"Dos cartas de Mao Tse-Tung a Chiang Ching (de 1966 y 1976)"
breve extracto del libro "China: una revolución en agonía" de Robinson Rojas
tomado del blog Cultura de debate en donde se publicó en diciembre de 2011
Hoy (26 de diciembre) se conmemora el aniversario del nacimiento del Presidente Mao Tse-Tung, y es preciso rendir un justo homenaje al mas grande marxista del siglo XX. Si bien su obra quedo inconclusa vendran generaciones nuevas que retomaran su senda, y conquistaran la cumbre, tal como el mismo lo había predicho en sus cartas y conversaciones, que salieron a la luz en algunos textos ineditos despues de su muerte. A continuación algunos extractos publicados en el libro "China: una revolución en agonia" de Robinson Rojas.
Carta de Mao Tse-Tung a Chiang Ching, 8 de junio de 1966:
"Me he convertido en el exorcista del partido comunista del siglo veinte –Mientras más se le eleva a uno a las nubes, más dura es la caída. Sé que me romperé los huesos al caer…En el mundo hay más de cien partidos, la mayoría de los cuales ya no cree en el marxismo-leninismo. ¿Si Marx y Lenin ya han fracasado para ellos, con cuánto mayor razón yo? Lo que te escrito más arriba es demasiado parecido al pesimismo negro, ¿acaso los elementos antipartido no han dicho la misma cosa? Ellos quieren derribar al partido y derribarme a mí…¿Cuándo podrán hacer públicas estas líneas? Es difícil decirlo ahora por qué no gustarán ni a la izquierda ni a las masas. Es posible que el momento propicio sobrevenga después de mi muerte, explotará mis palabras para izar definitivamente la bandera negra, pero eso no les servirá de nada… los derechistas explotaran mis palabras para escalar al poder. La izquierda explotara a su vez otras palabras mías para organizarse y la derecha será derribada…”.
Carta de Mao a Chiang Ching en mayo o junio de 1976, en forma de poema:
Has sido engañado.
Nos estamos separando en dos mundos.
Que cada cual encuentre su paz.
Estos pocos caracteres pueden ser mi último mensaje para
Ti…
La vida de un hombre tiene límites.
pero la revolución no las tiene
En la lucha de los pasados diez años
hice el intento de alcanzar la cúspide de la revolución,
Pero he fracasado…
Tal vez tú puedas alcanzar la cumbre
Si fracasas te hundirás en un abismo insondable,
Tu cuerpo se hará pedazos,
Tus huesos se quebraran,…
Ningún acuerdo con los otros es bueno…
Si la espada se vuelve, y yo creo que se ha vuelto,
contra la revolución. Una vez más será necesaria
La guerra de guerrillas… De nuevo Yenán….
Conversación de Mao con 7 miembros del politburó, 3 de junio de 1976:
“Los he llamado para vernos y conversar, no para leerles un testamento. No tengo confianza en los testamentos. Chin Shi Huang hizo un testamento y Chio Chao no tardó mucho en falsificarlo. ¿No es verdad eso que digo?... Para nadie es posible evitar la muerte. La muerte puede llegar a cualquiera en el mundo a los 70 años y, miren, yo he pasado los 80 años… ya podría haber muerto. Además, hay que afirmar que algunos entre ustedes no esperan más que una sola cosa: que me vaya a reunir con Marx lo más pronto posible. ¿Ustedes dicen que no? ¿Nadie desea mi muerte? No lo creo. Hay alguien que desde antes de la conferencia de Lushan me han llamado dictador y Chin Shi Huang. Uno de esos ‘algunos’ fue Pan Te-Juai. Después aparecieron Liu Shao-Chi, Lin Piao y Teng Hsia-Ping. Todos ellos se rebelaron contra mí y me combatieron a muere. Incluso llegaron al extremo de llamarme “B-52”, y esto por cuenta del primer ministro Chu. Me ha tocado convertirme en blanco de todos, y me ha tocado quedarme solo. Ya he dicho más de una vez que no me importa quedarme solo. La verdad es siempre minoritaria. La tierra no dejará de dar vueltas aunque todo el buró político y todo el comité central se pongan en mi contra…”.
Y continua: “Nunca he dejado de creer que en China exista la posibilidad de una restauración del capitalismo en gran escala. A escala de todo el país. Si esa restauración viene, las cosas irán mal. Volverán los sufrimientos, pero tambien volverá inevitablemente la revolución. Hay algunos que dicen que tengo cabeza de piedra, que no pueden cambiar mi cabeza de piedra. Estoy de acuerdo con esas personas. ¿Cómo podría haber sido un buen comunista si hubiera cambiado mis puntos de vista? No se pueden cambiar los principios marxista y la línea básica de nuestro partido…En principios ya establecidos por la historia de la lucha”.
breve extracto del libro "China: una revolución en agonía" de Robinson Rojas
tomado del blog Cultura de debate en donde se publicó en diciembre de 2011
Hoy (26 de diciembre) se conmemora el aniversario del nacimiento del Presidente Mao Tse-Tung, y es preciso rendir un justo homenaje al mas grande marxista del siglo XX. Si bien su obra quedo inconclusa vendran generaciones nuevas que retomaran su senda, y conquistaran la cumbre, tal como el mismo lo había predicho en sus cartas y conversaciones, que salieron a la luz en algunos textos ineditos despues de su muerte. A continuación algunos extractos publicados en el libro "China: una revolución en agonia" de Robinson Rojas.
Carta de Mao Tse-Tung a Chiang Ching, 8 de junio de 1966:
"Me he convertido en el exorcista del partido comunista del siglo veinte –Mientras más se le eleva a uno a las nubes, más dura es la caída. Sé que me romperé los huesos al caer…En el mundo hay más de cien partidos, la mayoría de los cuales ya no cree en el marxismo-leninismo. ¿Si Marx y Lenin ya han fracasado para ellos, con cuánto mayor razón yo? Lo que te escrito más arriba es demasiado parecido al pesimismo negro, ¿acaso los elementos antipartido no han dicho la misma cosa? Ellos quieren derribar al partido y derribarme a mí…¿Cuándo podrán hacer públicas estas líneas? Es difícil decirlo ahora por qué no gustarán ni a la izquierda ni a las masas. Es posible que el momento propicio sobrevenga después de mi muerte, explotará mis palabras para izar definitivamente la bandera negra, pero eso no les servirá de nada… los derechistas explotaran mis palabras para escalar al poder. La izquierda explotara a su vez otras palabras mías para organizarse y la derecha será derribada…”.
Carta de Mao a Chiang Ching en mayo o junio de 1976, en forma de poema:
Has sido engañado.
Nos estamos separando en dos mundos.
Que cada cual encuentre su paz.
Estos pocos caracteres pueden ser mi último mensaje para
Ti…
La vida de un hombre tiene límites.
pero la revolución no las tiene
En la lucha de los pasados diez años
hice el intento de alcanzar la cúspide de la revolución,
Pero he fracasado…
Tal vez tú puedas alcanzar la cumbre
Si fracasas te hundirás en un abismo insondable,
Tu cuerpo se hará pedazos,
Tus huesos se quebraran,…
Ningún acuerdo con los otros es bueno…
Si la espada se vuelve, y yo creo que se ha vuelto,
contra la revolución. Una vez más será necesaria
La guerra de guerrillas… De nuevo Yenán….
Conversación de Mao con 7 miembros del politburó, 3 de junio de 1976:
“Los he llamado para vernos y conversar, no para leerles un testamento. No tengo confianza en los testamentos. Chin Shi Huang hizo un testamento y Chio Chao no tardó mucho en falsificarlo. ¿No es verdad eso que digo?... Para nadie es posible evitar la muerte. La muerte puede llegar a cualquiera en el mundo a los 70 años y, miren, yo he pasado los 80 años… ya podría haber muerto. Además, hay que afirmar que algunos entre ustedes no esperan más que una sola cosa: que me vaya a reunir con Marx lo más pronto posible. ¿Ustedes dicen que no? ¿Nadie desea mi muerte? No lo creo. Hay alguien que desde antes de la conferencia de Lushan me han llamado dictador y Chin Shi Huang. Uno de esos ‘algunos’ fue Pan Te-Juai. Después aparecieron Liu Shao-Chi, Lin Piao y Teng Hsia-Ping. Todos ellos se rebelaron contra mí y me combatieron a muere. Incluso llegaron al extremo de llamarme “B-52”, y esto por cuenta del primer ministro Chu. Me ha tocado convertirme en blanco de todos, y me ha tocado quedarme solo. Ya he dicho más de una vez que no me importa quedarme solo. La verdad es siempre minoritaria. La tierra no dejará de dar vueltas aunque todo el buró político y todo el comité central se pongan en mi contra…”.
Y continua: “Nunca he dejado de creer que en China exista la posibilidad de una restauración del capitalismo en gran escala. A escala de todo el país. Si esa restauración viene, las cosas irán mal. Volverán los sufrimientos, pero tambien volverá inevitablemente la revolución. Hay algunos que dicen que tengo cabeza de piedra, que no pueden cambiar mi cabeza de piedra. Estoy de acuerdo con esas personas. ¿Cómo podría haber sido un buen comunista si hubiera cambiado mis puntos de vista? No se pueden cambiar los principios marxista y la línea básica de nuestro partido…En principios ya establecidos por la historia de la lucha”.