Alexyevich escribió: 26 de marzo escribió: SS-18 escribió: 26 de marzo escribió:
Bueno, pese a las maldades intinsecas del colonialismo y expansionismo español , mejor es eso a haber sido colonizado por los anglosajones por que estos si que se lo tomaban a pecho.
Podrias desarrollar este concepto que no entendi lo que quisiste expresar?
Pues que mientras en las excolonias de paises latinos y catolicos que colonizaron sudamerica hay un alto porcentaje de población indigena, mestizos, criollos, etc. En las "excolonias" anglosajonas, apenas los indigenas suponen una minoria.
las formas de colonización ya las estimo incluso Hitler en su librito , donde proferia insultos y desprecios a los Españoles por no valorar su raza y su sangre al mezclarse y alababa a la politica colonizadora de los Ingleses que eran tan "pulcros" con su "raza".
EL ejemplo aqui:
Los aborígenes de la tribu seminómada de los Mouheneer quedaron aquí aislados durante 10.000 años pero su hegemonía se terminó cuando los colonos ingleses desembarcaron y poco a poco se apropiaban del suelo para cultivarlo o convertirlo en pastos. Las tierras por las que tradicionalmente habían cazado a su antojo comenzaban a acotarse. Fue entonces cuando comenzaron las masacres, los aborígenes no aceptaban las vallas ni la propiedad privada del ganado que se paseaba por sus tierras y para los ingleses los aborígenes no eran más que unos animales más de la fauna tasmana que se podía matar sin reservas. Incluso, en 1.828, el gobernador Arthur proclamó una ley marcial que autorizaba a soldados y colonos arrestar o disparar sin restricciones a cualquier aborigen que se viese en terrenos colonizados.
Si el trato a los aborígenes en la Australia continental fue cruel, en Tasmania fue una tragedia inconmensurable, un genocidio concienzudo en todo su sentido literal. Las cifras ... escalofriantes. En 35 años, 4.000 aborígenes masacrados frente a los 183 europeos caídos. Fueron conceptuados como una plaga que había que exterminar. Incluso se realizó una tremenda batida con la "Black Line" -"Línea Negra"-, miles de colonos codo con codo, de un extremo a otro de la isla, avanzando con el efecto de una escoba de costa a costa, todos ellos armados con fusiles y disparando cuando avistaban a esos "seres negros" que sobraban. Tres semanas duró la cacería humana. No les exterminaron a todos pero los pocos que quedaron se ocultaron aterrorizados en los escondites más recónditos y fueron muriendo sin territorios de caza. Los capturados fueron trasladados a una reserva de la isla Flinders (al noreste de Tasmania) para ser "reeducados".
Los aborígenes comenzaron a morir sin reaccionar fruto de la desesperación, tristeza, falta de ganas de vivir, malnutrición, enfermedades, ... De los 135 indígenas desplazados a la isla tan solo 47 aborígenes originales sobrevivieron cuando llegó el día de su traslado a la reserva de Oyster Cove en 1.847. En 1.865 falleció el último varón de sangre aborigen pura; la última mujer -Truganini- subsistió en soledad hasta 1.876. Con su muerte, el pueblo de aborígenes de Tasmania había dejado de existir. Nació una nueva comunidad aborigen, un híbrido mezcla de razas y costumbres, europeas y aborígenes, que hoy en día constituye una comunidad de 6.500 personas asentadas principalmente en las islas Furneaux (noreste de Tasmania) pero que no pertenecen ni a un mundo ni al otro. Viven en su pequeño archipiélago, lejos de todo, recibiendo su pensión vitalicia y con pocas ganas de relacionarse con la "gran isla".
¿ Veis que metodicos y organizados son los anglosajones ?
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Lo que yo he estudiado en torno al comportamiento español en America Latina es una profunda incapacidad para dominar un complejo continente como era este con grandes distancias,obstaculos naturales practicamente infranqueables para la epoca,con el contrabando ingles,frances y holandes por todos lados,no creo que los españoles hayan sido mas tolerantes o buenos que los ingleses,solo eran mas atrasados y menos inteligentes,por ejemplo en la banda oriental (hoy Uruguay)se vivia de forma poco menos que anarquica sin autoridad en la mayor parte de los lugares,sin alambrados,etc y asi en muchos otros lugares que no tenian una importancia estrategica como lo fue el Peru,me parece que habria que analizar caso por caso el tema y ver los intereses economicos de cada lugar xa encontrar una respuesta a esto ya que los españoles evangelizaban por ejemplo con la biblia en la mano y un cuchillo para degollar al que se resistia en la otra,tmb hay que ver gestas como la de Tupac Amaru y ver como se resolvieron,en fin no me aventuraria a considerar a los españoles como menos salvajes o tolerantes que los ingleses pero estudiares un poco mas el tema haber que pasa,saludos.
El asunto del tema no pasa por echar la culpa del genocidio a X o Z país, ya que los responsables están bajo tierra hace siglos. El punto es dar a conocer este tema que es tan incómodo para muchas sociedades civilizadas, sobre todo las implicadas en el genocidio.
Se sabe que no en todos los países los colonos actuaron igual por diversas razones. Por ejemplo, en Chile los mapuches resistieron por mucho tiempo a la dominación española y hasta estos días se mantiene un número considerable en la región de La Araucanía. Prácticamente en el sur fue donde sobrevivió la mayoría de la población autóctona, el resto del país fue ocupado por los colonos españoles. Posteriormente vendrían colonos alemanes, italianos, suizos y de otros países europeos.
Sobre el Perú anterior a la conquista encontré unas aproximaciones demográficas:Los cálculos más aceptados de la población del Imperio inca son de 13 a 15 millones de habitantes (D. Noble Cook) aunque hay estimaciones más alcistas de hasta 35 millones como la de Means y bajistas con sólo 3 millones como la de Rosenblat. Los cálculos moderados defienden unas magnitudes poblacionales para esta área muy similares.
Aunque, en otros autores he leído que la población era de 10 millones. En todo caso la mayoría de autores hablan de entre 10 y 15 millones.
La disminución demográfica en América:El investigador estadounidense H. F. Dobyns5 ha calculado que un 95% de la población total de América murió en los primeros 130 años después de la llegada de Colón. Por su parte, Cook y Borah, de la Universidad de Berkeley, establecieron luego de décadas de investigación, que la población en México disminuyó de 25,2 millones en 1518 a 700 mil personas en 1623, menos del 3% de la población original.6 En 1492 España y Portugal juntas no superaban los 10 millones de personas7 y en toda Europa vivían entre 57 y 70 millones.8 México recién recuperaría la población que poseía en el siglo XV, en la década del 60 del siglo XX.
El historiador peruano Villanueva Sotomayor sostiene que:
Todo indica que el Tahuantinsuyo tenía quince millones de habitantes. En los tiempos de la Colonia la población indígena disminuyó drásticamente. En efecto, en 1620 la población llegaba sólo a los 600 mil habitantes. De 1532 a 1620, había 14.400.000 habitantes menos, en apenas 88 años.
La disminución media por década fue de 1.655.172 habitantes.
Por año: 165.517 habitantes..
Por día: 453 habitantes.
Todo esto, sin tener en cuenta el crecimiento vegetativo de su población.Los derechos de los indios no fueron tomados en cuenta para nada. A ningún conquistador le interesó velar por los naturales. El Consejo de Indias había dado un Código del Trabajo del Indígena Americano, que decía: "Los indios son libres. En consecuencia nadie que ejerza autoridad sea osado de cautivar indios naturales de las Indias, Islas y Tierra Firme del Mar Océano, así en tiempo y ocasión de paz como de guerra. Los indios e indias tengan, como debe, entera libertad para casarse con quien quisieran, así con indios como con españoles, y que en esto no se les ponga impedimento. Los indios pueden libremente comerciar con sus frutos y mantenimiento, así con los españoles, como con otros indios. Ordenamos y mandamos que sean castigados con mayor rigor los españoles que injuriaren u ofendieren o maltrataren a indios, que si los mismos delitos se cometieren contra españoles". Cada una de esas cuatro disposiciones fue letra muerta, lírica declaración.
Causas de la reducción demográfica:Las causas que explican el drástico descenso demográfico en América han sido siempre causa de polémica. Desde ámbitos generalmente ajenos a la historiografía, políticos, periodistas y organizaciones políticas actuales, así como autores nacionalistas e izquierdistas, han consignado que la catástrofe demográfica fue fruto de campañas de exterminio sistemático, por lo que se trataría de un genocidio. Otros historiadores, en la misma línea, han señalado que serían las condiciones brutales de la sociedad colonial las que serían las responsables de la catástrofe demográfica, señalando que estas condiciones de explotación, no accidentales, constituirían un genocidio. Los defensores del exterminio sistemático, en general, achacan la debacle demográfica a una acción intencionada de los europeos.
En general, ningún historiador niega que las condiciones de servidumbre y explotación a que fue sometida la población indígena, fue causa de muertes, pero algunos sostienen que ningún esfuerzo humano podría reducir de un 60 a un 95 de población indígena bajo un sistemático que no existió y a lo largo de un siglo.
Pero existe un gran consenso entre historiadores, demógrafos y ecólogos que apuntan a la introducción de enfermedades desconocidas por los indígenas, y para las que carecían de defensas, como la causa fundamental de la debacle demográfica, estimando entre un 75 y un 95% de disminución de población achacable a las enfermedades epidémicas debido a un proceso de unificación micróbica del mundo11 originado en occidente (Europa, Asia y África) debido a las dinámicas comerciales y que afectaron acumulativa y sucesivamente a indígenas de todas las edades.
[editar]Las epidemias como factor cuantitativo más importante
"Epidemia de viruela, Códice Florentino".
Desde la década de 1980, existe un amplio consenso entre los investigadores sobre la influencia de las epidemias introducidas por los europeos en el rápido declinar de la población nativa americana. Las cifras manejadas van desde un 30 a un 95% de la población que existía antes de la llegada de los europeos. Pocos historiadores niegan el carácter brutal de la conquista y la sociedad colonial, que contribuyeron a empeorar y agravar la situación, aunque algunos sí lo hacen, como Ricardo Levene,12 entre otros.
La demógrafa mexicana Elsa Malvido13 estableció que en México, entre 1518 y 1540 se produjeron tres grandes epidemias de viruela (la primera quizás también incluyó sarampión) que aniquilaron en forma inmediata a la población, causando la mortalidad del 80%.
El historiador hispanista de origen británico Henry Kamen15 analiza, en su obra Imperio, la debacle demográfica de la América Española. Así, consigna que la crueldad de los españoles fue indudable, señalando también que a los propios españoles el exterminio de los nativos no les convenía:
La crueldad que emplearon los españoles es incontrovertible. Fue despiadada, brutal y el régimen colonial jamás llegó a tenerla bajo control. Los españoles, por supuesto, no tenían interés alguno en destruir a los nativos; hacerlo, evidentemente, habría socavado su institución básica, la encomienda.
Henry Kamen, Imperio, ISBN 84-03-09316-0, pg. 153
Sin embargo, afirma también, citando la obra de David Noble Cook Born to Die. Disease and New World Conquest, 1492-1650, que tal crueldad no pudo ser la causa de la catástrofe demográfica que asoló la población nativa, dada la escasez de población europea:
Y sin embargo, la crueldad infrigida a los habitantes del Nuevo Mundo fue responsable de sólo una pequeña parte del desastre subsiguiente. Nunca hubo suficientes españoles en América para matar al enorme número de nativos que perecieron. Sin ninguna duda, el motivo principal del catastrófico descenso en la población de las Américas fueron las enfermedades infecciosas llevadas por los europeos. Los nativos del mundo atlántico no se libraron de enfermedades ni de epidemias. Y la invasión europea acarreó nuevas y crueles formas de morir. Las bacterias que portaban los españoles sacudieron la región caribeña tan pronto como Colón desembarcó y alcanzaron el continente incluso antes que Cortés. La primera gran epidemia (de viruela) se produjo en La Española, a finales de 1518, alcanzó México en 1520 y, al parecer, se extendió por América del Norte y probablemente también por el imperio incaico. [...] El impacto directo de las enfermedades fue devastador y así lo registraron los indios en sus crónicas. Hubo otras causas de mortandad masiva, pero todas fueron indirectas o con efectos a largo plazo.
[...]La llegada del europeo, aparte de las brutalidades que pudiera cometer más tarde, parece haber tenido únicamente un pequeño papel en la epopeya de un desastre de proporciones cósmicas. [...] El número total de personas afectadas nunca podrá calcularse con fiabilidad, pero no es exagerado sugerir que, entre los pueblos indígenas del Nuevo Mundo, más de un noventa por ciento de las muertes fueron causadas por enfermedades contagiosas más que por crueldad.
Kamen, H., ibid., pg. 154-156
El ecólogo Jared Diamond, en su obra Armas, gérmenes y acero, ganadora de un premio Pulitzer y varios premios al mejor libro científico (como el Royal Society Prize for Science Books), estima el impacto de las enfermedades introducidas por los europeos en un 95% de la población:
La viruela, el sarampión, la gripe, el tifus, la peste bubónica y otras enfermedades infecciosas endémicas en Europa tuvieron un papel decisivo en las conquistas europeas, al diezmar a muchos pueblos en otros continentes. Por ejemplo, una epidemia de de viruela devastó a los aztecas tras el fracaso del primer ataque español en 1520 y mató a Cuitláhuac, el emperador azteca que sucedió brevemente a Moctezuma. A lo largo de América, las enfermedades introducidas por los europeos se extendieron de tribu a tribu mucho antes de la llegada de los propios europeos, matando a un porcentaje estimado del 95% de la población nativa americana existente a la llegada de Colón.
Jared Diamond, Guns, germs and steel, ISBN 0-09-930278-0, pg. 77-78
Concuerda con el historiador Alfred Crosby quien en su libro "Imperialismo ecológico" plantea como la ecología "europea" consistente en animales, malas hierbas y vegetales implantados, pero sobretodo las infecciones y enfermedades prosperaron en América facilitando el triunfo de los europeos:
La viruela cruzó por primera vez (...) a finales de 1518 o comienzo del 1519, y durante los cuatro siglos siguientes desempeñaría un papel tan esencial en el avance del imperialismo blanco en ultramar como la pólvora. Quizàs un papel más importante, porque los indígenas hicieron que los mosquetes y después los rifles, se volvieran contra los intrusos, pero la viruela luchó muy raramente del lado de los indígenas. Normalmente los intrusos eran inmunes a ella así como a otras enfermedades infantiles del Viejo Mundo, la mayoría de las cuales eran nuevas a otro lado de los oceanos
Alfred Crosby, Imperialismo Ecólógico, ISBN 84-7423-367-4
El investigador Jorge Gelman, opinando sobre el debate del genocidio y la catástrofe demográfica en la Conquista de América, sostuvo:
No estoy seguro que el término (genocidio) sea el más adecuado, aunque no hay ninguna duda de la magnitud de la mortandad entre los pueblos indígenas americanos, que siguieron a la invasión y conquista europea. Las razones son muy variadas: seguramente desde el punto de vista cuantitativo lo peor fueron las enfermedades, pero estuvieron potenciadas por la explotación, las hambrunas, la separación de las familias por los sistemas de trabajo forzado.
Respecto al mismo debate, y en línea con Henry Kamen, la historiadora argentina María Sáenz Quesada niega las imputaciones de exterminio sistemático argumentando que los europeos no podían eliminar a su mano de obra:
Yo no diría que hubo asesinatos masivos, diría que hubo luchas. Los aztecas y Cortés por ejemplo lucharon. Masacres deliberadas para matar indígenas no hubo, por la simple razón de que eran la fuerza de trabajo que los españoles iban a usar.16
Robert McCaa introduce también las devastaciones ecológicas como factor agravante de la catástrofe demográfica:
El rol de las enfermedades no puede ser entendido sin tener en cuenta el cruel tratamiento a que se sometió a la masa de la población nativa (migración forzada, esclavitud, demandas laborales abusivas, y tributos exhorbitantes) y la devastación ecológica que acompañó la colonización española.
Otros investigadores, como Ward Churchill, profesor de ética de la Universidad de Colorado en Boulder y activista étnico, sostiene que si bien las enfermedades fueron la causa directa que más incidió en la catástrofe demográfica los europeos agudizaron intencionalmente su efecto:
¿Se echaron para atrás aterrados, diciéndose «un momento, hemos de poner coto a todo este proceso, o al menos ralentizarlo en la medida de lo posible, hasta que podamos afrontar una manera de impedir que se propaguen sus efectos?» Ni mucho menos. Su respuesta, en la totalidad del continente, consistió en acelerar la velocidad de propagación extendiéndola en la medida de lo humanamente posible.
Uno de los inconvenientes que se han señalado19 a la teoría de las epidemias como causa de la catástrofe demográfica, es que no se conoce ninguna pandemia que haya eliminado prácticamente la totalidad de la población de un continente, «debido a que, por norma, los virus, microbios y parásitos no acaban con la mayoría de sus víctimas».
Ni siquiera la Peste Negra, símbolo de la enfermedad virulenta, fue tan mortífera como se sostiene fueron estas epidemias. La primera incursión en Europa de la Peste Negra, entre 1347 y 1351, constituyó la clásica epidemia en territorio virgen. La mutación acababa de crear la variante pulmonar del bacilo conocido como yersinia pestis. Pero es que ni siquiera en aquella ocasión la enfermedad acabó con más de un tercio de sus víctimas.
Exterminio sistemáticoEl ministro de Defensa de Bélgica, André Flahaut, sostuvo en 2004 que en América del Norte se cometió el mayor genocidio de la historia mundial, afirmando que la debacle demográfica se debió al asesinato y el exterminio y minimizando el papel de las epidemias. El exterminio continuaría según el ministro hasta hoy en día. Así lo afirmó al presentar el 8 de abril de 2004 un informe del gobierno titulado Genocidios. La crónica periodística transcribe así sus afirmaciones:
...en América del Norte se cometió el mayor genocidio de la historia mundial (...) sólo en América del Norte fueron asesinados 15 millones de indígenas desde que Cristóbal Colón puso pie en este continente en 1492, y sugirió que el exterminio continúa hasta hoy. Otros 14 millones fueron masacrados en América del Sur (...). Aunque la cantidad de víctimas no se puede saber con certeza, sí existen pruebas irrefutables de una campaña deliberada de exterminación, despojo y aculturación de los pueblos nativos, opuestas a distintas teorías negacionistas. Tales teorías sostienen que las enfermedades que mataron a gran parte o la mayoría de los indígenas fueron un subproducto desafortunado del ”contacto” entre culturas.23
La Cumbre Continental de Pueblos y Organizaciones Indígenas, sostiene que han sido objeto de un proceso de genocidio:
Que los Pueblos Indígenas hemos sido víctimas por quinientos trece años de un proceso de genocidio, colonización y discriminación producto de ideologías y políticas imperiales, mismas que han violado nuestros derechos fundamentales. Cualquier diálogo entre Pueblos Indígenas, el Estado y la Sociedad, debe tomar en cuenta la naturaleza colectiva e histórica de estos derechos.24
El periodista y escritor Eduardo Galeano, autor de Las venas abiertas de América Latina, utilizando la palabra otrocidio como equivalente de genocidio, afirmando que los indígenas americanos fueron objeto de genocidio en nombre de la religión, lo que es equiparado con el genocidio que sufren actualmente debidos al progreso:
Al principio, el saqueo y el otrocidio fueron ejecutados en nombre del Dios de los cielos. Ahora se cumplen en nombre del dios del Progreso. Sin embargo, en esa identidad prohibida y despreciada fulguran todavía algunas claves de otra América posible.
América, ciega de racismo, no las ve.25
El historiador Oreste Carlos Cansanello,26 de la Universidad Nacional de Luján, refiriéndose a una polémica sobre el uso del término "genocidio", la suscribe, pero no como campaña de exterminio sistemático, sino fruto de la explotación de los indígenas para la extracción de metales preciosos:
[La conquista y colonización de América fue] una cruzada de evangelización, pero el principal objetivo fue la cruzada por la extracción de metales y eso derivó en la muerte de millones de habitantes, una muerte que no fue precisamente accidental, por eso fue un genocidio... Desde ningún punto de vista es salvable el genocidio indígena como ningún otro genocidio.16
Sin embargo, el historiador argentino Félix Luna hizo el siguiente comentario a una noticia difundida por la agencia oficial de noticias bajo el título Se cumplen 513 años del mayor genocidio de la historia:
Es sesgada y unilateral. Por supuesto que, al hablar de conquista, hubo violencia y crueldades, pero decir que fue el mayor genocidio de la historia es una exageración, y me asombra.27
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