La policía española agrede a personal de la Embajada de Cuba en Madrid
Vimos caer al suelo a Jesus Bayos.... Un policia [español] gritó "aquí (por España, se supone) hay democracia". El personal cubano respondió "aquí hay libertad".
Howell Llewellyn - Cubainformación
www.kaosenlared.net/noticia/policia-espanola-agrede-personal-embajada-cuba-madrid
El Movimiento de Solidaridad con Cuba y el personal de la embajada cubana en Madrid todavía están analizando los graves sucesos que ocurrieron en la entrada al recinto de la embajada entre varios policias, personal de la embajada incluyendo el embajador Alejandro Gonzalez Galiano, y algunos solidarios que habíamos sido invitados dentro de la embajada por González.
Los sucesos demonstraron un claro cambio de estrategia de la gusanera (contrarrevolución cubana) que sugiere que está ya mejor organizada, y deben servir como aviso a todo el Movimiento de Solidaridad en el Estado español.
Fue el día del entierro en Banes, provincia de Holguin, del preso Orlando Zapata, fallecido después de una larga huelga de hambre. Zapata tiene una historia de delincuencia ordinaria desde 1990, pero la gusanera dentro de Cuba y los usuales medios occidentales le han convertido en un "valiente preso de conciencia".
El miércoles 24 de febrero, una parte de la gusanera había convocado una concetración ante la embajada cubana en el Paseo de la Habana, en Madrid, para depositar una ofrenda floral en la puerta del edificio. El Movimiento de Solidaridad con Cuba llamó a celebrar una contra concentración.
Durante la protesta, hubo la tensión normal dadas las circunstancias, agravado por la avidente parcialidad de la policía en contra de los solidarios. Nos pidió a la documentación todos nosotros (éramos unos 35), y a ninguno de ellos (unos 20). Había mucha prensa y televisión. Los policías nos decían cosas como que "la proxima persona que ponga un pie fuera de la acera será detenido por desobediencia". Hubo varias escaramuzas.
Pero los graves incidentes vinieron después de que entraramos a la embajada para una charla informal y privada con el embajador cubano. Primero observamos la presencia de un hombre sentado, que media hora antes nos había preguntado que hacíamos alli y, luego nos preguntó por el lugar donde radica la Embajada de Cuba. Eso, a 15 metros del edificio.
Luego vimos a una mujer sentada frente a la mesa donde estaba el embajador, se presentó como una cubana que pasaba por allí, y entró "porque quería saber la situación". Justificó su presencia diciendo que era periodista de la Asociacion Prensa de Madrid. González la invito a abandonar el recinto, explicando que aquello no era una rueda de prensa, sino una reunión privada.
Cuando un miembro del personal de la embajada acompañó al exterior al hombre antes indicado, con la presencia de varios policías en la puerta de entrada al recinto (un jardincito entre la acera y la puerta del edicifio), empezó de repente una tremenda escaramuza. Todos salimos del edificio para ver el caos. Parecía que la policía iban a penetrar al recinto de la embajada (territorio cubano).
Vimos caer al suelo a Jesus Bayos, representante del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP). Otro representante cubano fue agarrado por la polícía por la camisa, pero sus compañeros le rescataron. Un policia gritó "aquí (por España, se supone) hay democracia". El personal cubano respondió "aquí hay libertad".
Después de un par de minutos de extrema tensión, el personal de la embajada, con el embajador en primera línea, declinó una "invitacion" del policía a poner una denuncia por los hechos.
Entramos al recinto diplomático. Dentro, concluimos todos que la gusanera ha cambiado de táctica: ahora, infiltrar las contra concentraciones del Movimiento de Solidaridad con Cuba, para provocar y penetrar a la embajada como infiltrados.
La actitud de la policía fue claramente hostil hacia nosotros. Hay que decir que en numerosas concentraciones ante la Embajada de Estados Unidos en Madrid, la policía española casi nunca se comporta así. En las concentraciones de las próximas semanas por la libertad de los cinco presos cubanos en EEUU -que los medios jamás cubren- se demostraran si, como dicen los disidentes/mercenarios de Cuba, la muerte de Zapata marcará un antes y un después en las posturas en favor y en contra de la Revolucion, dentro y fuera de Cuba.
Vimos caer al suelo a Jesus Bayos.... Un policia [español] gritó "aquí (por España, se supone) hay democracia". El personal cubano respondió "aquí hay libertad".
Howell Llewellyn - Cubainformación
www.kaosenlared.net/noticia/policia-espanola-agrede-personal-embajada-cuba-madrid
El Movimiento de Solidaridad con Cuba y el personal de la embajada cubana en Madrid todavía están analizando los graves sucesos que ocurrieron en la entrada al recinto de la embajada entre varios policias, personal de la embajada incluyendo el embajador Alejandro Gonzalez Galiano, y algunos solidarios que habíamos sido invitados dentro de la embajada por González.
Los sucesos demonstraron un claro cambio de estrategia de la gusanera (contrarrevolución cubana) que sugiere que está ya mejor organizada, y deben servir como aviso a todo el Movimiento de Solidaridad en el Estado español.
Fue el día del entierro en Banes, provincia de Holguin, del preso Orlando Zapata, fallecido después de una larga huelga de hambre. Zapata tiene una historia de delincuencia ordinaria desde 1990, pero la gusanera dentro de Cuba y los usuales medios occidentales le han convertido en un "valiente preso de conciencia".
El miércoles 24 de febrero, una parte de la gusanera había convocado una concetración ante la embajada cubana en el Paseo de la Habana, en Madrid, para depositar una ofrenda floral en la puerta del edificio. El Movimiento de Solidaridad con Cuba llamó a celebrar una contra concentración.
Durante la protesta, hubo la tensión normal dadas las circunstancias, agravado por la avidente parcialidad de la policía en contra de los solidarios. Nos pidió a la documentación todos nosotros (éramos unos 35), y a ninguno de ellos (unos 20). Había mucha prensa y televisión. Los policías nos decían cosas como que "la proxima persona que ponga un pie fuera de la acera será detenido por desobediencia". Hubo varias escaramuzas.
Pero los graves incidentes vinieron después de que entraramos a la embajada para una charla informal y privada con el embajador cubano. Primero observamos la presencia de un hombre sentado, que media hora antes nos había preguntado que hacíamos alli y, luego nos preguntó por el lugar donde radica la Embajada de Cuba. Eso, a 15 metros del edificio.
Luego vimos a una mujer sentada frente a la mesa donde estaba el embajador, se presentó como una cubana que pasaba por allí, y entró "porque quería saber la situación". Justificó su presencia diciendo que era periodista de la Asociacion Prensa de Madrid. González la invito a abandonar el recinto, explicando que aquello no era una rueda de prensa, sino una reunión privada.
Cuando un miembro del personal de la embajada acompañó al exterior al hombre antes indicado, con la presencia de varios policías en la puerta de entrada al recinto (un jardincito entre la acera y la puerta del edicifio), empezó de repente una tremenda escaramuza. Todos salimos del edificio para ver el caos. Parecía que la policía iban a penetrar al recinto de la embajada (territorio cubano).
Vimos caer al suelo a Jesus Bayos, representante del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP). Otro representante cubano fue agarrado por la polícía por la camisa, pero sus compañeros le rescataron. Un policia gritó "aquí (por España, se supone) hay democracia". El personal cubano respondió "aquí hay libertad".
Después de un par de minutos de extrema tensión, el personal de la embajada, con el embajador en primera línea, declinó una "invitacion" del policía a poner una denuncia por los hechos.
Entramos al recinto diplomático. Dentro, concluimos todos que la gusanera ha cambiado de táctica: ahora, infiltrar las contra concentraciones del Movimiento de Solidaridad con Cuba, para provocar y penetrar a la embajada como infiltrados.
La actitud de la policía fue claramente hostil hacia nosotros. Hay que decir que en numerosas concentraciones ante la Embajada de Estados Unidos en Madrid, la policía española casi nunca se comporta así. En las concentraciones de las próximas semanas por la libertad de los cinco presos cubanos en EEUU -que los medios jamás cubren- se demostraran si, como dicen los disidentes/mercenarios de Cuba, la muerte de Zapata marcará un antes y un después en las posturas en favor y en contra de la Revolucion, dentro y fuera de Cuba.