El espacio postsoviético después de 20 años

Hace ya 20 años que la URSS dejó de existir y las nuevas 15 repúblicas independientes (además de otras cuatro repúblicas que se han independizado, de otras entidades estatales) comenzaron su existencia independiente, en lugar de la superpotencia.

En los últimos veinte años cada una de las repúblicas ex-soviéticas han seguido un camino de desarrollo diferenciado. Hay algunos países que han seguido, a pesar de las dificultades, una dirección que podemos considerar más o menos exitosa. En muchos aspectos han avanzado, y han superado la prueba de la independencia(1). Para otras en cambio esto ha supuesto más fracasos que éxitos. Tadyikistán, Kirguistán, Georgia, Moldova o Letonia son más bien del grupo de los perdedores.

En los países de Asia Central se puede observar una pobreza casi africana, la mayoría de las infraestructuras construidas en la época soviética han quedado destrozadas y podemos hablar de un proceso de desmodernización.

Georgia, que en la época soviética vivió un periodo de paz y relativo esplendor, en la práctica se ha dividido en varias partes, y los intentos de modernización inciados en el 2004 según las receptas clásicas neoliberales no han podido moderar el alto nivel de pobreza(2).

Moldova se ha dividido en dos partes. El territorio más industrializado, situado al otro lado del Dniester, se ha separado del país, y Moldova es ahora uno de los países más pobres de Europa, en la actualidad ni siquiera los dirigentes actuales de la república creen que el país pueda mantener su independencia(3).

Letonia ha quedado grávemente afectada por la crísis económica del 2008 (4), los indicadores demográficos del país son simplemente catastróficos, la emigración de la población es brutal, las divieras medidas restrictivas que se han sucedido no han hecho más que empeorar las consecuencias de la crisis, mientras que a consecuencia de una política nacional errada, hay una fuerte tensión étnica, por el momento solo en estado latente.

Estos veinte años dan una buena razón para comparar algunos datos de las repúblicas postsoviéticas en la actualidad con su situación en la URSS. Usemos para ello el CIA World Factbook (aunque algunos de sus datos son erróneas y deben ser corregidos).

Si hablamos del número de habitantes, la población soviética en 1989 era de 285 millones 743 mil personas. En el 2010 la población total de las repúblicas exsoviéticas es de 286,7 millones. Es decir, en 20 años no ha habido un cambio importante.

En diez repúblicas la población ha bajado, en dos ha subido. Todas las repúblicas donde ha habido un crecimiento de población son meridionales y musulmanas: Azerbaidyán, Turkmenistán, Uzbekistán, Kirguistán, Tadyikistán. (5)

El crecimiento más destacado ha sido el de Uzbekistán, donde en 20 años la población ha crecido en 10 millones de personas, de 19 a 28 millones. Pero en los demás países también hemos visto un crecimiento de población importante, en torno al 20% en los 20 años pasados.

No es casual que en esos países la edad media de la población sea muy baja, en Tadyikistán 22,6 años, en Turkmenistán 25,3, en Kirguistán 25, en Uzbekistán 25,7, en Azerbaidyán 28,8.

(...)

La única república "musulmana" donde en los últimos años ha bajado la población es Kazajstán, pero teniendo en cuenta las tendencias demográficas, esto es atribuible sobre todo al descenso de la población rusa.

En las repúblicas septentrionales, "cristianas", justo se ha producido el fenómeno contrario, el descenso y envejecimiento de la población. En todas las repúblicas "cristianas" ha bajado de manera pronunciada la poblacion desde 1989, sobre el 10% en países como Ucrania (de 51,5 millones a 45), Letonia (de 2,7 a 2,2), Georgia (de 5,4 a 4,6), Estonia (de 1,6 a 1,3 millones).

Teniendo en cuenta estos datos, la crisis demográfica de Rusia, aun siendo grave, no parece tan trágica. La población de la Federación Rusa ha bajado de 147 millones a 143 entre 1989 y el 2010, lo que en porcentaje es algo menor que en los casos anteriores.

(...)

En cuanto a la confesión religiosa y la composición nacional de la población, el problema es que los diversos censos han tenido lugar en peridos diferentes, además los datos religiosos muchas veces solo son estimaciones.

Lo que sí es evidente es que la población musulmana ha crecido con fuerza en la región. Mientras que en 1989 el porcentaje de rusos en la URSS era del 50,8% en la actualidad es con toda seguridad, menos.

No menos interesante es el valor del PIB per cápita(a Paridad de Poder Adquisitivo). En el 2010 la media mundial fue de 11.100 dólares, en la UE 32.900. Las diferencias entre las distintas repúblicas son muy acentuadas, algunas repúblicas se cuentan entre los países más pobres. Estonia es el país más rico, pero aún así, su PIB por persona está lejos de la media de la UE.

PIB per cápita en dólares:

Estonia: 19 mil
Lituania: 15.900
Rusia: 15.900
Letonia: 14.300
Belarus: 13.400
Kazajstán: 12.800
Azerbaidyán: 11 mil
Turkmenistán: 7400
Ucrania: 6.700
Armenia: 5.800
Georgia: 4.800
Uzbekistán: 3.100
Moldova: 2.500
Kirguistán: 2.200
Tadykististán: 2 mil

Quizás lo más curioso es que el PIB ruso per cápita ha superado el de Letonia y está igualado con el de Lituania(6). Es que tradicionalmente las repúblicas bálticas eran las más ricas dentro de la URSS, y después de la independencia, esta situación se ha mantenido bastante tiempo. Sin embargo, ahora, por primera vez el PIB ruso ha superado el letón y posíblemente dentro de poco hará lo mismo con el lituano(7).

Por supuesto en Rusia las diferencias regionales son abrumadoras. La región más pobre de Rusia, Ingushetia, el PIB es similar al de Nepal o al de algunos países africanos bien pobres.

La región más rica de Rusia es el Distrito Autónomo de Nenets, cuyo PIB per cápita (en el 2009) era de 72 mil dólares (!!!), más del doble, por ejemplo que el PIB alemán. En Moscú el PIB se acerca a la media de la UE (27 mil dólares) y está por encima del PIB húngaro (19.900 dólares).

Después de las repúblicas Bálticas y de Rusia, vienen Belarus y el Kazajstán. Los demás países son más pobres que la media mundial. Esto es aplicable incluso a la Azerbaidyán rica en petróleo, que a pesar de todo es el país más próspero del Cáucaso. El PIB azerí per cápita es casi el doble que el de Armenia. Georgia es el país más pobre del Cáucaso, a pesar de las reformas neoliberales de Saakashvili (o quizás por eso mismo).

En Asia Central solo el Kazajstán supera la media mundial, los demás países son considerados pobres. En este grupo está Turkmenistán, rico en gas, con solo 7400 dólares. El resto son países muy pobres con un PIB comparable al de los países africanos más pobres (Senegal, Sudán, Gambia, etc).

Un dato muy destacable es que el PIB per cápita de Ucrania sea inferior incluso al de Turkmenistán, aunque el país más pobre de Europa es Moldova (junto con Kósovo). (