“En el pasado hubo algunos grupos maoístas o trotskistas, pero hoy son casi inexistentes”, dice Esteban Silva, del Socialismo-Allendista. Eduardo Artes, del PC(AP), agrega que “lo que hay es una izquierda que busca un protagonismo obrero y popular independiente”.
Consultado por los hechos de violencia generados durante los dos días de paro nacional convocados por la Central Unitaria de Trabajadores, su líder Arturo Martínez dijo que barricadas, saqueos, agresiones a Carabineros y daños a la propiedad pública y privada fueron generados por grupos de "ultraizquierda".
"Siempre el movimiento social ha tenido dos problemas: la represión de la derecha y los gobiernos y la ultraizquierda que hace el trabajo para la derecha. Se aprovechan de nuestras convocatorias y no son nuestros", sentenció.
En respuesta a esta aseveración, Esteban Silva, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido del Socialismo Allendista, manifestó a Cambio21 que se hace uso un "equívoco" de ese concepto.
"Lo que hay en materia de movilizaciones y desórdenes son sectores que se mezclan con el lumpen, que causan destrozos y que impiden el normal desarrollo de una manifestación. Y lo otro, es que existe una violencia social acumulada en Chile, mucha de ella no consciente y con poco novel de formación e información y que tiene conductas reprobables. El modelo económico neoliberal concentrador, que incluye los 20 años de los gobiernos de la Concertación, de los cuales Arturo Martínez fue dirigente de uno de sus partidos (PS) hasta hace poco, genera esta violencia", explicó.
A su juicio, "no hay que confundir con un concepto ideologista o sobre-ideologizado que él utiliza, con desviaciones un tanto lumpenezcas y con una violencia que es de marginales".
"Ahora, de que hay grupos de izquierda que son extremos en un sentido del método, bueno, siempre Chile he tenido diversos sectores dentro de su propia izquierda, pero creo que no son los que organizan y articulan este tipo de desmanes", añade.
Para Silva, "es abusivo hablar de ultraizquierda en un sentido de dirigentes. Las fuerzas que son de izquierda puede que tengan posiciones más extremas; algunos grupos o movimientos, pero no son un fenómenos ni tienen una presencia importante en los movimientos sociales y populares. Se usa mucho el término de ultra, pero es una categoría muy genérica. En el pasado hubo algunos grupos que se autodenominaban maoístas o trotskistas, pero son casi inexistentes en las izquierdas de este país".
"Cuando Carabineros niega la autoría de la muerte de un joven marginal en Macul -concluye-, eso me parece que encuba una respuesta de violencia marginal. Además, es un hecho que hay sectores infiltrados por el propio gobierno o por aparatos de seguridad, tanto del ministerio del Interior (a través de la Agencia Nacional de Inteligencia -ANI-), como de las fuerzas de Carabineros, como es de público conocimiento".
"Los encapuchados no son de ultraizquierda"
Por su parte, el timonel del Partido Comunista Acción Proletaria, Eduardo Artes, asegura que el líder de la CUT Arturo Martínez "está contra la izquierda".
En diálogo con este portal, el ex precandidato presidencial señaló que "no existe ultraizquierda. Lo que hay es una izquierda que se está construyendo al margen de lo que es la Concertación y que busca un protagonismo obrero y popular independiente. Este caballero está confundido, porque obedece a uno de los bloques neoliberales, que es la Concertación que le dejó la mesa servida a la derecha, porque en rigor la Alianza está haciendo lo mismo que esa coalición".
"Hablar de ultraizquierda es levantar a un fantasma. Eso no existe. Sí hay algunos grupos que tienen una rabia muy grande, que son jóvenes con una convicción ideológica distinta y con una concepción neo-anarquista, sumado a la manipulación policial y delictual. Pero más allá de eso, que Martínez mejor se dedique a pelear contra el capital y a reconstruir el movimiento sindical", enfatizó.
De acuerdo al líder del PC(AP), los encapuchados no son de ultraizquierda. "En el pasado, estaba el MIR, el PCR, el Espartaco, que eran organizaciones con influencia de masas y proyectos políticos y que se podía conversar con ellos por mucho que uno podía disentir", argumenta.
Por último, sobre la inmensa cantidad de entidades que abundan en internet y en las redes sociales, muchas de ellas anárquicas y que se pueden apreciar en las marchas, Artes indica que "responden a la búsqueda de los jóvenes hacia un camino revolucionario que no está en la Concertación, no está en el PC y que busca cambios profundos en la sociedad".
Consultado por los hechos de violencia generados durante los dos días de paro nacional convocados por la Central Unitaria de Trabajadores, su líder Arturo Martínez dijo que barricadas, saqueos, agresiones a Carabineros y daños a la propiedad pública y privada fueron generados por grupos de "ultraizquierda".
"Siempre el movimiento social ha tenido dos problemas: la represión de la derecha y los gobiernos y la ultraizquierda que hace el trabajo para la derecha. Se aprovechan de nuestras convocatorias y no son nuestros", sentenció.
En respuesta a esta aseveración, Esteban Silva, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido del Socialismo Allendista, manifestó a Cambio21 que se hace uso un "equívoco" de ese concepto.
"Lo que hay en materia de movilizaciones y desórdenes son sectores que se mezclan con el lumpen, que causan destrozos y que impiden el normal desarrollo de una manifestación. Y lo otro, es que existe una violencia social acumulada en Chile, mucha de ella no consciente y con poco novel de formación e información y que tiene conductas reprobables. El modelo económico neoliberal concentrador, que incluye los 20 años de los gobiernos de la Concertación, de los cuales Arturo Martínez fue dirigente de uno de sus partidos (PS) hasta hace poco, genera esta violencia", explicó.
A su juicio, "no hay que confundir con un concepto ideologista o sobre-ideologizado que él utiliza, con desviaciones un tanto lumpenezcas y con una violencia que es de marginales".
"Ahora, de que hay grupos de izquierda que son extremos en un sentido del método, bueno, siempre Chile he tenido diversos sectores dentro de su propia izquierda, pero creo que no son los que organizan y articulan este tipo de desmanes", añade.
Para Silva, "es abusivo hablar de ultraizquierda en un sentido de dirigentes. Las fuerzas que son de izquierda puede que tengan posiciones más extremas; algunos grupos o movimientos, pero no son un fenómenos ni tienen una presencia importante en los movimientos sociales y populares. Se usa mucho el término de ultra, pero es una categoría muy genérica. En el pasado hubo algunos grupos que se autodenominaban maoístas o trotskistas, pero son casi inexistentes en las izquierdas de este país".
"Cuando Carabineros niega la autoría de la muerte de un joven marginal en Macul -concluye-, eso me parece que encuba una respuesta de violencia marginal. Además, es un hecho que hay sectores infiltrados por el propio gobierno o por aparatos de seguridad, tanto del ministerio del Interior (a través de la Agencia Nacional de Inteligencia -ANI-), como de las fuerzas de Carabineros, como es de público conocimiento".
"Los encapuchados no son de ultraizquierda"
Por su parte, el timonel del Partido Comunista Acción Proletaria, Eduardo Artes, asegura que el líder de la CUT Arturo Martínez "está contra la izquierda".
En diálogo con este portal, el ex precandidato presidencial señaló que "no existe ultraizquierda. Lo que hay es una izquierda que se está construyendo al margen de lo que es la Concertación y que busca un protagonismo obrero y popular independiente. Este caballero está confundido, porque obedece a uno de los bloques neoliberales, que es la Concertación que le dejó la mesa servida a la derecha, porque en rigor la Alianza está haciendo lo mismo que esa coalición".
"Hablar de ultraizquierda es levantar a un fantasma. Eso no existe. Sí hay algunos grupos que tienen una rabia muy grande, que son jóvenes con una convicción ideológica distinta y con una concepción neo-anarquista, sumado a la manipulación policial y delictual. Pero más allá de eso, que Martínez mejor se dedique a pelear contra el capital y a reconstruir el movimiento sindical", enfatizó.
De acuerdo al líder del PC(AP), los encapuchados no son de ultraizquierda. "En el pasado, estaba el MIR, el PCR, el Espartaco, que eran organizaciones con influencia de masas y proyectos políticos y que se podía conversar con ellos por mucho que uno podía disentir", argumenta.
Por último, sobre la inmensa cantidad de entidades que abundan en internet y en las redes sociales, muchas de ellas anárquicas y que se pueden apreciar en las marchas, Artes indica que "responden a la búsqueda de los jóvenes hacia un camino revolucionario que no está en la Concertación, no está en el PC y que busca cambios profundos en la sociedad".