situaciones. Vamos a incomodar mucho con esto. Porque intentamos crear un movimiento mayor, no solo 200 trabajadores-.

Conclusiones clarificadoras

De los trabajadores de La Monroe no podríamos decir otra cosa: son ejemplo de lucha y de dignidad obrera. Firmes en sus convicciones no se han dejado manipular ni por los representantes de partidos políticos que han ido a “darles la palmadita” en la espalda, ni por las federaciones de los sindicatos colaboradores con el sistema, que hubieran firmado, por más o menos dinero, a las primeras de cambio.

El día 31 de Enero, sabremos si el ERE presentado por la empresa se considera nulo o no, y si la empresa se verá obligada a readmitir a los trabajadores. En todo caso, como Tomás nos expresó, lo importante es que la lucha y la unidad sigan avanzando. Si estamos todos juntos, nos tienen miedo: es la solución, no tenemos otra. La clase obrera, o juntos, o a tomar por culo. Que esto continúe, para los que vengan detrás, para Xixón y para Asturies. El puesto de trabajo, o lo mantenemos, o nos lo roban.

Por eso, desde Iniciativa Comunista d’Asturies lo tenemos claro, el único camino para barrer el capitalismo es la unidad obrera desde la base, con ella el pueblo trabajador asturiano es invencible. Así mismo, hacemos un llamamiento a todo el pueblo asturiano para que se solidarice con las luchas obreras y en concreto a la clase obrera asturiana a que siguiendo con el ejemplo de lucha y dignidad de los compañeros de Tenneco tejan lazos de unidad obrera de base. Porque como decían los compañeros, solo mediante la unidad obrera en la lucha podremos superar este capitalismo que cada día nos asfixia más. Porque basta ya de trabajos precarios y condiciones de miseria, porque no hay salida en este sistema capitalista en descomposición, llamamos a la organización y a la lucha por una sociedad más justa al servicio de nuestros intereses, por la sociedad socialista al servicio de la clase obrera y los sectores populares.