23 Campamento Internacional de la Juventud Antifascista y Antiimperialista

Concentrados en la Universidad Bolivariana de Venezuela, jóvenes de distintos países del mundo, motivados por las luchas junto a los trabajadores y los pueblos en general unen sus fuerzas en distintas partes del planeta para hacer frente al imperialismo y sus medidas. Nos hemos reunido con el propósito de realizar el XXIII Campamento Internacional Antifascista y Antiimperialista (23 CIJAA) en las instalaciones de la Universidad Bolivariana de Venezuela UBV durante los días 4 al 11 de agosto del presente año. Delegados nacionales e internacionales fortalecieron el debate político ideológico y expusieron, desde una visión revolucionaria, sus opiniones sobre la situación mundial en lo general y en sus países en particular.

Durante los días de discusión hemos debatido diferentes elementos en lo político, económico, social, educativo, ambiental, con actividades culturales y deportivas, que permitieron un fraterno intercambio entre las diversas delegaciones. Los puntos de vista que los delegados nacionales e internacionales hemos intercambiado, han ayudado a fortalecer la discusión e ir cerrando filas ante las problemáticas que afrontamos los jóvenes a nivel mundial.

Durante estos días hemos podido constatar las diversas realidades que vivimos los jóvenes trabajadores, campesinos, artesanos, cultores, estudiantes en los distintos países del mundo. Estas realidades, confirman la necesidad de que nuestras luchas trasciendan de lo meramente reivindicativo a la lucha revolucionaria por la construcción del socialismo como única vía para enfrentar las consecuencias del capitalismo.

En el desarrollo del evento, hemos fortalecido nuestra conciencia antifascista y antiimperialista, hemos estrechado los compromisos de seguir la lucha revolucionaria, de unificar esfuerzos entre nuestras organizaciones como una viva expresión del internacionalismo proletario.


La guerra un recurso de los imperialistas para el nuevo reparto del mundo.



La crisis general del capitalismo ha puesto al desnudo las carencias del sistema, que no ha podido superar la actual situación, por lo que las potencias imperialistas intentan poner sobre las espaldas del proletariado todo el peso de la crisis, y para esto aumentan la explotación de la clase obrera, se organizan para la guerra de rapiña contra distintos países para hacerse de sus recursos, en especial el agua, petróleo y los minerales, ampliando la devastación del medio ambiente.

Los imperialistas desarrollan acciones bélicas contra los pueblos, así quedó demostrado con las agresiones militares contra Libia y Siria, las cuales se han desarrollado con la mirada complaciente de los organismos internacionales que una vez más, han demostrado su triste papel de peones del imperialismo. Con el silencio cómplice de estos organismos se han producido intervenciones, masacres, bombardeos, entre otras acciones que llevan a cabo los imperialistas para saquear las riquezas de los pueblos y utilizarlas en favor de sus intereses.

Con la guerra, crecen las ganancias para la industria armamentista que pertenece a los más poderosos grupos económicos del planeta ubicados en EE.UU y Europa Occidental. Estas empresas incrementaron las ventas de armamento en más de 50% entre 2000 y 2010 para sustentar las agresiones, sometiendo los pueblos a terribles situaciones.


Las medidas de los imperialistas ante la crisis.



Los capitalistas han tomado diversas medidas con la firme intención de profundizar la explotación de los trabajadores y los pueblos, para garantizar sus ingresos, haciendo que la crisis recaiga sobre la clase obrera, para esto bajan salarios, extienden la jornada de trabajo, aplican recortes presupuestarios a la salud y educación, eliminan beneficios sociales y dejan a miles de trabajadores desempleados, los cuales experimentan día tras días la pauperización de su situación.

Las medidas que aplican las clases dominantes, significan hambre y miseria para las mayorías oprimidas. Ante esto, los jóvenes del mundo nos organizamos para rechazar con fuerza las medidas imperialistas, sumándonos a las manifestaciones de rechazo a estas, tomamos las calles de las principales ciudades del mundo, enfrentando a los cuerpos de seguridad que reprimen con violencia, a pesar de esto no nos rendimos, todo lo contrario, cada día se suman más jóvenes a estas expresiones de organización y resistencia popular, contra el fascismo y el imperialismo, como lo demuestra este XXIII Campamento.

Viendo esta situación que se desarrolla en el mundo, los jóvenes antifascistas, antiimperialistas, revolucionarios y democráticos, presentes en Caracas declaramos:

Rechazamos las guerras que promueven los imperialistas las cuales someten a los pueblos a terribles sufrimientos para satisfacer los intereses de la burguesía.

Rechazamos las políticas de privatización de la educación que desarrollan distintos gobiernos, negando así en la realidad concreta el derecho de la educación de los pueblos. Ante esto levantamos la propuesta de una educación para la emancipación que sea una herramienta para los pueblos en su lucha revolucionaria contra el imperialismo.

Rechazamos la criminalización de la lucha popular como medidas adoptadas por los gobiernos imperialistas, demagogos y pro imperialista que reprimen a los pueblos para imponer paquetes explotadores e intentar hacerlos retroceder en su lucha revolucionaria.

Nos solidarizamos con aquellos compañeros y compañeras que están en prisión por librar la lucha revolucionaria en favor de sus pueblos, enfrentando medidas de corte neoliberal que promueven la minería a cielo abierto, el extractivismo y la explotación más cruel a los trabajadores.

Nos solidarizamos con los pueblos que libran la lucha revolucionaria, utilizando todas las formas de lucha, contra la opresión del imperialismo.

Respaldamos la lucha librada por el pueblo venezolano en defensa de sus intereses, avanzando contra la derecha interna y contra el imperialismo, saludamos las medidas populares y democráticas asumidas por el presidente Hugo Chávez en favor de la juventud y de las mayorías populares. Abogamos porque el pueblo venezolano profundice y fortalezca los cambios sociales en favor de las mayorías explotadas y oprimidas derrotando las pretensiones de la derecha más recalcitrante de volver a dirigir los destinos de ese país.

Nos declaramos en permanente alerta ante el surgimiento de grupos violentos de extrema derecha, como es el caso de los neofascistas en Europa y los grupos paramilitares en América, ya que estos grupos son un instrumento del imperialismo para enfrentar la lucha revolucionaria de los pueblos.

Reivindicamos el socialismo como respuesta realmente revolucionaria que tienen los pueblos frente al capitalismo, única posibilidad real de superar definitivamente las crisis y garantizar la satisfacción de las necesidades a las mayorías.

Desde ya, hacemos el llamado a todos los jóvenes para movilizarse y participar en el próximo campamento antifascista y antiimperialista a realizarse en el año 2014, esto nos ubica la tarea de fortalecer nuestros trabajos en el seno de la juventud para seguir luchando por conquistas democráticas, populares y antiimperialistas y que el próximo campamento sea un espacio para compartir y fortalecernos con las experiencias combativas y victoriosas libradas al calor de nuestros pueblos.



Caracas - Venezuela

Agosto de 2012

Código:

Saludo de la Juventud Comunista de España (marxista-leninista) al XXIII CIJAA

Compañeros, en primer lugar nos gustaría felicitar la labor preparatoria de este campamento. Sabemos del esfuerzo que requiere preparar un evento de tales características, que da acogida a jóvenes de todo el mundo, jóvenes que día a día combaten en sus países contra el fascismo y el imperialismo en una lucha que no entiende de fronteras. Nos encantaría formar parte de esos cientos de jóvenes que estos días se encuentran y que difícilmente podrán olvidar este CIJAA, donde se nutrirán mutuamente con las experiencias de países distintos al suyo, se formarán en los distintos talleres y charlas y sobretodo se ilusionarán al comprobar que al mismo tiempo que ellos luchan en sus países miles de jóvenes hacen lo mismo en los suyos. Lamentablemente, las circunstancias políticas y sociales por las que atraviesa hoy España nos impiden poder estar ahí con vosotros. Sin embargo, somos conscientes de que nuestra ausencia personal no hace que estemos menos unidos. Y es que desde que nuestra joven organización dio sus primeros pasos, muchos camaradas de nuestro partido y especialmente Maite Martín, que ha participado numerosas veces en los comités preparatorios del CIJAA, nos han transmitido que el internacionalismo no es simplemente una consigna, sino un requisito indispensable para poder avanzar en nuestra lucha. En nuestro caso hoy más que nunca, con una Unión Europea que ahoga a sus pueblos y los conduce a la miseria, se hace necesario estrechar lazos con las juventudes antifascistas y antimperialistas europeas.

En este sentido, ciertamente los pueblos de Latinoamérica sois todo un ejemplo de unión y resistencia frente al imperialismo opresor. Hoy miles de ojos dirigen la mirada hacia vosotros y observan con interés los procesos revolucionarios que se dan a lo largo del continente: procesos como el de Venezuela, el cual, pese al acoso y derribo que sufre por parte de la reacción en su campaña de desprestigio, sigue ilusionando a miles de jóvenes de todo el mundo. Jóvenes, que al mismo tiempo, no podemos hacer otra cosa sino que compartir la rabia ante acontecimientos como el golpe de estado en Paraguay. Sin embargo, nuestra mirada hacia América Latina no puede ser otra que de esperanza. El pueblo latino ha demostrado a lo largo de la historia ser un pueblo insaciable, que cuando recibe un golpe levanta la cabeza, que no se rinde por muy graves que sean las adversidades. Habéis dejado para el resto de la humanidad el ejemplo de tantos revolucionarios que siguen viviendo en cada uno de nosotros, tantos poetas y artistas que con sus letras nos reconfortan y emocionan en los momentos más difíciles. Habéis demostrado que el ser humano puede dar lo mejor de sí en la lucha por un mundo sin opresores ni explotadores. Por eso, no podemos más que alegrarnos al ver cómo las luchas populares y sociales siguen y el pueblo latinoamericano no se rinde, ni se rendirá, ante el imperialismo. Y es que cada victoria vuestra es una victoria también nuestra: es una victoria de los pueblos y los trabajadores de todo el mundo.

Por eso os animamos a todos los que estáis oyendo esto ahora mismo a que sigáis luchando, a que aprovechéis estos días para ilusionaros y tomar energía y a que a que canalicéis toda esta experiencia para hacer avanzar los combates de vuestros países, para ser capaces de integrar a cada vez más jóvenes en esta lucha sin cuartel, para construir y mantener la organización de combate que liberará a los pueblos de sus opresores y anuncia que el futuro tiene nombre de revolución. La historia es nuestra, y la hacen los pueblos.

Recibid el más sincero y caluroso abrazo. Compañeros, amigos, camaradas, gritamos con vosotros:

¡VIVA LA JUVENTUD REVOLUCIONARIA! ¡VIVAN LAS LUCHAS DE LOS PUEBLOS!

¡PATRIA O MUERTE!

Reforcemos la lucha de la juventud contra el fascismo y el imperialismo ¡Construyamos organizaciones de combate de la juventud!

En primer lugar, queremos felicitar los trabajos del comité preparatorio del XXIII CIJAA. Nos congratulamos que el CIJAA vuelva a la patria bolivariana y como expone el comunicado del Comité Nacional Preparatorio Antifascista del mes de Mayo “por medio de las organizaciones sociales revolucionarias comprometidas con el Comandante Chávez y la Revolución Bolivariana a este trascendental evento.” Saludamos la organización de 19 comités preparatorios regionales a lo largo y ancho de Venezuela para la organización de este evento. De igual modo, saludamos la determinación de darle continuidad a los trabajos de este CIJAA más allá del mismo como demuestra la noticia de la convocatoria de la asamblea constitutiva de la juventud antifascista y anti-imperialista de Venezuela recientemente.

Estos hechos son excelentes noticias para la revolución en Venezuela y en todo el mundo. Estos hechos demuestran que se ha cumplido uno de los objetivos de nuestros CIJAA: el fortalecimiento organizativo, político e ideológico de la juventud.

En un escenario de gran confrontación ideológica y política como el que existe en Venezuela, y en toda América Latina como prueba el golpe de estado en Paraguay, es fundamental derrotar a las fuerzas reaccionarias y serviles al imperialismo al tiempo que se profundiza la lucha de clases y los revolucionarios acumulan fuerzas para “asaltar los cielos” para construir el Estado de las masas obreras y campesinas venezolanas.

La campaña del imperialismo no se detiene en Venezuela. En el contexto de crisis de superproducción capitalista, los distintos países imperialistas se enfrentan entre si y al tiempo enfrentan unidos a los pueblos. La consigna del capitalismo internacional centellea desde los principales centros de poder capitalista: ¡la crisis la pagara la clase obrera del mundo!

El programa estratégico de la burguesía internacional es claro y esta a la luz: ¡todos los esfuerzos contra la clase obrera y el pueblo!

Las intervenciones imperialistas bajo el manto de “intervenciones humanitarias” aumentan sin cesar. El pueblo libio puede dar testimonio de que los imperialistas nunca serán amigos de los pueblos. El pueblo sirio sufre igualmente la presión imperialista para someterse a los designios de las democracias occidentales. Los pueblos palestinos y saharuis sufren un genocidio silencioso. Los pueblos del mundo sufren la voracidad imperialista

Las masas populares avanzan en su combate contra el imperialismo y las oligarquías de sus respectivos países. La represión aumenta contra los luchadores sociales y contra la juventud . Pero este 2011 nos dejo la imagen del poder de las masas populares y su capacidad de intervenir en los planes del imperialismo sintetizado en los levantamientos populares en el mundo árabe.

Los procesos aun abiertos en países como Egipto o Túnez nos muestran la capacidad de las masas para influir en la realidad, para poner en aprietos a la burguesía. Estos procesos han culminado una primera fase con la victoria momentánea de las fuerzas islamistas pro-occidentales pero la carestía de la vida, el paro, la falta de oportunidades para los jóvenes indican que si los revolucionarios consiguen poner la necesidad de la transformación revolucionaria en el primer plano se abrirán nuevas esperanzas para los pueblos.

Nosotros, como revolucionarios españoles, observamos con simpatía los procesos de cambio en América Latina, el refuerzo de las luchas populares y el avance de conciencia de los trabajadores latinoamericanos. Así se levantaban los estudiantes chilenos, las fuerzas insurgentes colombianas, así se fortalecían los corrientes de cambio en numerosos países latinoamericanos, así las fuerzas populares confrontan contra la represión y los “partidos del orden”.

La forja de la revolución solo es posible en el calor de las luchas, de victorias y derrotas, en definitiva como decía Lenin “Es preciso soñar, pero con la condición de creer en nuestros sueños. De examinar con atención la vida real, de confrontar nuestra observación con nuestros sueños, y de realizar escrupulosamente nuestra fantasía."

En España, sufrimos las políticas de ajuste y austeridad impuestas por la oligarquía europea y desarrolladas en tándem por las instituciones europeas y el gobierno reaccionario de Mariano Rajoy.

Las políticas de austeridad que con mano firme aplica la oligarquía europea en cada uno de los países que forman la zona euro ha provocado una autentica emergencia social en nuestro país. 1 de cada 2 jóvenes nos encontramos en paro, y de los que trabajan, 2 de cada 3 lo hace en empleos precarios. Gran parte de estos, además, lo hace en empleos por debajo de la cualificación profesional que ostentan. A su vez, nuestros padres se ven obligados a vivir del paro o en su defecto, a rebajar de forma alarmante sus salarios para conservar su empleo. El cierre de la oferta de empleo público y la eliminación de cualquier atisbo de política industrial nos cierra la puerta para conseguir un empleo fijo.

Los estudiantes tampoco lo tienen más fácil. Para el próximo curso, las tasas universitarias aumentaran un 66% y se reducirán las becas y ayudas al estudio. Algunas regiones ya han anunciado que determinados tramos educativos perderán su carácter gratuito.

En las últimas fechas, el gobierno de Rajoy ha realizado un duro recorte que ha despertado a numerosas capas populares de nuestro país. Este recorte, justificado por el “rescate” bancario que la Unión Europea ha concedido a nuestro país, se concreta en:

Una subida de IVA que va a perjudicar fundamentalmente a las clases populares. Al mismo tiempo el fraude fiscal de las grandes empresas representa el 70 por ciento del total del país.

Suspensión de paga extra a los empleados públicos que recorta su sueldo entre un 5 y un 7%

Reducción de la prestación por desempleo a partir del medio año en el paro en un país con altísimas tasas de desempleo.

Estas medidas se suman a otras muchas (abaratamiento del despido, perdida de derechos laborales, privatización de empresas públicas, recortes en sanidad y educación, inyecciones millonarias a la banca) tomadas desde el inicio de la crisis, y muestran continuidad en los distintos gobiernos.

Frente a esto, la clase obrera y el pueblo se organizan para dar la batalla. El pasado mes de marzo los sindicatos de masas del país convocaron a una Huelga general que fue un tremendo éxito. Las movilizaciones y la organización en distintos sectores obreros crece y las propuestas se radicalizan ante la quiebra del sistema capitalista. El pasado 19 de julio se vivió otra histórica jornada de movilización que tendrá su continuidad con otra Huelga general presumiblemente convocada para el próximo mes de Octubre. En la actualidad, se incorporan a la lucha contra las políticas de ajuste y austeridad numerosos sectores populares que hasta ahora no habían participado en las movilizaciones. Este hecho plantea un reto a los revolucionarios: ser capaces de darle mayor masividad a las movilizaciones y al tiempo avanzar en la toma de conciencia de las masas.

Las fuerzas de derecha no están quietas, ante el creciente desprestigio de las instituciones capitalistas buscan reorientar el descontento popular hacia salidas populistas de derecha contra la “política” y los “sindicatos”. Estas propuestas echan arena en los ojos de los trabajadores y trabajamos en desenmascararlas ante el pueblo. Para nosotros lo fundamental es caminar junto a las fuerzas populares en su lucha, aportando nuestra experiencia militante y orientando las movilizaciones hacia la ruptura con el capitalismo y la construcción de un Estado que represente los intereses de la clase obrera y resto de capas populares.

No es la primera vez que amplias masas de nuestro país se movilizan. El pasado 10 de mayo de 2011 el presidente Zapatero aceptaba que traicionaba abiertamente su programa para imponer un duro recorte para las clases populares. Días después millones de ciudadanos se movilizaban y daban inicio al movimiento 15M. Este movimiento significó un punto de inflexión al echar a la calle a buena parte de las bases sociales del “socialismo” español en un contexto donde los sindicatos de masas decidían “conciliar” con la oligarquía española firmando un vergonzoso pacto de pensiones que perjudicaba gravemente a la juventud. Aquella movilización fue el inicio de la toma de conciencia de un sector de la juventud que por primera vez se implicaba en la acción política. El movimiento rompía con la eterna dicotomía de la izquierda española: el “quietismo” de las fuerzas reformistas y el “putschismo” de las fuerzas ultraizquierdistas.

El 15M cumplió la misión de acercar a la política a jóvenes hasta ahora alejados de las organizaciones sociales. Hoy el combate contra las políticas de ajuste y austeridad lo dirigen los sindicatos de masas y las fuerzas de izquierda comprometidas con la ruptura con el sistema político. Por ello la derecha ha iniciado una fuerte campaña contra el sindicalismo y los sindicalistas, intentando aprovechar la justa indignación de los trabajadores hacia las burocracias sindicales. La burguesía que sostiene económica e ideológicamente a la burocracia sindical pretende hacer pasar la “parte por el todo” y acabar con la última resistencia que le queda a la clase trabajadora: los sindicatos.

Las clases dominantes aprietan el paso represivo. Ante la movilización creciente de todos los sectores del pueblo, la represión aumenta y se recrudece. Camaradas de nuestra organización se han visto represaliados en las distintas movilizaciones populares. Numerosos jóvenes se ven azuzados diariamente por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. La oligarquía considera que mediante estas medidas va a evitar el aumento de la masividad y la combatividad del pueblo, pero como demuestra la justa lucha de los mineros españoles, la unidad y combate de la clase obrera es la única salida a un futuro de paro, miseria y represión para la clase obrera y la juventud. La JCE (m-l) está comprometida con estas luchas hasta sus últimas consecuencias.

Nuestra organización nació con una misión: organizar a la juventud para conquistar el socialismo. Subordinado a este objetivo desarrollamos distintas iniciativas que pretenden avanzar en las formas de organización y lucha de los jóvenes.

Nosotros, como comunistas de España, país imperialista de segundo orden, consideramos un deber internacionalista la solidaridad con los pueblos oprimidos por el imperialismo en todo el mundo. En particular denunciamos en todos los lugares el papel de las multinacionales de nuestro país en la explotación de amplias zonas de América Latina, África del Norte o el Este de Europa. Consideramos que sin la unión de la clase obrera española con la clase obrera de los países dominados por el imperialismo europeo no es posible construir una sociedad de iguales.

En nuestros cuatro años de historia hemos dado importancia a nuestro trabajo entre las masas. Nuestro último congreso realizado esta primavera bajo el título: ¡El futuro es nuestro! planteó como un eje fundamental el trabajo con las masas juveniles, el trabajo sistemático para elevar su conciencia, la elaboración de materiales de difusión ajustados a sus necesidades y nivel de conciencia. ¡Queremos construir la organización de combate de la juventud!. Queremos unirnos, hasta fundirnos, con las masas juveniles en nuestro país. Ser ejemplo de coherencia y combatividad. Plantear el anti-imperialismo como una seña de identidad de la juventud española, huyendo del rancio chovinismo y del “paternalismo” hipócrita que aleja a nuestros pueblos.

Nos planteamos también la necesidad de reforzar lazos con las juventudes revolucionarias de Europa. La situación en la Unión Europea es crítica. El polo imperialista europeo camina hacia mayores acuerdos en materia fiscal, económica y política que va en detrimento de los pueblos y que ahogará al pueblo europeo para mantener la “ competitividad” del capital europeo. Frente a ello la solidaridad de la clase obrera europea y la mejora de su coordinación a todos los niveles (sindical, político, juvenil) es una necesidad. En ese sentido, podemos destacar las relaciones de hermandad que mantenemos con distintas organizaciones juveniles europeas, destacando a la Unión de Jóvenes Revolucionarios de Francia cuya constitución hace escasos meses es una gran noticia para la juventud europea. En el entorno geográfico europeo también mantenemos relaciones con los jóvenes del EMEP (Turquía). A ambas organizaciones mandamos un fraternal saludo, que extendemos al resto de organizaciones y participantes en este evento y os hacemos un llamamiento a todos vosotros a estrechar nuestras relaciones y darle continuidad a la puesta en común de experiencias y luchas en nuestros respectivos países.

Las elecciones en Francia o Grecia muestran el crecimiento de opciones xenófobas y racistas a las que debemos combatir sin desmayo. En Europa, se incuba el germen fascista que solo será barrido por la acción consciente de las masas y sus organizaciones. Los fascistas no se irán por su propio pie, deberán ser expulsados de los barrios, de los pueblos y ciudades, de los parlamentos; desenmascarándolos ante el pueblo como amigos de la burguesía y enemigos de los trabajadores. Subestimar el peligro fascista es el mayor error que podemos cometer. En sus actividades, los fascistas se relacionan, se funden con los Estados burgueses, son las fuerzas de choque del capital y como tales deben ser tratadas por los revolucionarios.

Para nosotros el éxito del XXIII CIJAA es el éxito de toda la juventud mundial, el éxito de la solidaridad, la coherencia y el compromiso frente al individualismo, el egoísmo y la represión. Los pueblos tienen la llave de su futuro, ninguna maniobra imperialista, ninguna intervención de las clases dominantes puede evitar la organización del pueblo si este tiene claro sus objetivos de lucha. A los jóvenes, el sector más dinámico de la sociedad, nos toca la enorme responsabilidad de llevar a nuestros pueblos hacia la libertad, la igualdad y la solidaridad. Hacia una sociedad de iguales. Gritamos junto a nuestros padres y abuelos: ¡No pasarán!

¡Adelante la lucha de los pueblos contra el imperialismo!

¡Adelante la lucha de la juventud combativa!



¡Que la crisis la pague la burguesía y no la juventud y los pueblos!

Frente a la represión, la juventud dice BASTA!

Desde la Juventud Comunista de España (marxista-leninista) nos gustaría proponer a la presente edición del CIJAA una declaración contra las agresiones y la represión sufridas por la juventud en todos los lugares del mundo.

Ya conocemos la violencia estructural que el capitalismo ejerce sobre la juventud, condenándonos al desempleo, negándonos la posibilidad de un futuro, impidiendo el acceso a la educación o explotándonos brutalmente cuando conseguimos un empleo. Esto es lo que el capitalismo nos ofrece como forma de vida. Pero además, el capitalismo imperialista mantiene en unas condiciones aún peor a toda la población que habita las regiones oprimidas del planeta.

Y sabemos que la crisis que vive el sistema actualmente solo acentúa las condiciones que ofrece a la juventud trabajadora y popular. Los capitalistas pretenden pasar la crisis manteniendo su poder económico y político, para lo que incrementan el grado de explotación y la miseria de los pueblos. Lo hacen con eso que se llaman medidas de austeridad y que no son más que una reducción del nivel de vida de los trabajadores para mantener el elevado nivel de la clase capitalista.

Pero también sabemos que la historia no se ha detenido, y lo comprobamos con las explosiones obreras y populares que recorren el mundo como pólvora seca. Todos las semanas conocemos alguna lucha nueva en algún lugar del mundo. Desde Chile hasta Grecia, pasando por Estados Unidos y España; así como en África y Asia. Las masas de todas partes van dando el paso de la desidia a la indignación y de ésta a la lucha. Así lo comprobamos hace poco más de un año en España, de la misma forma que lo vemos hoy en México de nuevo o lo vimos en varios países del Norte de África.

Y en todas estas luchas hemos visto cómo la juventud, futuro del mundo, ha tomado parte activa y central en ellas. Nos niegan el futuro y por eso salimos a conquistarlo. La última Huelga General en España fue un claro ejemplo de que la juventud, lejos de estar completamente sumida en un letargo de drogas e individualismo, lucha por la vida que tiene que venir, contra la oscuridad en la que nos quieren hundir.

Ahora bien, el imperialismo es un sistema que agonizando, pelea por seguir funcionando y los capitalistas que lo dirigen no van a permitir perderlo todo. Es por ello que, viendo que las formas sutiles, culturales e ideológicas, de mantener desmovilizada a la juventud ya no funcionan; deben incrementar las formas físicas y legales de represión.

Es por eso que la juventud, el sector más dinámico y combativo de las luchas, sufre la represión especialmente. Lo hemos visto en Ecuador con el compañero Marcelo Rivera, lo comprueban todos los días los compañeros colombianos, lo sufrieron los compañeros chilenos y lo hemos experimentado igualmente en España, donde la brutalidad de la policía y el uso indiscriminado de balas de goma pero también del acoso legal se ha hecho algo permanente en todas las movilizaciones. Las detenciones, a veces incluso de forma ilegal, se multiplican en todos lados y pretenden ser un dique de contención ante la marea obrera y popular que no se detiene.

Y ante esta represión ejercida por los defensores de aquellos que nos mantienen bajo la explotación y la miseria, la juventud reunida en el CIJAA dice BASTA. Decimos alto a la criminalización de la juventud obrera y popular que se organiza para luchar por su futuro, por su vida.

Nos niegan el futuro y cuando intentamos conquistarlo, nos reprimen. Y lo hacen porque saben que se lo juegan todo. Los capitalistas saben, igual que lo sabemos la juventud revolucionaria, que para garantizar el futuro de la juventud obrera y popular, el poder económico y político de los capitalistas debe ser tomado en manos de la propia clase obrera. Sin esa transformación, la juventud se verá una y otra vez bloqueada por las condiciones que imponen los capitalistas.

¡No a la criminalización de la juventud que lucha por su vida!



¡Viva la lucha de la juventud obrera y popular!