Manifiesto del Partido Comunista
A propósito de la unidad proletaria en todos los países en la huelga internacional
Ha pasado tiempo desde que, Carlos Marx y Federico Engels, redactaron el Manifiesto del Partido Comunista a pedido de la Liga de los Justos, que más adelante se convierte en la Liga de los Comunistas. El Manifiesto, es un libro de cabecera para todo revolucionario, la declaratoria de guerra al capitalismo y a la burguesía, base sólida de la teoría y práctica que formulan esto dos revolucionarios, dada a conocer en Londres, en febrero de 1848, en vísperas de la revolución de París.
Esta obra, muestra la cruda historia de la humanidad bajo la lucha de clases, a excepción de la comunidad primitiva. La clase de los proletarios, la burguesía, el papel de los comunistas, la naturaleza del capitalismo y las tareas que todo revolucionario debe realizar, son temas que vienen desarrollados en todo este folleto, primeramente publicado en 23 páginas, traducido en alemán, francés, inglés, polaco, ruso, danés, italiano y varios idiomas más, Marx y Engels, desde la realidad que viven en la época, trazan las condiciones que se deben cumplir para lograr el paso hacia una nueva sociedad, donde no existan explotados y explotadores.
“De todas las clases que hoy se enfrentan con la burguesía, sólo el proletariado es una clase verdaderamente revolucionaria. Las demás clases van degenerando y desaparecen con el desarrollo de la gran industria; el proletariado, en cambio, es su producto más peculiar.”
Esta afirmación hecha hace ciento sesenta y dos años, se mantiene vigente, hoy más que nunca, y se comprueba fácil cuando vemos a cientos de miles de migrantes, principalmente de pequeños campesinos que, arruinados por el propio capitalismo de México, marchan hacia Estados Unidos para volverse obreros de toda índole.
Recordando que hace poco se convocó a la Huelga Internacional por parte de sindicatos y organizaciones europeas, el día 29 de septiembre de este año, debemos hacer énfasis en que los comunistas se distinguen de las otras posiciones progresistas porque velan no sólo por los intereses del proletariado nacional, sino que hacen valer los intereses comunes de todo el proletariado, independientemente de la nacionalidad.
Esto quiere decir que los comunistas, en el lugar que estén, defenderán los intereses del proletariado, que significa, en palabras más claras, el derrocamiento de la burguesía, la conquista del poder político por el proletariado y la instauración del socialismo y el comunismo.
Parafraseando el Manifiesto. Se acusa a los comunistas de querer abolir la propiedad privada, de no velar por los intereses nacionales, de juzgar a la familia capitalista. Exacto lo decimos sin velos, el comunismo arrebata el poder de someter por la fuerza el trabajo ajeno, sí camaradas el comunismo, como los obreros no tienen patria, porque los obreros son explotados aquí y en China. Los comunistas odiamos el disimulo de estereotipo de familia, sí, la familia burguesa que valga decir sólo se desarrolla para la burguesía, mientras que, en contraste para el proletariado que, sin descanso, pierde todo vínculo familiar, transformando a los niños y a la mujer en artículos de comercio para su explotación.
Estos son algunos de los pensamientos que dan a conocer Marx y Engels en el Manifiesto, y brillantemente llaman en su última frase a la unidad obrera mundial.
Alrededor de treinta países, entre los que figuran Polonia, Bélgica, Chipre, Holanda, Grecia, España, Toronto, Portugal, Italia, Letonia, Lituania, República Checa, Serbia, Rumania, Irlanda, Francia, México y más, son escenarios de la demostración de fuerza y de organización que tiene el proletariado dentro de la Huelga Internacional. Valga para todos camaradas, darle una repasada al viejo, pero indudablemente vigente Manifiesto del Partido Comunista.
A nuestros camaradas recién incorporados a las filas de la lucha revolucionaria comunista debemos recomendar como una lectura indispensable para comprender la realidad.
A propósito de la unidad proletaria en todos los países en la huelga internacional
Ha pasado tiempo desde que, Carlos Marx y Federico Engels, redactaron el Manifiesto del Partido Comunista a pedido de la Liga de los Justos, que más adelante se convierte en la Liga de los Comunistas. El Manifiesto, es un libro de cabecera para todo revolucionario, la declaratoria de guerra al capitalismo y a la burguesía, base sólida de la teoría y práctica que formulan esto dos revolucionarios, dada a conocer en Londres, en febrero de 1848, en vísperas de la revolución de París.
Esta obra, muestra la cruda historia de la humanidad bajo la lucha de clases, a excepción de la comunidad primitiva. La clase de los proletarios, la burguesía, el papel de los comunistas, la naturaleza del capitalismo y las tareas que todo revolucionario debe realizar, son temas que vienen desarrollados en todo este folleto, primeramente publicado en 23 páginas, traducido en alemán, francés, inglés, polaco, ruso, danés, italiano y varios idiomas más, Marx y Engels, desde la realidad que viven en la época, trazan las condiciones que se deben cumplir para lograr el paso hacia una nueva sociedad, donde no existan explotados y explotadores.
“De todas las clases que hoy se enfrentan con la burguesía, sólo el proletariado es una clase verdaderamente revolucionaria. Las demás clases van degenerando y desaparecen con el desarrollo de la gran industria; el proletariado, en cambio, es su producto más peculiar.”
Esta afirmación hecha hace ciento sesenta y dos años, se mantiene vigente, hoy más que nunca, y se comprueba fácil cuando vemos a cientos de miles de migrantes, principalmente de pequeños campesinos que, arruinados por el propio capitalismo de México, marchan hacia Estados Unidos para volverse obreros de toda índole.
Recordando que hace poco se convocó a la Huelga Internacional por parte de sindicatos y organizaciones europeas, el día 29 de septiembre de este año, debemos hacer énfasis en que los comunistas se distinguen de las otras posiciones progresistas porque velan no sólo por los intereses del proletariado nacional, sino que hacen valer los intereses comunes de todo el proletariado, independientemente de la nacionalidad.
Esto quiere decir que los comunistas, en el lugar que estén, defenderán los intereses del proletariado, que significa, en palabras más claras, el derrocamiento de la burguesía, la conquista del poder político por el proletariado y la instauración del socialismo y el comunismo.
Parafraseando el Manifiesto. Se acusa a los comunistas de querer abolir la propiedad privada, de no velar por los intereses nacionales, de juzgar a la familia capitalista. Exacto lo decimos sin velos, el comunismo arrebata el poder de someter por la fuerza el trabajo ajeno, sí camaradas el comunismo, como los obreros no tienen patria, porque los obreros son explotados aquí y en China. Los comunistas odiamos el disimulo de estereotipo de familia, sí, la familia burguesa que valga decir sólo se desarrolla para la burguesía, mientras que, en contraste para el proletariado que, sin descanso, pierde todo vínculo familiar, transformando a los niños y a la mujer en artículos de comercio para su explotación.
Estos son algunos de los pensamientos que dan a conocer Marx y Engels en el Manifiesto, y brillantemente llaman en su última frase a la unidad obrera mundial.
Alrededor de treinta países, entre los que figuran Polonia, Bélgica, Chipre, Holanda, Grecia, España, Toronto, Portugal, Italia, Letonia, Lituania, República Checa, Serbia, Rumania, Irlanda, Francia, México y más, son escenarios de la demostración de fuerza y de organización que tiene el proletariado dentro de la Huelga Internacional. Valga para todos camaradas, darle una repasada al viejo, pero indudablemente vigente Manifiesto del Partido Comunista.
A nuestros camaradas recién incorporados a las filas de la lucha revolucionaria comunista debemos recomendar como una lectura indispensable para comprender la realidad.