http://www.publico.es/internacional/343382/una-base-espanola-en-irak-sirvio-de-centro-de-interrogatorios
Una base española en Irak sirvió de centro de interrogatorios
Los documentos publicados por Wikileaks muestran que varios sospechosos fueron llevados a Camp Echo para hacerles "más preguntas"
Entre el 1 de enero de 2004 -fecha de los primeros datos sobre la guerra de Irak desvelados el pasado sábado por Wikileaks- y el 20 de mayo del mismo año -fecha del final de la retirada de las tropas españolas-, la palabra "interrogatorio" o "interrogado" aparece en esos archivos al menos 122 veces.
Estos interrogatorios se llevaban a cabo en Camp Echo, la base de las tropas españolas en la localidad iraquí de Diwaniya, cerca de Bagdad. No hay detalles sobre la forma en que se conducían estas sesiones.
Dos documentos llaman la atención. El primero, del 7 de enero de 2004, a las 5.45 horas, el informe militar explica en lenguaje codificado que, tras una operación en una casa del norte de Diwaniya, un hombre y una mujer fueron detenidos, aunque sólo el hombre fue llevado a la base "F_G" para ser interrogado "con más profundidad". La base "F_G" es Camp Echo, como llamaban las fuerzas de Estados Unidos a la base española de Diwaniya. El informe no da más detalles sobre el interrogatorio; no se sabe quién lo llevó a cabo, ni si el sospechoso fue torturado.
El segundo documento data del 11 de febrero de 2004, a las 12 horas, que también habla de further questionning ("más preguntas") a un grupo de insurgentes arrestados por la policía iraquí tras atacar a las fuerzas españolas. Entre abril de 2003 y mayo de 2004, lo que duró la misión de España en el país árabe, 13 soldados españoles fallecieron. El Ministerio de Defensa no quiso ayer comentar la noticia.
La operación del 7 de enero de 2004, dice el informe, se llevó a cabo junto con la policía iraquí en la casa de un supuesto insurgente. Se hallaron cuatro fusiles autómaticos kalashnikov y varias granadas cuyo mal estado obligó a las fuerzas internacionales a hacerlas estallar en el lugar. El hombre detenido fue llevado al detention facility de la base española; es decir, al centro de interrogaciones. El texto militar no informa de la suerte que corrió su mujer. "La operación concluyó sin heridos", asegura la nota.
El segundo texto, del 11 de febrero de 2004, es mucho más breve. "Hubo una explosión a unos (...) metros del acceso norte de la base F_G [Camp Echo] que afectó a una patrulla
(...). Hubo seis soldados heridos en acción. La causa de la explosión es una bomba con control remoto adosada a una bicicleta. Los dos insurgentes detenidos por la policía iraquí fueron trasladados a la base F_G para más preguntas".
Este texto, como en todos los archivos desvelados por Wikileaks, no menciona la nacionalidad de los soldados desplegados. Todos pertenecen a la "Coalición Internacional". Lo que sí sabemos, pues la prensa lo reseñó hace ahora seis años, es que ese mismo día, el 11 de febrero, dos blindados españoles cayeron en una emboscada en Diwaniya. Cinco soldados españoles resultaron entonces heridos.
La reacción de Exteriores
Desde Luxemburgo, donde la ministra española de Asuntos Exteriores se reunía ayer con sus homólogos de la Unión Europea, Trinidad Jiménez dijo en relación a las revelaciones de Wikileaks: "Todo lo que suponga transparencia es bueno para cualquier democracia, siempre que la transparencia mantenga una coherencia y una relación con elementos que tienen que ver con la seguridad nacional". La ministra dejó claro que la filtración "no afecta a España".
Sin embargo, entre los 391.831 informes de "acciones significativas" redactados por las tropas estadounidenses en Irak y destapados por la página web dirigida por Julian Assange, la inmensa mayoría que hablan de Camp Echo y de Camp Golf (la otra base española, en la ciudad de Nayaf) relata ataques contra los soldados. Los 3 y 4 de abril de 2004 fueron particularmente duros para los españoles. Delante de la puerta de Camp Golf, "un grupo de personas desarmadas se reunieron para pedir la liberación de (...)", dice el documento sin precisar el nombre del detenido. La misma escena se vivió en Diwaniya, delante de Camp Echo.
El 3 de abril, los iraquíes pedían la liberación de Mustafá Al Yaqubi, importante líder de la insurgencia chií. Al día siguiente, se registran varios ataques contra las dos bases españolas de Diwaniya y de Nayaf. Los españoles tuvieron que responder con fuego y dos resultaron heridos. La "misión de paz" de José María Aznar se convirtió en este instante en una operación de guerra. José Luis Rodríguez Zapatero ya había anunciado la retirada.
Publico.es
Una base española en Irak sirvió de centro de interrogatorios
Los documentos publicados por Wikileaks muestran que varios sospechosos fueron llevados a Camp Echo para hacerles "más preguntas"
Entre el 1 de enero de 2004 -fecha de los primeros datos sobre la guerra de Irak desvelados el pasado sábado por Wikileaks- y el 20 de mayo del mismo año -fecha del final de la retirada de las tropas españolas-, la palabra "interrogatorio" o "interrogado" aparece en esos archivos al menos 122 veces.
Estos interrogatorios se llevaban a cabo en Camp Echo, la base de las tropas españolas en la localidad iraquí de Diwaniya, cerca de Bagdad. No hay detalles sobre la forma en que se conducían estas sesiones.
Dos documentos llaman la atención. El primero, del 7 de enero de 2004, a las 5.45 horas, el informe militar explica en lenguaje codificado que, tras una operación en una casa del norte de Diwaniya, un hombre y una mujer fueron detenidos, aunque sólo el hombre fue llevado a la base "F_G" para ser interrogado "con más profundidad". La base "F_G" es Camp Echo, como llamaban las fuerzas de Estados Unidos a la base española de Diwaniya. El informe no da más detalles sobre el interrogatorio; no se sabe quién lo llevó a cabo, ni si el sospechoso fue torturado.
El segundo documento data del 11 de febrero de 2004, a las 12 horas, que también habla de further questionning ("más preguntas") a un grupo de insurgentes arrestados por la policía iraquí tras atacar a las fuerzas españolas. Entre abril de 2003 y mayo de 2004, lo que duró la misión de España en el país árabe, 13 soldados españoles fallecieron. El Ministerio de Defensa no quiso ayer comentar la noticia.
La operación del 7 de enero de 2004, dice el informe, se llevó a cabo junto con la policía iraquí en la casa de un supuesto insurgente. Se hallaron cuatro fusiles autómaticos kalashnikov y varias granadas cuyo mal estado obligó a las fuerzas internacionales a hacerlas estallar en el lugar. El hombre detenido fue llevado al detention facility de la base española; es decir, al centro de interrogaciones. El texto militar no informa de la suerte que corrió su mujer. "La operación concluyó sin heridos", asegura la nota.
El segundo texto, del 11 de febrero de 2004, es mucho más breve. "Hubo una explosión a unos (...) metros del acceso norte de la base F_G [Camp Echo] que afectó a una patrulla
(...). Hubo seis soldados heridos en acción. La causa de la explosión es una bomba con control remoto adosada a una bicicleta. Los dos insurgentes detenidos por la policía iraquí fueron trasladados a la base F_G para más preguntas".
Este texto, como en todos los archivos desvelados por Wikileaks, no menciona la nacionalidad de los soldados desplegados. Todos pertenecen a la "Coalición Internacional". Lo que sí sabemos, pues la prensa lo reseñó hace ahora seis años, es que ese mismo día, el 11 de febrero, dos blindados españoles cayeron en una emboscada en Diwaniya. Cinco soldados españoles resultaron entonces heridos.
La reacción de Exteriores
Desde Luxemburgo, donde la ministra española de Asuntos Exteriores se reunía ayer con sus homólogos de la Unión Europea, Trinidad Jiménez dijo en relación a las revelaciones de Wikileaks: "Todo lo que suponga transparencia es bueno para cualquier democracia, siempre que la transparencia mantenga una coherencia y una relación con elementos que tienen que ver con la seguridad nacional". La ministra dejó claro que la filtración "no afecta a España".
Sin embargo, entre los 391.831 informes de "acciones significativas" redactados por las tropas estadounidenses en Irak y destapados por la página web dirigida por Julian Assange, la inmensa mayoría que hablan de Camp Echo y de Camp Golf (la otra base española, en la ciudad de Nayaf) relata ataques contra los soldados. Los 3 y 4 de abril de 2004 fueron particularmente duros para los españoles. Delante de la puerta de Camp Golf, "un grupo de personas desarmadas se reunieron para pedir la liberación de (...)", dice el documento sin precisar el nombre del detenido. La misma escena se vivió en Diwaniya, delante de Camp Echo.
El 3 de abril, los iraquíes pedían la liberación de Mustafá Al Yaqubi, importante líder de la insurgencia chií. Al día siguiente, se registran varios ataques contra las dos bases españolas de Diwaniya y de Nayaf. Los españoles tuvieron que responder con fuego y dos resultaron heridos. La "misión de paz" de José María Aznar se convirtió en este instante en una operación de guerra. José Luis Rodríguez Zapatero ya había anunciado la retirada.
Publico.es