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En el texto "Es la anarquía de izquierda?" [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] del blog anti-autoritario [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] tratan de reconocer que el anarquismo, la vida sin gobernantes, existía mucho antes de que hombres blancos muertos acuñaran el término.
El ala izquierda es un ala del capital, y no puede sustraerse del capital. En lugar de abolir el trabajo y la producción, el deseo de izquierda es reorganizarlos. Para ellos, la producción de "la gente" es preferible a la producción para los capitalistas. Los izquierdistas creen que por la reestructuración y el cambio de nombre de algunos aspectos del trabajo, se puede hacer tolerable, ¡o incluso agradable! Frederick Engels quería "abolir la competencia y reemplazarla por asociación".
Aquellos que todavía se aferran a la producción se niegan a ver el verdadero carácter coercitivo del capital. Los trabajadores de hoy son literalmente obligados a trabajar. En el primer mundo, se enfrentan a cargos de vagancia y con el estómago vacío por no trabajar. En el tercer mundo, se enfrentan con el asesinato y el hambre. En un mundo donde la gente no se enfrente con estas cosas, ¿realmente optarían por trabajar?
La mayor parte del trabajo ... el trabajo que verdaderamente constituye la base de nuestra civilización ... es extremadamente peligroso...
Nuestras industrias operan a costa de derrumbes de minas, derrames de petróleo, y el pulmón negro. Las montañas de basura en los países en desarrollo que "reciclamos" dan enfermedades del corazón a los que se alimentan a través de ellos. Todavía no sabemos si los terremotos en nuestros patios traseros son causados por fractura hidráulica.
Sin la siempre presente amenaza de la violencia o el hambre, ¿la gente eligiría arriesgar sus vidas para la producción? La respuesta a esto se puede ver en las leyes que el Estado nos impone que nos impiden escapar de las garras del capital. Las leyes en muchos lugares contra la recolección de agua y escarbar en basureros dejan claro que la independencia del sistema no viene sin consecuencias.
Además de ser inherentemente peligrosa, ¿que es realmente lo malo en la producción? Karl Marx habló del trabajo alienado ...
Cuando producimos las cosas bajo el yugo del capital, estamos vendiendo nuestro trabajo. No nos beneficiamos directamente de las cosas que producimos, nos limitamos a recibir un salario, con la esperanza de que esas cosas que se venderán por dinero para pagar nuestros salarios. Los que están en la industria de servicios, que no producen directamente las cosas, también están alienados, interpretando el papel de los sirvientes para los que vienen a gastar sus salarios. El trabajo no está haciendo crecer comida en su jardín. No está ayudando a un amigo a construir una casa. Trabajar por las cosas que te beneficien directamente a ti mismo no es trabajar. Se llama simplemente vivir.
El trabajo es tortura ... literalmente.
La Biblia nos dice que debemos estar orgullosos de nuestro trabajo, porque somos esclavos de él.
Trabajo, por su propia definición en algunas lenguas es opresivo. No es de extrañar que muchas culturas tradicionales ni siquiera se molestaron con tal concepto.
Trabajo, y su prima industrializada, producción, no pueden ser reformados. Incluso Marx, que tan agudamente señaló sus maquinaciones, no se atrevía a rechazarla por completo ... tal vez porque en realidad nunca laboró [como asalariado] ni un día en su vida... tal vez porque él vivió en una época ya tan firmemente arraigada en la tecnología y la producción que no podía imaginar un mundo sin ella. Doscientos años más tarde, los izquierdistas de hoy se apegan con más fuerza a la máquina que apunta a la Internet o la impresión en 3D como medio de liberación.
Pero para hacer computadoras, para hacer las impresoras 3D, para fabricar baterías, incluso, se requiere gente que haga el tipo de trabajo que sólo se puede hacer a través de la coerción.
La esclavitud, en una u otra forma, es responsable de la construcción y el mantenimiento de la civilización.
Desde la sociedad relativamente avanzada de la antigua China a las pirámides ... de los siervos de la Europa medieval con el comercio de esclavos en el Atlántico. Ahora existimos como somos debido a las condiciones de esclavitud en China y África. Los mismos metales que hacen que nuestros coches y los ordenadores existan fueron peligrosamente excavados de la tierra en un solo continente, y enviados, en un proceso que puede llevar semanas, a otro para fabricar las cosas. En un mundo en que fuésemos libres de proveernos lo que necesitáramos, si así lo deseamos, ¿continuaría este proceso? ¿Tenemos suficientes recursos en el planeta para continuarlo?
Al ritmo de producción actual, British Petroleum estima que tenemos cerca de 50 años de petróleo. Si bien es posible que tengamos suficientes metales de tierras raras en la tierra para hacer los teléfonos inteligentes y ordenadores para todos en el mundo, la desigual distribución de estos metales significa que tendríamos que destrozar grandes extensiones de tierra para hacerlo. Si no tuviéramos que hacerlo, ¿tendríamos que voluntariamente destruir y agotar la tierra, como lo estamos haciendo ahora? Teniendo en cuenta nuestros propios recursos, ¿qué incentivo hay en la destrucción?
Incluso si las fábricas se manejaran democráticamente, todavía serían fábricas. Los trabajadores permanecerían siendo trabajadores. Ninguna cantidad de reforma o reorganización puede cambiar esto, y no está claro si muchos izquierdistas siquiera lo quieren. Tomemos este ejemplo de la Francia revolucionaria en Mayo de 1968 ...
Cualquier persona que desee cambiar la sociedad de una manera significativa debe ver la producción por lo que realmente es... seres humanos coaccionados por la maquinaria y distanciados entre sí... el saqueo del medio ambiente y el distanciamiento de la naturaleza.
El ala izquierda es un ala del capital, y no puede sustraerse del capital. En lugar de abolir el trabajo y la producción, el deseo de izquierda es reorganizarlos. Para ellos, la producción de "la gente" es preferible a la producción para los capitalistas. Los izquierdistas creen que por la reestructuración y el cambio de nombre de algunos aspectos del trabajo, se puede hacer tolerable, ¡o incluso agradable! Frederick Engels quería "abolir la competencia y reemplazarla por asociación".
Aquellos que todavía se aferran a la producción se niegan a ver el verdadero carácter coercitivo del capital. Los trabajadores de hoy son literalmente obligados a trabajar. En el primer mundo, se enfrentan a cargos de vagancia y con el estómago vacío por no trabajar. En el tercer mundo, se enfrentan con el asesinato y el hambre. En un mundo donde la gente no se enfrente con estas cosas, ¿realmente optarían por trabajar?
La mayor parte del trabajo ... el trabajo que verdaderamente constituye la base de nuestra civilización ... es extremadamente peligroso...
Nuestras industrias operan a costa de derrumbes de minas, derrames de petróleo, y el pulmón negro. Las montañas de basura en los países en desarrollo que "reciclamos" dan enfermedades del corazón a los que se alimentan a través de ellos. Todavía no sabemos si los terremotos en nuestros patios traseros son causados por fractura hidráulica.
Sin la siempre presente amenaza de la violencia o el hambre, ¿la gente eligiría arriesgar sus vidas para la producción? La respuesta a esto se puede ver en las leyes que el Estado nos impone que nos impiden escapar de las garras del capital. Las leyes en muchos lugares contra la recolección de agua y escarbar en basureros dejan claro que la independencia del sistema no viene sin consecuencias.
Además de ser inherentemente peligrosa, ¿que es realmente lo malo en la producción? Karl Marx habló del trabajo alienado ...
Marx escribió:"... Cuanto más se desgasta el trabajador, más poderoso se vuelve el mundo extraño de los objetos que él crea sobre y contra sí mismo, tanto más pobre se vuelve él mismo - su mundo interior menos le pertenece como propio. Es lo mismo en la religión. Cuanto más fe pone el hombre en Dios, menos la conserva en sí mismo. El trabajador pone su vida en el objeto; pero ahora su vida ya no le pertenece a él, sino al objeto. "
Cuando producimos las cosas bajo el yugo del capital, estamos vendiendo nuestro trabajo. No nos beneficiamos directamente de las cosas que producimos, nos limitamos a recibir un salario, con la esperanza de que esas cosas que se venderán por dinero para pagar nuestros salarios. Los que están en la industria de servicios, que no producen directamente las cosas, también están alienados, interpretando el papel de los sirvientes para los que vienen a gastar sus salarios. El trabajo no está haciendo crecer comida en su jardín. No está ayudando a un amigo a construir una casa. Trabajar por las cosas que te beneficien directamente a ti mismo no es trabajar. Se llama simplemente vivir.
El trabajo es tortura ... literalmente.
Jeremy Seabrook escribió:"La palabra francesa travail (trabajo en español) se derivan del latín trepaliare - torturar, infligir sufrimiento o angustia. La palabra francesa peine, es decir, pena o sanción, también se utiliza para significar trabajos penosos, algo logrado con gran esfuerzo.
El Arbeit alemán sugiere esfuerzo, dificultades y el sufrimiento; es afín con la eslava rabota (de donde deriva el "robot" inglés), una palabra que significa prestación personal, trabajo forzoso o siervo.
En las lenguas romances, palabras derivadas del latin laborare han llegado a significar arar o labrar la tierra, aunque en italiano, lavoro también significa trabajo en general. El significado en latín era algo logrado con dificultad y lucha.
El "work" Inglés tiene una raíz indoeuropea werg-, a través de griego ergon, que significa acto o acción sin connotaciones punitivas; y del latín urgere, prensar u obligar. Es afín con la wrikan gótica, perseguir, y el Viejo Inglés wrecan.
Así, en la palabra "trabajo", la violencia está latente, y aparece en la forma de estragos, cuando hablamos de causar estragos o venganza."-
La Biblia nos dice que debemos estar orgullosos de nuestro trabajo, porque somos esclavos de él.
"Así que he visto que no hay nada mejor que
un hombre se alegre en su trabajo, esa es su parte."
Eclesiastés 3:22
un hombre se alegre en su trabajo, esa es su parte."
Eclesiastés 3:22
Trabajo, por su propia definición en algunas lenguas es opresivo. No es de extrañar que muchas culturas tradicionales ni siquiera se molestaron con tal concepto.
Herbert A. Applebaum escribió:"No hubo ninguna palabra separada para el trabajo. El trabajo era parte de las propias obligaciones de parentesco... una forma de estar en contacto con la naturaleza como parte de una relación recíproca de recibir y devolver."
Trabajo, y su prima industrializada, producción, no pueden ser reformados. Incluso Marx, que tan agudamente señaló sus maquinaciones, no se atrevía a rechazarla por completo ... tal vez porque en realidad nunca laboró [como asalariado] ni un día en su vida... tal vez porque él vivió en una época ya tan firmemente arraigada en la tecnología y la producción que no podía imaginar un mundo sin ella. Doscientos años más tarde, los izquierdistas de hoy se apegan con más fuerza a la máquina que apunta a la Internet o la impresión en 3D como medio de liberación.
Pero para hacer computadoras, para hacer las impresoras 3D, para fabricar baterías, incluso, se requiere gente que haga el tipo de trabajo que sólo se puede hacer a través de la coerción.
La esclavitud, en una u otra forma, es responsable de la construcción y el mantenimiento de la civilización.
Desde la sociedad relativamente avanzada de la antigua China a las pirámides ... de los siervos de la Europa medieval con el comercio de esclavos en el Atlántico. Ahora existimos como somos debido a las condiciones de esclavitud en China y África. Los mismos metales que hacen que nuestros coches y los ordenadores existan fueron peligrosamente excavados de la tierra en un solo continente, y enviados, en un proceso que puede llevar semanas, a otro para fabricar las cosas. En un mundo en que fuésemos libres de proveernos lo que necesitáramos, si así lo deseamos, ¿continuaría este proceso? ¿Tenemos suficientes recursos en el planeta para continuarlo?
Al ritmo de producción actual, British Petroleum estima que tenemos cerca de 50 años de petróleo. Si bien es posible que tengamos suficientes metales de tierras raras en la tierra para hacer los teléfonos inteligentes y ordenadores para todos en el mundo, la desigual distribución de estos metales significa que tendríamos que destrozar grandes extensiones de tierra para hacerlo. Si no tuviéramos que hacerlo, ¿tendríamos que voluntariamente destruir y agotar la tierra, como lo estamos haciendo ahora? Teniendo en cuenta nuestros propios recursos, ¿qué incentivo hay en la destrucción?
Incluso si las fábricas se manejaran democráticamente, todavía serían fábricas. Los trabajadores permanecerían siendo trabajadores. Ninguna cantidad de reforma o reorganización puede cambiar esto, y no está claro si muchos izquierdistas siquiera lo quieren. Tomemos este ejemplo de la Francia revolucionaria en Mayo de 1968 ...
Fredy Perlman escribió:"La idea de que 'los medios de producción pertenecen a la clase trabajadora' se traduce en el sentido de que los trabajadores son propietarios de la fábrica en particular donde trabajan. Esta es una vulgarización extrema. Tal interpretación significaría que la actividad concreta a la que la lucha salarial condenó a alguien en la sociedad capitalista es la actividad a la que van a ser condenados cuando transformen la sociedad. ¿Qué pasa si alguien que trabaja en la fábrica de automóviles quiere pintar, trabajar el campo, volar o hacer investigación en lugar de la producir automóviles cadena de montaje? Una revolución significaría que los trabajadores, en ese momento, irían por toda la sociedad, y es dudoso que muchos de ellos regresarían a la fábrica de automóviles en particular donde el capitalismo los había condenado a trabajar"
Cualquier persona que desee cambiar la sociedad de una manera significativa debe ver la producción por lo que realmente es... seres humanos coaccionados por la maquinaria y distanciados entre sí... el saqueo del medio ambiente y el distanciamiento de la naturaleza.
Bob Black escribió:"Con el fin de dejar de sufrir, tenemos que dejar de trabajar."
