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A los fans del más famoso detective de todos los tiempos, me refiero como no a Sherlock Holmes, no les resultará desconocido el nombre de baritsu. Este es el nombre que el inmortal héroe creado por sir Arthur Conan Doyle utilizó para denominar el sistema de defensa personal que Holmes dominaba, como recuerdaen la casa deshabitada (1901)''vacilamos junto al borde de la cascada. Yo tenía, sin embargo algún conocimiento del baritsu, o del sistema de lucha japonés, que más de una vez me ha sido muy útil.''
Como todo lo que sucede en las historias de Conan Doyle, realidad y ficción se confunden con bastante facilidad. En esta ficción-realidad también se incluye el baritsu, cuyo nombre real es bartitsu, un sistema marcial que por esa época desarrolló en Inglaterra Edward William Barton-Wright (1860-1951) un ingeniero británico que había vivido en Japón hacia finales del siglo XIX y principios del XX, construyendo el ferrocarril.
Fascinado por las técnicas de lucha japonesas, Barton-Wright, creo el bartitsu (nombre que procede de una contracción de su propio apellido con la palabra jujutsu) con unos principios que básicamente son los del propio jujutsu:
1.Para alterar el equilibrio de su agresor.
2.Para sorprenderle antes de que tenga tiempo de recuperar el equilibrio y el uso de su fuerza.
3.Si es necesario someter a las articulaciones de las partes de su cuerpo, ya sea el cuello, hombro, codo, muñeca, espalda, rodilla, tobillo, etc en los puntos en los que anatómicamente y mecánicamente no se pueda resistir.
Aunque su estilo estaba basado en el boxeo inglés antiguo, en el savate, el ``judo´´, la lucha suiza schwingen, y un estilo defensivo de lucha con bastón perfeccionado por Pierre Vigny.
Lo que realmente es importante, es que sin duda estamos ante uno de los primeros intentos por tratar de sistematizar las artes marciales japonesas y aplicarlas en el mundo moderno. Hay que tener en cuenta que Barton-Wright estaba en Japón hacia 1893 (O Sensei, fundador del aikido nació en 1883) y que su club de lucha (por cierto frecuentado por gente de la aristocracia) estaba activo en Londres en los años 1899-1902, dicen que cerró entre otras cosas debido a las altas tarifas que cobraba y a una disputa con su instructor de jujutsu. Durante su estancia en Japón (ver enlaces al final del articulo) estuvo en contacto con distintas koryu de jujustu, básicamente judo y . Hasta la fecha, creo que no existe ninguna referencia de ningún occidental que tan prontamente se haya dedicado al estudio de las artes marciales japonesas hasta el punto de llegar a desarrollar un sistema propio.
Desde una óptica historiografica son numerosas las consideraciones que nos podemos plantear y que sin duda merecerían un estudio riguroso. En primer lugar nos demuestra la importancia que las artes marciales antiguas tenían de facto en la sociedad del período Meiji, quizás más de lo que podríamos pensar pues vemos que tuvieron un reflejo inmediato para algunos occidentales que viajaron al país del sol naciente en ese tiempo. Por otra lado, también nos ayudaría a ver con lupa a la bulliciosa sociedad británica de finales de la época Victoriana, modos de vida, ocio e intereses de una sociedad burguesa que busca formas para poder defenderse en una ciudad cada vez más atestadas de ladrones y rateros varios, pero esa es otra historia.
Este arte marcial no solo fue enseñado a hombres sino que las mujeres tambien tomaron parte activa en su aprendizaje siendo varias veces con resultado victorioso por las sufragistas frente a las cargas policiales, llegando a ser este arte marcial un símbolo.
Barton-Wright falleció en 1950 a los 90 años de edad y su legado esta siendo reconocido y estudiado con detalle, como sin duda merece un hombre adelantado a su tiempo. Resulta además sorprendente que en su últimos años utilizó este mismo nombre para sus estudios como terapeuta físico, en donde utilizó técnicas tan innovadoras como controvertidas (terapias basadas en luz, calor y radiación)
Desde que cerró su gimnasio el Bartitsu dejó de ser practicado hasta que en el año 2002 se creó la Bartitsu Society un grupo de estudio que a partir de los artículos de Barton-Wright que había en la biblioteca Británica volvió ser practicado, hoy en día hay grupos similares a la Bartitsu Society en Alemania, Italia, incluso Israel
Como todo lo que sucede en las historias de Conan Doyle, realidad y ficción se confunden con bastante facilidad. En esta ficción-realidad también se incluye el baritsu, cuyo nombre real es bartitsu, un sistema marcial que por esa época desarrolló en Inglaterra Edward William Barton-Wright (1860-1951) un ingeniero británico que había vivido en Japón hacia finales del siglo XIX y principios del XX, construyendo el ferrocarril.
Fascinado por las técnicas de lucha japonesas, Barton-Wright, creo el bartitsu (nombre que procede de una contracción de su propio apellido con la palabra jujutsu) con unos principios que básicamente son los del propio jujutsu:
1.Para alterar el equilibrio de su agresor.
2.Para sorprenderle antes de que tenga tiempo de recuperar el equilibrio y el uso de su fuerza.
3.Si es necesario someter a las articulaciones de las partes de su cuerpo, ya sea el cuello, hombro, codo, muñeca, espalda, rodilla, tobillo, etc en los puntos en los que anatómicamente y mecánicamente no se pueda resistir.
Aunque su estilo estaba basado en el boxeo inglés antiguo, en el savate, el ``judo´´, la lucha suiza schwingen, y un estilo defensivo de lucha con bastón perfeccionado por Pierre Vigny.
Lo que realmente es importante, es que sin duda estamos ante uno de los primeros intentos por tratar de sistematizar las artes marciales japonesas y aplicarlas en el mundo moderno. Hay que tener en cuenta que Barton-Wright estaba en Japón hacia 1893 (O Sensei, fundador del aikido nació en 1883) y que su club de lucha (por cierto frecuentado por gente de la aristocracia) estaba activo en Londres en los años 1899-1902, dicen que cerró entre otras cosas debido a las altas tarifas que cobraba y a una disputa con su instructor de jujutsu. Durante su estancia en Japón (ver enlaces al final del articulo) estuvo en contacto con distintas koryu de jujustu, básicamente judo y . Hasta la fecha, creo que no existe ninguna referencia de ningún occidental que tan prontamente se haya dedicado al estudio de las artes marciales japonesas hasta el punto de llegar a desarrollar un sistema propio.
Desde una óptica historiografica son numerosas las consideraciones que nos podemos plantear y que sin duda merecerían un estudio riguroso. En primer lugar nos demuestra la importancia que las artes marciales antiguas tenían de facto en la sociedad del período Meiji, quizás más de lo que podríamos pensar pues vemos que tuvieron un reflejo inmediato para algunos occidentales que viajaron al país del sol naciente en ese tiempo. Por otra lado, también nos ayudaría a ver con lupa a la bulliciosa sociedad británica de finales de la época Victoriana, modos de vida, ocio e intereses de una sociedad burguesa que busca formas para poder defenderse en una ciudad cada vez más atestadas de ladrones y rateros varios, pero esa es otra historia.
Este arte marcial no solo fue enseñado a hombres sino que las mujeres tambien tomaron parte activa en su aprendizaje siendo varias veces con resultado victorioso por las sufragistas frente a las cargas policiales, llegando a ser este arte marcial un símbolo.
Barton-Wright falleció en 1950 a los 90 años de edad y su legado esta siendo reconocido y estudiado con detalle, como sin duda merece un hombre adelantado a su tiempo. Resulta además sorprendente que en su últimos años utilizó este mismo nombre para sus estudios como terapeuta físico, en donde utilizó técnicas tan innovadoras como controvertidas (terapias basadas en luz, calor y radiación)
Desde que cerró su gimnasio el Bartitsu dejó de ser practicado hasta que en el año 2002 se creó la Bartitsu Society un grupo de estudio que a partir de los artículos de Barton-Wright que había en la biblioteca Británica volvió ser practicado, hoy en día hay grupos similares a la Bartitsu Society en Alemania, Italia, incluso Israel
