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Acto público en el C.S. Potemkin
Las mujeres en las luchas obreras y sindicales
Con Mila de Frutos y mujeres militantes de IC.
Jueves 13 de marzo, 19:30h
C/Mira el sol 17, Lavapiés
Compañeras, todas a la lucha revolucionaria
Un año más reivindicamos en el 8 de marzo como día internacional, la lucha y los derechos de la mujer trabajadora.
El capitalismo esta afianzando sus posiciones contra la clase trabajadora y en plena reorganización del capital, las mujeres estamos sufriendo un ataque brutal a nuestros derechos.
El paro, las reformas de las leyes laborales, los recortes… están asfixiando a la clase trabajadora y sometiéndola al abismo de las condiciones de semi- esclavitud laborales. La mujer, como clase obrera, está siendo atacada desde dos frentes: a través del capital y su criminal alianza con el patriarcado.
Todo este ataque se encuadra en el modelo de familia burgués en donde la mujer cumple el papel de cuidadora y reproductora. Mientras desmantelan las políticas sociales, pretenden que nosotras realicemos ese trabajo al Estado de manera gratuita y silenciosa además de reservarnos los trabajos más precarios, de pocas horas y baja remuneración. Esto se traduce en precariedad, pobreza y largas jornadas en el hogar.
En este encuadre, nos encontramos con la reforma de la ley del aborto, que vuelve a los supuestos de la ley de 1985 y que supone un ataque directo a nuestros cuerpos y nuestra libertad y es un claro ejemplo de cómo el patriarcado y la burguesía trabajan conjuntamente. Además, esta ley niega el supuesto de malformación del feto al mismo tiempo que con las políticas económicas y sociales niegan sus derechos a las personas con discapacidad.
Esta reforma bebe ideológicamente del patriarcado entendiendo que mujer es igual a maternidad y que el papel fundamental de la misma es el cuidado y reproducción. La ley afectará de manera directa y despiadada a las mujeres de la clase trabajadora que sin poder adquisitivo se verán abocadas a los abortos clandestinos. Esto se traducirá en la muerte y daño para las mujeres, obligándonos a una maternidad no deseada y a una restricción absoluta de nuestra libertad encadenándonos a los trabajos precarios y a depender económicamente del sueldo del hombre.
Nos obligan a seguir dentro del modelo familiar burgués por la imposibilidad de emancipación ya que sin trabajo digno no hay libertad posible. Nuestros derechos se derivan de nuestro papel productor y activo en la sociedad.
Las mujeres tenemos que organizarnos por nuestros derechos, contra el patriarcado y contra el capital.
Nuestra libertad pasa por la destrucción del capitalismo y la creación de la sociedad socialista en donde la clase obrera tenga el poder y el pueblo gobierne para si.
No podemos tener libertad real dentro del sistema capitalista. El feminismo burgués realiza concesiones a las mujeres, concesiones parciales que no profundizan en nuestra verdadera explotación como productoras y reproductoras dentro del sistema y que como estamos viendo, pueden ser desmanteladas en cualquier momento.
Nos venden una libertad en las leyes que en la práctica real de nuestras condiciones materiales como trabajadoras no existen porque no se pueden llevar a cabo. Son papel mojado si nuestros derechos como mujeres trabajadoras son pisoteados.
¡¡Contra el patriarcado y el capital feminismo y revolución!!
¡¡Viva la lucha de las mujeres y de la clase trabajadora!!
Acto público en el C.S. Potemkin
Las mujeres en las luchas obreras y sindicales
Con Mila de Frutos y mujeres militantes de IC.
Jueves 13 de marzo, 19:30h
C/Mira el sol 17, Lavapiés
Compañeras, todas a la lucha revolucionaria
Un año más reivindicamos en el 8 de marzo como día internacional, la lucha y los derechos de la mujer trabajadora.
El capitalismo esta afianzando sus posiciones contra la clase trabajadora y en plena reorganización del capital, las mujeres estamos sufriendo un ataque brutal a nuestros derechos.
El paro, las reformas de las leyes laborales, los recortes… están asfixiando a la clase trabajadora y sometiéndola al abismo de las condiciones de semi- esclavitud laborales. La mujer, como clase obrera, está siendo atacada desde dos frentes: a través del capital y su criminal alianza con el patriarcado.
Todo este ataque se encuadra en el modelo de familia burgués en donde la mujer cumple el papel de cuidadora y reproductora. Mientras desmantelan las políticas sociales, pretenden que nosotras realicemos ese trabajo al Estado de manera gratuita y silenciosa además de reservarnos los trabajos más precarios, de pocas horas y baja remuneración. Esto se traduce en precariedad, pobreza y largas jornadas en el hogar.
En este encuadre, nos encontramos con la reforma de la ley del aborto, que vuelve a los supuestos de la ley de 1985 y que supone un ataque directo a nuestros cuerpos y nuestra libertad y es un claro ejemplo de cómo el patriarcado y la burguesía trabajan conjuntamente. Además, esta ley niega el supuesto de malformación del feto al mismo tiempo que con las políticas económicas y sociales niegan sus derechos a las personas con discapacidad.
Esta reforma bebe ideológicamente del patriarcado entendiendo que mujer es igual a maternidad y que el papel fundamental de la misma es el cuidado y reproducción. La ley afectará de manera directa y despiadada a las mujeres de la clase trabajadora que sin poder adquisitivo se verán abocadas a los abortos clandestinos. Esto se traducirá en la muerte y daño para las mujeres, obligándonos a una maternidad no deseada y a una restricción absoluta de nuestra libertad encadenándonos a los trabajos precarios y a depender económicamente del sueldo del hombre.
Nos obligan a seguir dentro del modelo familiar burgués por la imposibilidad de emancipación ya que sin trabajo digno no hay libertad posible. Nuestros derechos se derivan de nuestro papel productor y activo en la sociedad.
Las mujeres tenemos que organizarnos por nuestros derechos, contra el patriarcado y contra el capital.
Nuestra libertad pasa por la destrucción del capitalismo y la creación de la sociedad socialista en donde la clase obrera tenga el poder y el pueblo gobierne para si.
No podemos tener libertad real dentro del sistema capitalista. El feminismo burgués realiza concesiones a las mujeres, concesiones parciales que no profundizan en nuestra verdadera explotación como productoras y reproductoras dentro del sistema y que como estamos viendo, pueden ser desmanteladas en cualquier momento.
Nos venden una libertad en las leyes que en la práctica real de nuestras condiciones materiales como trabajadoras no existen porque no se pueden llevar a cabo. Son papel mojado si nuestros derechos como mujeres trabajadoras son pisoteados.
¡¡Contra el patriarcado y el capital feminismo y revolución!!
¡¡Viva la lucha de las mujeres y de la clase trabajadora!!
