La situación es preocupante. Además de la falta de organización y planificación para socorrer y ayudar a los más afectados de la población (el municipio está desbordado), se suman intentos de saqueo, peleas entre organizaciones para ver quien se queda con el "botín" a repartir (escuché, no se si serán rumores que se han incluso parado camiones y obligado a voluntarios a llevar pecheras de organizaciones determinadas -posiblemente con el nombre de un ex presi al que rajaron a patadas-). Además estoy cada vez más convencido de la falacia del dato de víctimas fatales, éstas aparentemente son muchas más (se dice de 200 denunciados como desaparecidos, no 20 como dijo Berni). No son pocos los que dicen haber visto gente muerta flotando (entre ellos chicos), o que las morgues se manejaron de una manera espantosa (esto en realidad escuché un caso). Considero que no se está dando el número real para evitar estallidos.
Viernes 5 de Abril
Solidaridad, la respuesta del pueblo ante la desidia estatal
La iniciativa de los jóvenes guevaristas y de los militantes de la Unión del Pueblo, sigue canalizando un amplio espacio de la masiva y conmovedora solidaridad del pueblo de La Plata.
La tormenta de lluvia que azotó en la tarde noche del martes 2 a La Plata ha sido la catástrofe más tremenda de la historia de la ciudad. Hasta ahora, las tardías informaciones oficiales (en realidad, mediáticas) dan una cifra de 51 muertos, y 3.000 evacuados pero, quienes recorrimos los barrios pensamos que las victimas y los damnificados-desgraciadamente-pueden ser más. La situación en las zonas donde la inundación pegó más fuerte y donde todavía el agua no termina de irse es terrible y difícil de describir con palabras.
No desconocemos el orden extraordinario de las lluvias pero las consecuencias que afronta pueblo platense tiene sus responsables directos: el Estado municipal, el intendente Pablo Bruera, el Estado bonaerense y Daniel Scioli.
La magnitud de la inundación se debió principalmente a la falta de obras de infraestructuras necesarias para drenar el agua, no realizadas durante esta gestión ni las anteriores tanto a nivel municipal como provincial y a la falta de una política para regular el suelo y frenar la especulación inmobiliaria de tierras. Esta falta de planificación tiene una explicación política: estas obras son las más caras y menos visibles, es decir, no tienen réditos electorales, a diferencia de pintar veredas y embellecer plazas. Y al mismo tiempo, la planificación ordenada e integral tampoco se lleva muy bien con el negocio y la especulación inmobiliaria de las grandes torres en el centro de la ciudad y los countries en las afueras.
Pasaron ya tres días en los que el municipio ha estado totalmente ausente, no ha dado respuesta a las necesidades más urgentes, nunca planificó que hacer ante emergencias como las que estamos viviendo y –por lo pronto- tampoco parece tener soluciones. El miércoles 3 de marzo a las 9 de la mañana, entre 10 y 15 dotaciones de bomberos voluntarios del Gran Buenos Aires (alrededor de 150 hombres totalmente equipados para la evacuación), fueron impedidos de actuar en La Plata por orden de autoridades estatales, cuando todavía a esa hora decenas de barrios estaban bajo el agua.
Las explicaciones públicas de los funcionarios fueron tardías e irresponsables, reinando la improvisación y la incertidumbre.
Pero el problema no solo fue informativo, sino de una inoperancia y desidia tal que el pueblo tuvo que hacerse cargo de la situación, marcando el camino a seguir. Las fuerzas policiales y militares, que debieron controlar la situación asistiendo a los barrios afectados desde el primer momento, no cumplieron con esa tarea humanitaria elemental (disponiendo de los recursos necesarios, como botes, helicópteros, y demás elementos de rescate. La única excepción fue el Secretario Verni). De esta forma quedó demostrado que las fuerzas armadas de nuestro país no están preparadas para asistir a nuestro pueblo en momentos tan difíciles como este, mientras que sí lo están para asegurar las puertas de hipermercados y grandes comercios de la ciudad y reprimir las manifestaciones de los vecinos.
La solidaridad en el terreno
La ausencia total del Estado en los barrios es innegable, las necesidades abundan y la asistencia social no llega a las zonas donde no hay guardias televisivas. Los barrios más afectados todavía no cuentan con los servicios públicos. La falta de colchones, frazadas, ropa, comida y agua potable se multiplican hora a hora, y todavía no hay respuesta del gobierno.
Ante esto, la acción del pueblo es inmediata, una vez más da muestra de su inmensa solidaridad y capacidad de organización. Miles y miles de vecinos, tanto los que han sido afectados como los que no, están saliendo a las calles espontáneamente a brindar su ayuda. En masa se organizan en torno a las organizaciones sociales, partidos políticos y ONGs de toda la ciudad, donando ropa, alimento, poniendo su cuerpo para trabajar en los barrios, sus vehículos para transportar las donaciones. En el momento crítico, sin cámaras televisivas que los enfoque, sin fotos, ni mensajes de twitters, miles de anónimos pudieron y ponen su hombro solidario.
La Casa Guevarista, ubicada en la calle 5 entre 61 y 62, es, desde las 9 hs del primer día, uno de los centros con mayor actividad y organización solidaria de la ciudad. Hasta aquí llegan donaciones de los vecinos los que muchas veces son los mismos que distribuyen las donaciones ya clasificadas convirtiéndose en la infraestructura y logística de la organización. Hoy viernes han comenzado a llegar camiones con alimentos y ropa de diferentes puntos del país como Buenos Aires, Olavarría, Magdalena, Punta de Indio, Azul, Moreno, Morón, Zárate, Concepción del Uruguay, Gualeguaychú y La Pampa.
Desde aquí parten permanentemente vehículos transportando las donaciones recibidas y las Brigadas de Solidaridad Guevarista con decenas de vecinos/as a todos los barrios afectados.
Estas Brigadas además de informar que en la Casa Guevarista se reciben donaciones, portan alcancías que son llenadas con el aporte de los vecinos: 3.500 $ el mismo miércoles, 24.000 $ el jueves y a esta ahora del viernes se han recaudado 6.000$. Con ese dinero inmediatamente se han comprado alimentos a precios casi al costo. Daremos un balance minucioso de las entradas, los gastos y los destinos de lo comprado.
También recibimos a representantes de organizaciones profesionales que personalmente se pusieron a disposición para colaborar y sus relaciones para canalizar por la Casa Guevarista las donaciones realizadas en distintas provincias y ciudades. Estudiantes y profesionales están realizando tareas de atención y relevamiento para coordinarlos con el trabajo asistencial. En consecuencia de la incapacidad organizativa del municipio debemos destacar la articulación que se ha logrado entre todas las organizaciones: fuerzas políticas, centros de evacuados, centro culturales y religiosos, comedores, instituciones, etc.
La respuesta del Estado
Luego de la reunión entre la presidenta Cristina Fernández y Daniel Scioli, el gobernador bonaerense anunció un plan para que los damnificados pudieran tomar “créditos blandos” del Banco Provincia, a tasa de interés fijo del 9,9 por ciento anual. Parece una burla. La misma medida tomó Macri en Capital Federal, a partir del Banco Ciudad.
El Estado debería indemnizar a los vecinos, cubriendo todas sus pérdidas, pero sin embargo facilitará créditos para que los que perdieron todo se endeuden.
Bruera y Scioli no hicieron las obras necesarias en una ciudad con la magnitud de La Plata. El gobierno Nacional, irresponsablemente dice que realizó partidas para que las obras se llevaran a cabo, pero recién ahora hará una auditoría para constatar que el municipio haya cumplido con su responsabilidad. Es decir que, como mínimo, el Estado nunca controló las obras presupuestadas y financiadas.
En la provincia de Buenos Aires, hasta septiembre de 2012, el rubro "Agua Potable, Alcantarillado y Desagües Pluviales" del presupuesto contaba con una partida de $ 1053 millones, de los cuales hasta ese momento se habían ejecutado $ 671,9 millones (el 63%). Durante 2011, se ejecutó el 81 por ciento de los fondos presupuestados. Es decir que, como en tantas otras áreas se subejecuta y se destina a vaya a saber qué lugar lo asignado.
Sin dejar de tener en cuenta la magnitud de las precipitaciones, vale recordar que la suerte de las víctimas tiene una relación directa con la avaricia inmobiliaria, que en la ciudad de La Plata tiene su expresión más cabal en las turbias jornadas de abril de 2010, cuando el Municipio y el Concejo Deliberante platense modificaron el Código de Ordenamiento Urbano, basado en la especulación inmobiliaria en detrimento de las necesidades de vivienda del pueblo.
Situaciones como estas demuestran que las diferencias entre los gobiernos de turno, entre oposición y gobierno, no es como nos la quieren mostrar, sino que actúan bajo un mismo criterio político: la falta de voluntad para solucionar los problemas de nuestro pueblo por estar ligados a los negociados con las empresas inmobiliarias.
En cambio el pueblo, desligado de cualquier compromiso económico, dio muestras fehacientes de lo que puede hacerse con organización en base a la solidaridad y el humanismo.
Medidas necesarias para resolver los problemas estructurales:
Construcción de un nuevo Código de Ordenamiento Urbano que beneficie a todos los sectores de la población, discutido en todos los barrios de forma amplia y democrática.
Garantizar el cumplimiento del porcentaje necesario de terreno absorbente en los lotes que se construyen.
Limpieza de los arroyos.
Ampliar y mejorar la estructura hídrica de la ciudad.
Garantizar plan de contingencia.
Garantizar el acceso a la tierra de calidad para la construcción de viviendas dignas y la urbanización de asentamientos y villas.
Lo urgente:
Restablecimiento de todos los servicios públicos
Subsidios para la reposición, a todos los barrios, de los bienes materiales perdidos
Saneamiento inmediato de las zonas afectadas
Ayuda humanitaria inmediata para las familias que aun no han sido asistidas.
De este modo no quedan dudas de la necesidad de fortalecer la organización en nuestros barrios, en los lugares de trabajo y estudio, abrazadas por los lazos de solidaridad entre los hombres y mujeres del pueblo y, de asumir la tarea de construir fuerza política necesaria que nos permita transformar radicalmente la realidad de nuestra ciudad, de la Provincia y del país.
Juventud Guevarista y Unión del Pueblo
Facebook. Juventud Guevarista de La Plata
Facebook: Union del Pueblo LP
Casa Guevarista: calle 5 entre 61 y 62, numero 1409
www.juventudguevarista.com
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