Los Colectivos de Jóvenes Comunistas convocamos la XXIII edición de nuestra Escuela Central de Formación “Trifón Medrano” del 19 al 22 y del 26 al 29 de julio. Como novedad, este año la escuela contará con tres sedes: en Medina del Campo (Valladolid), Valencia y Madrid.
Esta división responde a la necesidad de instruir a una militancia cada vez más amplia y repartida territorialmente. Al contar con tres sedes en vez de una, conseguiremos que muchos más camaradas puedan asistir; especialmente los camaradas más jóvenes, que normalmente son los menos iniciados y, por tanto, tienen más necesidades formativas.
Y es que la formación, dentro de una organización juvenil comunista, juega un papel fundamental. Con la formación, los militantes adquieren la capacidad teórica que les permite enfrentarse a los quehaceres de la militancia diaria de una forma consciente y creadora.
Una organización comunista no puede estar compuesta por simples afiliados que colaboran con la organización de forma puntual y cuya tarea sea casi exclusivamente pegar carteles o pegatinas. Una organización comunista, marxista-leninista, se compone de militantes bolcheviques dispuestos a dedicar una importante parte de su tiempo a la lucha revolucionaria; capacitados para organizar a la juventud obrera y estudiantil allá donde esté.
Los contenidos impartidos por los CJC en nuestras escuelas y en nuestro Plan de Formación tienen como objetivo formar al estilo de militante bolchevique, consciente y creativo. Por eso tratamos los fundamentos del marxismo-leninismo, ciencia de la lucha de clases, y no cuestiones secundarias que poco o nada tienen que ver con la contradicción capital-trabajo.
Durante los cuatro días de escuela se celebrarán ponencias sobre fundamentos del materialismo dialéctico, fundamentos del materialismo histórico, imperialismo y crisis capitalista, cuestión nacional y el papel del PCE en la Guerra Nacional Revolucionaria; además de actividades deportivas y lúdicas.
La propia realidad de la lucha de clases evidencia la necesidad del Partido Comunista y la Juventud Comunista de vanguardia.
La lucha de los mineros demuestra la veracidad de las tesis mantenidas por el PCPE sobre la imposibilidad de mejorar las condiciones de vida de la clase obrera mientras siga el régimen de explotación capitalista. El gobierno del Partido Popular, gestor directo de los intereses de la oligarquía burguesa, se niega a acordar cualquier tipo de acuerdo con los mineros si no salen adelante sus exigencias tal cual las presentan. La negociación sindical y el famoso Pacto Social son fórmulas inválidas para los trabajadores; la única salida es la lucha organizada en clave de ruptura, en clave revolucionaria. Para ello jugarán un papel fundamental los Comités de Unidad Obrera (CUO).
En cuanto la clase obrera ha salido a la calle a defender el pan, el trabajo y la dignidad, los movimientos de ideología pequeñoburguesa como el 15M se han visto desbordados y superados. Sin duda alguna la lucha de los mineros no es más que el comienzo de una lucha general de la clase obrera y, bajo la dirección de los comunistas, conseguirá hegemonizar las movilizaciones populares conduciéndolas al objetivo irrenunciable del Socialismo.
El movimiento estudiantil en contra de los recortes, la privatización y la mercantilización de la educación y el movimiento antiimperialista en contra de las guerras orquestadas por las potencias monopolistas, son dos frentes más en los que nuestra organización va a estar presente.
El próximo curso será fundamental para la organización de un frente obrero y popular que altere la correlación de fuerzas a favor del Pueblo trabajador, en la perspectiva del poder popular: el Socialismo y el Comunismo.
Esta XXIII Escuela Central de Formación servirá a nuestra militancia para estar a la altura de los acontecimientos y ejercer el papel de vanguardia que le corresponde.
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Esta división responde a la necesidad de instruir a una militancia cada vez más amplia y repartida territorialmente. Al contar con tres sedes en vez de una, conseguiremos que muchos más camaradas puedan asistir; especialmente los camaradas más jóvenes, que normalmente son los menos iniciados y, por tanto, tienen más necesidades formativas.
Y es que la formación, dentro de una organización juvenil comunista, juega un papel fundamental. Con la formación, los militantes adquieren la capacidad teórica que les permite enfrentarse a los quehaceres de la militancia diaria de una forma consciente y creadora.
Una organización comunista no puede estar compuesta por simples afiliados que colaboran con la organización de forma puntual y cuya tarea sea casi exclusivamente pegar carteles o pegatinas. Una organización comunista, marxista-leninista, se compone de militantes bolcheviques dispuestos a dedicar una importante parte de su tiempo a la lucha revolucionaria; capacitados para organizar a la juventud obrera y estudiantil allá donde esté.
Los contenidos impartidos por los CJC en nuestras escuelas y en nuestro Plan de Formación tienen como objetivo formar al estilo de militante bolchevique, consciente y creativo. Por eso tratamos los fundamentos del marxismo-leninismo, ciencia de la lucha de clases, y no cuestiones secundarias que poco o nada tienen que ver con la contradicción capital-trabajo.
Durante los cuatro días de escuela se celebrarán ponencias sobre fundamentos del materialismo dialéctico, fundamentos del materialismo histórico, imperialismo y crisis capitalista, cuestión nacional y el papel del PCE en la Guerra Nacional Revolucionaria; además de actividades deportivas y lúdicas.
La propia realidad de la lucha de clases evidencia la necesidad del Partido Comunista y la Juventud Comunista de vanguardia.
La lucha de los mineros demuestra la veracidad de las tesis mantenidas por el PCPE sobre la imposibilidad de mejorar las condiciones de vida de la clase obrera mientras siga el régimen de explotación capitalista. El gobierno del Partido Popular, gestor directo de los intereses de la oligarquía burguesa, se niega a acordar cualquier tipo de acuerdo con los mineros si no salen adelante sus exigencias tal cual las presentan. La negociación sindical y el famoso Pacto Social son fórmulas inválidas para los trabajadores; la única salida es la lucha organizada en clave de ruptura, en clave revolucionaria. Para ello jugarán un papel fundamental los Comités de Unidad Obrera (CUO).
En cuanto la clase obrera ha salido a la calle a defender el pan, el trabajo y la dignidad, los movimientos de ideología pequeñoburguesa como el 15M se han visto desbordados y superados. Sin duda alguna la lucha de los mineros no es más que el comienzo de una lucha general de la clase obrera y, bajo la dirección de los comunistas, conseguirá hegemonizar las movilizaciones populares conduciéndolas al objetivo irrenunciable del Socialismo.
El movimiento estudiantil en contra de los recortes, la privatización y la mercantilización de la educación y el movimiento antiimperialista en contra de las guerras orquestadas por las potencias monopolistas, son dos frentes más en los que nuestra organización va a estar presente.
El próximo curso será fundamental para la organización de un frente obrero y popular que altere la correlación de fuerzas a favor del Pueblo trabajador, en la perspectiva del poder popular: el Socialismo y el Comunismo.
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