[PCOE/FJCE] Al pueblo. Sobre las primeras medidas del nuevo gobierno

Como se esperaba, el PP ha declarado la guerra a las clases trabajadoras. Todas sus medidas se encaminan a recaudar dinero para dárselo a la banca y grandes empresas, dinero que nos quita a los trabajadores. Es una canallada que el mismo día que se anuncian los 300.000 euros anuales que recibe el Rey, los 150.000 del Príncipe, y los 375.000 que se reparten la Reina, Letizia y las infantas, se haga público también la congelación del salario mínimo del trabajador, que apenas llegar a 641 euros mensuales.
El gobierno se ríe del pueblo al proclamar que las pensiones serán actualizadas con un 1% de subida, lo que significa que un pensionista de 700 euros verá incrementada su pensión en unos míseros 7 euros. Por otro lado, a través del IRPF rebaja los salarios de los trabajadores en activo. A los trabajadores del sector público les congela los salarios, y les obliga a trabajar más horas, además de tener que pagar más por IRPF. Entre tanto, los dirigentes de CCOO y UGT continúan sentados con la patronal para llegar a un pacto que les dé mayores posibilidades a los patronos para despedir a su antojo y más barato y que puedan obligar a los trabajadores a firmar convenios míseros, a la par que buscan medios legales para hacer más difícil la convocatoria de huelga ante los atropellos del patrón.
Está claro que el gobierno y los capitalistas tienen el concepto de que los trabajadores son juerguistas y maleantes. Por esta razón sentencian que no se aumentarán las plantillas de funcionarios, con la excepción de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, osea las fuerzas represivas, pues por lo visto los que hay no son suficientes para reprimir a tantos trabajadores vagos, maleantes y tramposos.
Compañeros, el problema no es sólo sindical sino político. Por eso debemos romper las barreras que nos imponen el gobierno y los sindicatos para que los trabajadores no intervengamos en política y ellos puedan aplicar leyes y pactos políticos que nos condenan a la miseria. Los trabajadores y sus representantes en los comités de empresas deben unirse en Asambleas de Comités y Delegados para encarar unidos en un Frente Único la ofensiva del gobierno y de la patronal, sin distinción de siglas ni de gremios, todos como una sola clase, si no queremos ver como nuestra dignidad como persona y como trabajador sea ultrajada, si no queremos que las generaciones más jóvenes transcurran su existencia en la pobreza y en la marginación.