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Por: Samuel Santos Sosa
Bases Militares Norte Americanas en Colombia
Una vez más el Imperio pretende amenazar los aires libertarios en América, esgrimiendo la necesidad de establecer bases militares en esta zona geográfica de Latinoamérica, tal como ocurrió en el siglo pasado. USA estableció bases militares a lo largo y ancho de Latinoamérica, en aquel momento decían con el fin de detener el avance del comunismo, hoy en día argumentan la necesidad de instalar y operar esas bases con el fin de combatir el narcotráfico.
La historia nos ha confirmado que el uso de esas bases militares jamás ni nunca se han utilizado para el fin que alegan los yankees, pues las mismas han servido para agredir a los pueblos que pretenden realizar transformaciones bien sean estas pacificas o por otra vía, transformaciones que los imperialistas consideran son un peligro para sus intereses en la región. Lo anterior lo aseveramos pues los hondureños, hemos visto, para que se ha utilizado la Base Militar Norteamericana Soto Cano, ubicada en Palmerola, la cual sirvió de plataforma de agresión al hermano pueblo nicaragüense en los años 80s, en donde se entrenaba a la contra nicaragüense, de ahí salían aviones Hércules C-130 cargados con pertrechos para el abastecimiento de las tropas irregulares de la contrarrevolución nicaragüense, también ahí, y en el Centro de Entrenamiento Militar (CREM), ubicado en Silim, se entrenaba a las tropas de la contrarrevolución, así como también al ejercito genocida salvadoreño, que por aquellos años reprimía y mataba al heroico pueblo salvadoreño.
Lo antes señalado, nos da el parámetro para asegurar que esas bases militares han servido y servirán, como plataformas de agresión para reprimir los aires libertarios que en este momento respiran los pueblos latinoamericanos. La instalación de bases militares en Colombia no tiene el fin de contrarrestar el narcotráfico, tienen el objetivo de servir de armazones para ahogar los gritos de libertad del pueblo boliviano, ecuatoriano y venezolano y de cualquier otro pueblo en la región, que alce su voz de libertad, no nos llamemos al engaño, la historia lo ha demostrado.
Si los yankees verdaderamente tienen el interés de controlar el narcotráfico, deben de comenzar contralando el uso y trafico de esas sustancias en el interior de Estados Unidos, principal mercado de consumo mundial de drogas, publicando los nombres de militares y personajes políticos vinculados con ese ilícito, así como también solicitando la extradición de estos para ser juzgados bien sean en cortes norteamericanas, y mejor aún en cortes internacionales, en donde estos personajes no tengan la posibilidad de evadir la justicia.
Todo esto, nos motiva a aseverar que esas bases militares que pretenden instalar los norteamericanos en Colombia, únicamente servirán para resguardar sus intereses en esa zona geográfica y nunca para lo que pregonan. Por eso y, como Hondureño, como Centroamericano y como Latinoamericano, estamos y estaremos en contra de tales pretensiones, por eso decimos. ¡No a las bases Militares Yankees en L.A.!, ¡No a las pretensiones Norteamericanas en Colombia!, ¡Green go Home, fuera de América Latina!, ¡Libertad para los pueblos latinoamericanos!, ¡Por la libre Autodeterminación de los pueblos!.
La Ceiba, Honduras Abril de 2010.
Samuel Santos Sosa
Bases Militares Norte Americanas en Colombia
Una vez más el Imperio pretende amenazar los aires libertarios en América, esgrimiendo la necesidad de establecer bases militares en esta zona geográfica de Latinoamérica, tal como ocurrió en el siglo pasado. USA estableció bases militares a lo largo y ancho de Latinoamérica, en aquel momento decían con el fin de detener el avance del comunismo, hoy en día argumentan la necesidad de instalar y operar esas bases con el fin de combatir el narcotráfico.
La historia nos ha confirmado que el uso de esas bases militares jamás ni nunca se han utilizado para el fin que alegan los yankees, pues las mismas han servido para agredir a los pueblos que pretenden realizar transformaciones bien sean estas pacificas o por otra vía, transformaciones que los imperialistas consideran son un peligro para sus intereses en la región. Lo anterior lo aseveramos pues los hondureños, hemos visto, para que se ha utilizado la Base Militar Norteamericana Soto Cano, ubicada en Palmerola, la cual sirvió de plataforma de agresión al hermano pueblo nicaragüense en los años 80s, en donde se entrenaba a la contra nicaragüense, de ahí salían aviones Hércules C-130 cargados con pertrechos para el abastecimiento de las tropas irregulares de la contrarrevolución nicaragüense, también ahí, y en el Centro de Entrenamiento Militar (CREM), ubicado en Silim, se entrenaba a las tropas de la contrarrevolución, así como también al ejercito genocida salvadoreño, que por aquellos años reprimía y mataba al heroico pueblo salvadoreño.
Lo antes señalado, nos da el parámetro para asegurar que esas bases militares han servido y servirán, como plataformas de agresión para reprimir los aires libertarios que en este momento respiran los pueblos latinoamericanos. La instalación de bases militares en Colombia no tiene el fin de contrarrestar el narcotráfico, tienen el objetivo de servir de armazones para ahogar los gritos de libertad del pueblo boliviano, ecuatoriano y venezolano y de cualquier otro pueblo en la región, que alce su voz de libertad, no nos llamemos al engaño, la historia lo ha demostrado.
Si los yankees verdaderamente tienen el interés de controlar el narcotráfico, deben de comenzar contralando el uso y trafico de esas sustancias en el interior de Estados Unidos, principal mercado de consumo mundial de drogas, publicando los nombres de militares y personajes políticos vinculados con ese ilícito, así como también solicitando la extradición de estos para ser juzgados bien sean en cortes norteamericanas, y mejor aún en cortes internacionales, en donde estos personajes no tengan la posibilidad de evadir la justicia.
Todo esto, nos motiva a aseverar que esas bases militares que pretenden instalar los norteamericanos en Colombia, únicamente servirán para resguardar sus intereses en esa zona geográfica y nunca para lo que pregonan. Por eso y, como Hondureño, como Centroamericano y como Latinoamericano, estamos y estaremos en contra de tales pretensiones, por eso decimos. ¡No a las bases Militares Yankees en L.A.!, ¡No a las pretensiones Norteamericanas en Colombia!, ¡Green go Home, fuera de América Latina!, ¡Libertad para los pueblos latinoamericanos!, ¡Por la libre Autodeterminación de los pueblos!.
La Ceiba, Honduras Abril de 2010.
Samuel Santos Sosa
