Louis Theroux: Entre ultrasionistas

Descripción del documental

El sionismo es la aspiración de los judíos a recobrar Palestina como patria. Ésta se compone de dos territorios, la Franja de Gaza, más pequeña, y Cisjordania, un territorio que Israel conquistó a Jordania durante la Guerra de los Seis Días en 1967. Hoy en día se encuentra parcialmente bajo administración militar israelí y parcialmente bajo la Autoridad Nacional Palestina. Louis Theroux entra de lleno en esta zona de conflicto y toma contacto con un pequeño pero muy comprometido grupo de colonos judíos ultra nacionalistas. Consideran que su obligación, tanto desde el punto de vista religioso como político, es recuperar algunas de las áreas más sensibles y controvertidas de Cisjordania, especialmente las tierras que tienen un significado espiritual recogido en la Biblia. Odisea entra en una de las zonas de conflicto más candentes del mundo, una zona en la que los sentimientos religiosos, históricos y políticos van claramente de la mano

Lo voy a ver ahora mismo,

Este tipo hace documentales interesantes. Todavía me acuerdo del de la familia ultra cristiana de la América Profunda que iba a abuchear a los entierros de los soldados muertos.

Gracias camarada.

Una auténtica locura lo que está pasando en Palestina.

Cabría recordar que el noventa por ciento de los judíos que viven en Israel son de origen extranjero, es decir, son colonos descendientes de conversos europeos y rusos -sobre todo- en una colonia tomada a la fuerza. La mayoría de los que dicen que dios les legó esa tierra no tienen ningún tipo de relación con los judíos antiguos, pues estos son generalmente palestinos, negros falasha -u otros tipos-, o árabes. Por mucho que les joda, los judíos europeos fueron los últimos en unirse a esa religión.

Los palestinos han pasado a convertirse en ciudadanos de segunda -o peor-, y poco a poco lo irán perdiendo todo. Llegará un día en que el mundo árabe se acabe uniendo contra esta injusticia y se líe gorda.

Yo he visitado Israel en muchas ocasiones -solo Tel Aviv-, y la gente no tiene nada que ver. De hecho, mis amigos judíos son casi todos marxistas o gente procedente de diferentes kibutz que estaría encantada de compartirlo todo con los musulmanes o con quien sea.

De todos modos, los comunistas hemos de sacar una cosa bien clara: la religión es lo peor que le ha podido pasar al ser humano.