Kevin Chuca escribió:La situación es complejísima en Argentina. La clase obrera y las organizaciones de vanguardia vienen de una terrible derrota histórica: la dictadura militar de 1976-1983 y de la llamada "tercera década infame": el menemato (durante la cual, importantes sectores de la izquierda, e incluso restos supervivientes de las organizaciones que fueron aniquilidas por la represión, comenzaron a creer en "El fin de la historia"). El PC Argentino, al igual, que el Partido Socialista, siempre apoyaron a los gobiernos militares. En este momento, el PC está con el gobierno de Cristina. Otros partidos como el PCR (Maoísta), o el MST (Trotskista) apoyaron a las patronales agrarias (el PCR también apoyó a Isabel Perón y a Lopez Rega, e hizo campaña por Menem y Duhalde) y ahora están con la "izquierda sojera" de Proyecto Sur y ese mamarracho centroizquierdista que se hace llamar FAP. Luego, hay muchísimas agrupaciones pequeñísimas, sectarias, que no tienen ningún tipo de inserción en la clase.
Y bueno, claro está, el grave problema de la cooptación que hizo el Kirchnerismo con los movimientos sociales tras el estallido social del 2001.
Estamos sí, en período de reflujo, sólo un iluso puede ver en el día una situación pre-revolucionaria. Hay luchas SÍ, pero son aisladas. Aún, el régimen patronal sigue contando con hegemonía sobre sus gobernados, porque reprime a diestra y siniestra (y mata, incluso) y no hay resistencia popular a eso.
Un abrazo a todos compañeros
Ante todo bienvenido compañero.
La historia del por qué del trotskismo en la Argentina, la remonto al papel del PC argentino con Codovila a la cabeza, respecto a la década del 40-50. En otros hilos he mencionado el tema, pero creo que es crucial entender que mientras el PC, que reivindicaba la linea anti-fascista (un PC que cuando estaba Stalin era "stalinista" por mencionarlo de una manera clara y cuando llegaron los revisionistas "anti-stalinista", dicho sea de paso) se opuso al gobierno peronista, apoyándose en la unión democrática como alternativa electoral, que bajo la dirección del embajador yanqui Braden, nucleaba a los sectores liberales pro imperialistas (en ese entonces ingleses), frente al germanofilo Perón. Nunca en su caracterización comprendió el carácter de clase del peronismo naciente, que se encontraba bajo dirección burguesa pero que no respondía a un fascismo europeo (sino al denominado bonapartismo), y que poseía un fuerte carácter nacionalista y antiimperialista. No sólo eso, sino que el PC, apoyó abiertamente el golpe de estado contra Perón, y formaba "brigadas rojas" al servicio de la oligarquía terrateniente para atacar a los obreros peronistas. Claro está que no estoy diciendo que Perón fuera un santo ni mucho menos, dado que hubo torturas y asesinatos por parte de los órganos represivos contra los comunistas (se habla de la Policía Peronista).
El trotkismo argentino, hizo hincapié en el caracter antiimperialista del peronismo y trató de realizar un entrismo en el movimiento, que dió cierto resultado, dado que introdujeron cuestiones como la importancia del control obrero en la nacionalización, que se vieron luego en los programas esgrimidos por las propias organizaciones peronistas una vez que Perón fue derrocado. Entonces tenemos un primer trotkismo "bien visto" por los obreros, y a un peronismo de izquierda que incorpora posturas clasistas importantes.
Pero la mayor herencia que posee nuestro país, es la de la izquierda setentista, guevarista (PRT-ERP), y peronista (FAP, FAR, Montoneros), y en menor medida maoísta (Vanguardia Comunista) que son las que logran los máximos programas, y los mejores análisis respecto a la lucha de clases en nuestra patria, destacando la importancia de la liberación nacional y social, y contrario al quietismo de los partidos tradicionalistas (de los cuales el PC era uno, que para colmo se sienta a negociar con la dictadura militar), y poniendo principal énfasis en la práctica militante.
Cabe destacar que esta nueva izquierda revolucionaria, fue aniquilada por la dictadura, y que los partidos sobrevivientes, son los que menos amenazaban al establishment. En estos se pueden encontrar el PCR (maoísta), defensor del gobierno de Isabel Perón, los morenistas del PST (que luego conformó el MAS, el PTS, trotkistas), no es por ofender a los trotkistas, dado que tuvieron una fuerza importante en los noventa con el MAS, el partido trotkista más grande de latinoamérica lo cual no es menor. Lamentablemente los sobrevivientes de las organizaciones guerrilleras, que habían conformado el MTP (Movimiento Todos por la Patria), siguiendo el ejemplo sandinista, tuvieron el gran error de apostarlo todo a un ataque guerrillero en 1989 en La Tablada, sepultando una herramienta política que hubiera sido muy importante para resistir a las privatizaciones.
Los frentes combativos nuevos, retoman las tradiciones de la guerrilla (en cuanto a ideal de lucha y militancia), desde una visión crítica.
Saludos.