[Iniciativa Comunista - I.C.] La Madreña no se cierra

La Madreña anunció la semana pasada imaginación y protestas para intentar detener el desalojo del centro social y ya se ha puesto a ello. Un grupo de unos 40 activistas se ha colado este lunes, a mediodía, en la sede regional de la Federación Socialista Asturiana, situada en la calle Santa Teresa de Oviedo. Entre ellos había un grupo de madres que usan la guardería autogestionada que gestiona el colectivo y con ellas han llevado a sus hijos de corta edad. El vestíbulo de entrada a la sede socialista se ha visto invadido por un aluvión de peluches, juguetes y potitos mientras los participantes, ante la imposibilidad de acceder a las oficinas o de conseguir una entrevista con los dirigentes del partido, improvisaban una asamblea.

En los primeros momentos de la protesta, ha habido tensión con los empleados del partido que intentaban impedir el acceso de los invasores y apagaron la luz para impedir la toma de imágenes. Después, la asamblea, que ha sido breve, se ha desarrollado sin interrupciones. Los participantes querían hacer llegar al secretario general de los socialistas y presidente del Principado, Javier Fernández, la petición de que pare el desalojo de la antigua sede de la Consejería de Sanidad en la calle General Elorza. El inmueble pertenece a la constructora pública Sedes y está okupado desde 2011. Un juez de primera instancia denegó la petición de la empresa para cerrar el centro, pero la Audiencia Provincial la revisó la semana pasada y ha dado siete días de plazo para vaciarlo. El colectivo exige a Fernández que, si su expulsión sigue adelante, encuentre otro local donde puedan seguir adelante con las actividades culturales y sociales que han puesto en marcha en estos tres años.

Las protestas seguirán esta semana. Una asamblea decidió la semana pasada llevar las reclamaciones ante todos los grupos políticos y hacerlas visibles en la campaña para las elecciones europeas. Además, el centro ha convocado una manifestación contra el cierre que recorrerá Oviedo el miércoles. Mientras, la actividad en General Elorza sigue adelante. La última iniciativa, recién anunciada, es la apertura de una sala de estudio para universitarios que, a diferencia de las gestionadas por el Ayutamiento, permanecerá abierta las 24 horas del día hasta el fin del calendario de exámenes.

El lunes dos furgones de la Policía Nacional se instalaron a las puertas del centro social ocupado y autogestionado de La Madreña, los agentes pretendían cumplir la orden que la Audiencia Provincial les envió vía fax, y entregar a los responsables del centro el requerimiento para abandonar el edificio en siete días. Una semana que comenzará a contar desde el momento de la recepción. Ayer por la mañana los agentes persistieron en el intento. Ninguna de la quincena de personas que fueron identificadas por los agentes recepcionó la orden. «Querían que firmáramos un papel. Pero no lo hicimos, somos meros usuarios del centro», comentaban los jóvenes. Por la tarde volvieron a intentarlo sin éxito: los usuarios se encerraron en el interior del centro, donde celebraron una asamblea.

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial, quien ordenó el desalojo, no especificó a quién debía ir dirigido el requerimiento. En todo caso, el auto para la clausura y precinto del edificio está dentro de un proceso judicial contra cinco usuarios, imputados por un presunto delito de usurpación. Por uno de ellos preguntaban los agentes.

Según explicaron fuentes judiciales, si en el plazo fijado el edificio permaneciera ocupado, el juez tendría que enviar otro requerimiento ordenando el desalojo forzoso del edificio que la empresa Sedes tiene en la calle General Elorza, donde antes se ubicaba la Consejería de Salud. Entre tanto, los usuarios de La Madreña intentan «que la vida siga lo más normalizada posible. Vamos a seguir aquí aunque intenten asustarnos», retaban.
Para protestar contra el desalojo y defender la cultura y actividades que allí desarrollan, a última hora de la tarde, cuando los furgones policiales se retiraron, La Madreña salió a la calle. Un improvisado concierto de Oboe-Bass ocupó la calzada frente al edificio de General Elorza durante cinco minutos. Sonó Santa Bárbara Bendita entre aplausos de gente que pasaba por el lugar, pitidos de apoyo y alguno de cabreo, también.

Esta misma tarde está convocada una manifestación en protesta por la decisión judicial. Partirá a las 20 horas del centro ocupado hacia la plaza de la Escandalera. Las acciones para mostrar el descontento comenzaron la pasada semana tras conocer el auto judicial. El jueves hubo una asamblea y un improvisado corte de tráfico, el domingo durante la preba de la sidra los usuarios se colocaron con pancartas y música en las inmediaciones de la calle Gascona y el lunes trasladaron su ludoteca a la recepción de la Federación Socialista de Asturias (FSA).

Los apoyos que ha recibido el centro ocupado y autogestionado también han sido muchos. Desde que se conociera la decisión de la Audiencia Provincial prácticamente a diario han llegado comunicados de diferentes colectivos rechazando el cierre del edificio.

Bomberos con La Madreña

Los bomberos del Principado de Asturias y de los ayuntamientos de Oviedo y de Gijón enviaron ayer un comunicado conjunto anunciando que «no colaboraremos en el desalojo» de La Madreña. Resaltan que el centro lleva «más de dos años dinamizando la vida del barrio de Pumarín con infinidad de actividades culturales, sociales y solidarias y no es labor de los bomberos contribuir a cerrar y dejar en la calle a colectivos que organizan las actividades».

«Entre nuestras funciones no figuran los desalojos y sí la de salvar vidas y apagar incendios», insisten los bomberos. Como ellos, la Coordinadora Ecoloxista d'Asturias, la Xunta pola Defensa de la Llingua Asturiana y Xunta Moza y el Partido del Trabajo Democrático enviaron notas de prensa de apoyo porque «es necesario defender este espacio abierto».