Saludos,
Me presento para formar parte desde hoy de este foro, aunque no me acompañe mi ideología desde hace tan poco ni mucho menos. Actualmente tengo 37 años, pero fue en mi época estudiantil allá por el año 92/93, cuando me empecé a involucrar, o mas bien a indagar y tratar de entender en que consistía aquello de la politica, y si servía para algo. Lo primero que hice fue buscar información en las bibliotecas que podía, pues en aquellos tiempos (no tan lejanos), el uso de internet no estaba extendido y eran los libros los que nos abrían puertas, curiosamente hoy se las cerramos a ellos con nuevas tecnologías, aunque sigo quedandome con el tacto, el olor y la solera que te ofrece un libro "de carne y hueso". Lo primero que hice, fue tratar se saber que ofrecían los partidos politicos más conocidos, y a que ideas debían su existencia. Es importante que renombre, que en mi familia hubo gente que combatió en los dos bandos de la Guerra Civil Española, y recordaba lo que me contaban cuando era pequeño unos y otros. Esto para mi fue determinante, porque conforme iba informándome, mi declinación hacia un lado u otro, se empezó a definir. Principalmente, porque la justificaciones que me daban unos me chocaban, y entendía más, o se ligaban más a mi forma de pensar las de los otros. Una vez habiendo tomado el camino hacia el lado izquierdo, por así decirlo, lo más fácil hubiera sido optar por el populismo del PSOE y su continua presencia, pues no en vano, era el partido que seguía gobernando este estado desde hacía bastantes años, y ya no digamos en Andalucía, lugar de donde procedo, que aún a día de hoy sigue infectándonos con su hipocresía, permitida por esa "prostituta" llamada Constitución, pero eso es harina de otro costal.
Conforme iba leyendo sobre este partido, menos entendía su forma de comportarse, pues me suponía una contradicción permanente. Esto me hizo plantearme cambiar de estrategia, y no acomodarme en la elección bipartidista fácil, con lo cuál empecé a leer sobre el comunismo, empezando por la Unión de Republicas Socialistas Soviéticas, antes de su creación, o sea, desde la base de lo que estaba ocurriendo en la antigüa Rusia. Cuanto más leía, más me atraía sus conceptos, su valentía y el hecho de que gente en una época tan difícil, fuese capaz de llegar a conseguir que el pueblo de verdad, llevase las riendas de su pais y de un proyecto que se quería prolongar a todo el mundo. Esto es algo que hoy envidio, pues cada vez soy más pesimista a la hora de evaluar a la juventud, pues parecen sedados, como derrotados y puestos voluntariamente a merced de cuatro personajillos, hipotecando sus propias vidas si hace falta. Aquella gente se cansó de los que le oprimían, y lo más importante, creyeron en ellos mismos, y eso fue lo que les llevó a la victoria.
Se que me estoy extendiendo demasiado en mi presentación, y bueno, tan poco quiero someteros a semejante tostón y sin anestesia alguna, solo decir que a partir de ahi, mi vida cambió radicalmente, porque ya no me creía lo que los telediarios y la prensa politizada decían, ya no pensaba que los americanos eran los buenos y los rusos lo eternos malos, en fin, estudiaba el porque de las cosas simplemente y sus variados puntos de vista. Empecé también en intentar ayudar al débil ante la tiranía del fuerte, incluso empecé a tomar algunos cargos en mi grupo de clase, presentándome para delegado y ejerciendo de puente entre lo que querían y pensaban los estudiantes, y la visión del profesorado, que época tan bonita, porque me votó una mayoría abrumadora. Que ratos de tertulia polítca con mis compañeros, y que bueno aquel día que empapelé todos y cada uno de mis libros con la cara de Lenin, porque llegó a mis oidos que el profesor de matemáticas era un falangista convencido, y yo, colocándome en su clase en primera fila, hacía que no apartara los ojos de mis libros, mientras mostraba una cara de amargado que parecía que se consumiera.
Si hay alguien de este foro que le suene esto, lo mismo fue compañero mio y podrá corroborarlo, pues durante aquellos años, conseguimos que los estudiantes se involucraran en esas cuestiones de las que todo el mundo pasaba, y que daba por hecho que no se les escucharía nunca.
Perdón por este ladrillazo, pero creo que tenía que soltarlo.
Salud, camaradas.
Me presento para formar parte desde hoy de este foro, aunque no me acompañe mi ideología desde hace tan poco ni mucho menos. Actualmente tengo 37 años, pero fue en mi época estudiantil allá por el año 92/93, cuando me empecé a involucrar, o mas bien a indagar y tratar de entender en que consistía aquello de la politica, y si servía para algo. Lo primero que hice fue buscar información en las bibliotecas que podía, pues en aquellos tiempos (no tan lejanos), el uso de internet no estaba extendido y eran los libros los que nos abrían puertas, curiosamente hoy se las cerramos a ellos con nuevas tecnologías, aunque sigo quedandome con el tacto, el olor y la solera que te ofrece un libro "de carne y hueso". Lo primero que hice, fue tratar se saber que ofrecían los partidos politicos más conocidos, y a que ideas debían su existencia. Es importante que renombre, que en mi familia hubo gente que combatió en los dos bandos de la Guerra Civil Española, y recordaba lo que me contaban cuando era pequeño unos y otros. Esto para mi fue determinante, porque conforme iba informándome, mi declinación hacia un lado u otro, se empezó a definir. Principalmente, porque la justificaciones que me daban unos me chocaban, y entendía más, o se ligaban más a mi forma de pensar las de los otros. Una vez habiendo tomado el camino hacia el lado izquierdo, por así decirlo, lo más fácil hubiera sido optar por el populismo del PSOE y su continua presencia, pues no en vano, era el partido que seguía gobernando este estado desde hacía bastantes años, y ya no digamos en Andalucía, lugar de donde procedo, que aún a día de hoy sigue infectándonos con su hipocresía, permitida por esa "prostituta" llamada Constitución, pero eso es harina de otro costal.
Conforme iba leyendo sobre este partido, menos entendía su forma de comportarse, pues me suponía una contradicción permanente. Esto me hizo plantearme cambiar de estrategia, y no acomodarme en la elección bipartidista fácil, con lo cuál empecé a leer sobre el comunismo, empezando por la Unión de Republicas Socialistas Soviéticas, antes de su creación, o sea, desde la base de lo que estaba ocurriendo en la antigüa Rusia. Cuanto más leía, más me atraía sus conceptos, su valentía y el hecho de que gente en una época tan difícil, fuese capaz de llegar a conseguir que el pueblo de verdad, llevase las riendas de su pais y de un proyecto que se quería prolongar a todo el mundo. Esto es algo que hoy envidio, pues cada vez soy más pesimista a la hora de evaluar a la juventud, pues parecen sedados, como derrotados y puestos voluntariamente a merced de cuatro personajillos, hipotecando sus propias vidas si hace falta. Aquella gente se cansó de los que le oprimían, y lo más importante, creyeron en ellos mismos, y eso fue lo que les llevó a la victoria.
Se que me estoy extendiendo demasiado en mi presentación, y bueno, tan poco quiero someteros a semejante tostón y sin anestesia alguna, solo decir que a partir de ahi, mi vida cambió radicalmente, porque ya no me creía lo que los telediarios y la prensa politizada decían, ya no pensaba que los americanos eran los buenos y los rusos lo eternos malos, en fin, estudiaba el porque de las cosas simplemente y sus variados puntos de vista. Empecé también en intentar ayudar al débil ante la tiranía del fuerte, incluso empecé a tomar algunos cargos en mi grupo de clase, presentándome para delegado y ejerciendo de puente entre lo que querían y pensaban los estudiantes, y la visión del profesorado, que época tan bonita, porque me votó una mayoría abrumadora. Que ratos de tertulia polítca con mis compañeros, y que bueno aquel día que empapelé todos y cada uno de mis libros con la cara de Lenin, porque llegó a mis oidos que el profesor de matemáticas era un falangista convencido, y yo, colocándome en su clase en primera fila, hacía que no apartara los ojos de mis libros, mientras mostraba una cara de amargado que parecía que se consumiera.
Si hay alguien de este foro que le suene esto, lo mismo fue compañero mio y podrá corroborarlo, pues durante aquellos años, conseguimos que los estudiantes se involucraran en esas cuestiones de las que todo el mundo pasaba, y que daba por hecho que no se les escucharía nunca.
Perdón por este ladrillazo, pero creo que tenía que soltarlo.
Salud, camaradas.