Hablando de cultura
El sistema capitalista se caracteriza por la multitud de contradicciones que encierra, y en relación con la juventud estas se agudizan mucho más. Ello se refleja en la cultura y el ocio, como elementos de la superestructura ideológica y de los mecanismos de dominación.
La juventud vive un proceso de aprendizaje, en el que va conformando su concepción y visión del mundo, y definiendo su papel social y político. Es por ello que es una apuesta de vital importancia para la burguesía, buscando desviarla de la lucha política organizada y de la lucha de clases. Somos el blanco perfecto para instalar valores consumistas y alienantes, conformes con el capitalismo y que propagan un sentimiento de impotencia.
Esta lucha en la esfera de las ideas se lleva a cabo mediante todo el conjunto de aparatos ideológicos del Estado: planes de estudio, medios de comunicación, literatura, música…abiertamente liberales y anticomunistas.
En definitiva, se intenta naturalizar el actual funcionamiento de la sociedad, haciendo creer que el capitalismo es el único de los sistemas posibles y que es muy difícil o imposible cambiarlo.
Por otro lado, Los comunistas partimos de la base de que la cultura y el ocio deben estar enfocados al desarrollo de la conciencia unitaria de clase, creando una alternativa colectiva y solidaria. Desarrollando el concepto de reparto del tiempo de trabajo para trabajar todos y todas, elemento que posibilita el disfrute de nuestro tiempo libre. Impulsando pautas de vida y consumo alternativas, y fomentando el desarrollo personal y social de la juventud.
Por ello desde la UJCE, exigimos y luchamos:
•Por una concepción del ocio no consumista y que ponga el énfasis en el desarrollo personal y social.
•Por una oferta de ocio variada, gratuita y organizada desde la juventud, a partir de sus inquietudes, propuestas y necesidades.
•Por la difusión de un ocio que desarrolle el intercambio de conocimientos, experiencias y habilidades y que fomente la interculturalidad.
•Por una televisión pública y de calidad, en la que los contenidos culturales, educativos y formativos dispongan de su propio espacio, gestionada por las trabajadoras y los trabajadores.
•Por el desarrollo y fortalecimiento de los medios alternativos de comunicación
•Por la habilitación de espacios públicos donde las y los jóvenes puedan reunirse y organizar actividades.
Pues como dijo Martí “Un pueblo culto es un pueblo libre”
Extraído de la revista El Insolente
Puedes descargarte la revista completa o leer los artículos directamente en la web
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El sistema capitalista se caracteriza por la multitud de contradicciones que encierra, y en relación con la juventud estas se agudizan mucho más. Ello se refleja en la cultura y el ocio, como elementos de la superestructura ideológica y de los mecanismos de dominación.
La juventud vive un proceso de aprendizaje, en el que va conformando su concepción y visión del mundo, y definiendo su papel social y político. Es por ello que es una apuesta de vital importancia para la burguesía, buscando desviarla de la lucha política organizada y de la lucha de clases. Somos el blanco perfecto para instalar valores consumistas y alienantes, conformes con el capitalismo y que propagan un sentimiento de impotencia.
Esta lucha en la esfera de las ideas se lleva a cabo mediante todo el conjunto de aparatos ideológicos del Estado: planes de estudio, medios de comunicación, literatura, música…abiertamente liberales y anticomunistas.
En definitiva, se intenta naturalizar el actual funcionamiento de la sociedad, haciendo creer que el capitalismo es el único de los sistemas posibles y que es muy difícil o imposible cambiarlo.
Por otro lado, Los comunistas partimos de la base de que la cultura y el ocio deben estar enfocados al desarrollo de la conciencia unitaria de clase, creando una alternativa colectiva y solidaria. Desarrollando el concepto de reparto del tiempo de trabajo para trabajar todos y todas, elemento que posibilita el disfrute de nuestro tiempo libre. Impulsando pautas de vida y consumo alternativas, y fomentando el desarrollo personal y social de la juventud.
Por ello desde la UJCE, exigimos y luchamos:
•Por una concepción del ocio no consumista y que ponga el énfasis en el desarrollo personal y social.
•Por una oferta de ocio variada, gratuita y organizada desde la juventud, a partir de sus inquietudes, propuestas y necesidades.
•Por la difusión de un ocio que desarrolle el intercambio de conocimientos, experiencias y habilidades y que fomente la interculturalidad.
•Por una televisión pública y de calidad, en la que los contenidos culturales, educativos y formativos dispongan de su propio espacio, gestionada por las trabajadoras y los trabajadores.
•Por el desarrollo y fortalecimiento de los medios alternativos de comunicación
•Por la habilitación de espacios públicos donde las y los jóvenes puedan reunirse y organizar actividades.
Pues como dijo Martí “Un pueblo culto es un pueblo libre”
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