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La última astracanada perpetrada por el inefable Ricardo Tarno, alcalde reaccionario del PP apoyado por el nacionalismo andaluz del PA(curiosos compañeros tiene la querencia a la poltrona, al trincar de lo público) ha sido el paso de la vuelta ciclista por nuestro pueblo.
Con gran boato y fanfarria, se destina el dinero de los trabajadores de este pueblo a mayor gloria de la megalomanía del alcalde burgués, y de las empresas patrocinadoras. Y es que parece que en un pueblo donde se persiguen las expresiones de arte urbano, o donde molesta todo tipo de expresión callejera de las clases oprimidas, no pasa lo mismo cuando de la burguesía, clase dominante se trata. Tenemos que aguantar pues, que los capitalistas ensucien nuestro pueblo con sus anuncios, algunos en mitad de vías públicas, que a más de una semana vista del evento ahí siguen. Expresión una vez más de a quién y a qué intereses sirven las poltronas burguesas.
Sin embargo, ese no es el peor problema. Los barrios obreros del pueblo siguen en un estado lamentable, porque parece ser que para los “geniales” representantes de los patrones el término municipal se acaba en los límites de los barrios pudientes, como Simón Verde. Ante este estado de abandono, parece que la fanfarria, el “pan y circo” es la solución a los problemas, ya que ese dinero gastado en acondicionar el pueblo para eventos deportivos sin más trascendencia parece que no está disponible para las más mínimas reformas y arreglos estructurales en las barriadas obreras.
Si tuviésemos siquiera un apoyo al deporte de base mínimo, un acceso gratuito a este y a las instalaciones fácil para la clase obrera…pero tampoco. Y es que, en lo último que piensan los más de 6.000 parados del pueblo es en la propia subsistencia, marcados por el drama del desempleo crónico que produce el capitalismo y cuya única salida es la emigración a otras latitudes. Porque en Mairena, el trabajo ni está ni se le espera. Sus "salidas" siguen siendo subvencionar, darle nuestro dinero a los emprendedores, es decir, a los patrones que se lucran a costa de la plusvalía que obtienen del trabajo ajeno. Ellos nunca señalarán el auténtico problema: el capitalismo, la propiedad privada de los medios de producción(fábricas, comercios, centros de trabajo, tierras), las relaciones de producción donde ellos son dueños de todo y los obreros no tenemos nada. No, no hay salida para los trabajadores dentro del capitalismo , solo paro, miseria desahucios, hambre, etc.
Parques industriales donde hay de todo menos industria, pequeño comercio local que agoniza ante la imposibilidad de competir con las grandes superficies a las que las sucesivas corporaciones municipales pusieron al alfombra roja, y lo poco que hay, cierra. Y es que no podía ser de otro modo dentro del capitalismo en su fase putrefacta.
Tampoco debemos olvidar que los actuales no son más que otros gestores del capitalismo. La clase obrera no debe olvidar nunca el papel jugado por el PSOE en la alcaldía durante años, y que el estilo faraónico no es cosa del espécimen Tarno sino que antes tuvimos que aguantar todo tipo de eventos, fuentes con dinero de parados u obras a beneficio de los cuatro amiguetes de turno. No olvidemos asimismo el papel de la socialdemocracia de IU-PCE, lacayos y sostenedores del PSOE en el Ayuntamiento, cuya querencia a la poltrona, al cargo municipal y a los sueldos que de ellos emanan se antepone a la defensa de los trabajadores, a la lucha contra el capitalismo. Pero la clase obrera no olvida, y esta pandilla de traidores ha pasado de ser fuerza hegemónica en el pueblo a una sigla casi residual.
Ante este panorama para las clases trabajadoras de nuestro pueblo urge construir una alternativa sólida al capitalismo, que no pase por las urnas ni por las poltronas, que no pase por los ayuntamientos ni por la gestión del capitalismo. Una alternativa que pase por la democracia auténtica, que es el poder popular emanado de los barrios obreros, de las fábricas, de los centros de trabajo y de las escuelas de nuestro municipio. Una unión de lucha en torno al Frente Único del Pueblo y a la Asamblea de Comités, Delegados y Trabajadores(ACDT), para que con la lucha de clases y el socialismo como meta consigamos una sociedad y un pueblo donde la clase obrera ostente realmente el poder, y seamos nosotros, los que producimos toda la riqueza, los que decidamos como gestionar nuestra sociedad.
¡CONTRA EL PODER DE LOS PATRONES Y SUS LACAYOS, PODER POPULAR!
Células del Aljarafe del P.C.O.E. de Sevilla
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Con gran boato y fanfarria, se destina el dinero de los trabajadores de este pueblo a mayor gloria de la megalomanía del alcalde burgués, y de las empresas patrocinadoras. Y es que parece que en un pueblo donde se persiguen las expresiones de arte urbano, o donde molesta todo tipo de expresión callejera de las clases oprimidas, no pasa lo mismo cuando de la burguesía, clase dominante se trata. Tenemos que aguantar pues, que los capitalistas ensucien nuestro pueblo con sus anuncios, algunos en mitad de vías públicas, que a más de una semana vista del evento ahí siguen. Expresión una vez más de a quién y a qué intereses sirven las poltronas burguesas.
Sin embargo, ese no es el peor problema. Los barrios obreros del pueblo siguen en un estado lamentable, porque parece ser que para los “geniales” representantes de los patrones el término municipal se acaba en los límites de los barrios pudientes, como Simón Verde. Ante este estado de abandono, parece que la fanfarria, el “pan y circo” es la solución a los problemas, ya que ese dinero gastado en acondicionar el pueblo para eventos deportivos sin más trascendencia parece que no está disponible para las más mínimas reformas y arreglos estructurales en las barriadas obreras.
Si tuviésemos siquiera un apoyo al deporte de base mínimo, un acceso gratuito a este y a las instalaciones fácil para la clase obrera…pero tampoco. Y es que, en lo último que piensan los más de 6.000 parados del pueblo es en la propia subsistencia, marcados por el drama del desempleo crónico que produce el capitalismo y cuya única salida es la emigración a otras latitudes. Porque en Mairena, el trabajo ni está ni se le espera. Sus "salidas" siguen siendo subvencionar, darle nuestro dinero a los emprendedores, es decir, a los patrones que se lucran a costa de la plusvalía que obtienen del trabajo ajeno. Ellos nunca señalarán el auténtico problema: el capitalismo, la propiedad privada de los medios de producción(fábricas, comercios, centros de trabajo, tierras), las relaciones de producción donde ellos son dueños de todo y los obreros no tenemos nada. No, no hay salida para los trabajadores dentro del capitalismo , solo paro, miseria desahucios, hambre, etc.
Parques industriales donde hay de todo menos industria, pequeño comercio local que agoniza ante la imposibilidad de competir con las grandes superficies a las que las sucesivas corporaciones municipales pusieron al alfombra roja, y lo poco que hay, cierra. Y es que no podía ser de otro modo dentro del capitalismo en su fase putrefacta.
Tampoco debemos olvidar que los actuales no son más que otros gestores del capitalismo. La clase obrera no debe olvidar nunca el papel jugado por el PSOE en la alcaldía durante años, y que el estilo faraónico no es cosa del espécimen Tarno sino que antes tuvimos que aguantar todo tipo de eventos, fuentes con dinero de parados u obras a beneficio de los cuatro amiguetes de turno. No olvidemos asimismo el papel de la socialdemocracia de IU-PCE, lacayos y sostenedores del PSOE en el Ayuntamiento, cuya querencia a la poltrona, al cargo municipal y a los sueldos que de ellos emanan se antepone a la defensa de los trabajadores, a la lucha contra el capitalismo. Pero la clase obrera no olvida, y esta pandilla de traidores ha pasado de ser fuerza hegemónica en el pueblo a una sigla casi residual.
Ante este panorama para las clases trabajadoras de nuestro pueblo urge construir una alternativa sólida al capitalismo, que no pase por las urnas ni por las poltronas, que no pase por los ayuntamientos ni por la gestión del capitalismo. Una alternativa que pase por la democracia auténtica, que es el poder popular emanado de los barrios obreros, de las fábricas, de los centros de trabajo y de las escuelas de nuestro municipio. Una unión de lucha en torno al Frente Único del Pueblo y a la Asamblea de Comités, Delegados y Trabajadores(ACDT), para que con la lucha de clases y el socialismo como meta consigamos una sociedad y un pueblo donde la clase obrera ostente realmente el poder, y seamos nosotros, los que producimos toda la riqueza, los que decidamos como gestionar nuestra sociedad.
¡CONTRA EL PODER DE LOS PATRONES Y SUS LACAYOS, PODER POPULAR!
Células del Aljarafe del P.C.O.E. de Sevilla
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