El negocio de comunicación Diario "El Nacional", la organización politica de derecha más recalcitrantemente golpista y pro intereses gringos, proclama en primera plana de este domingo 3 de mayo, el deslinde de "la corriente marxista dentro del PSUV" que se hace llamar Marea Socialista, calificándolo como "la primera división que sufre el PSUV conducido por Maduro".
Marea Socialista es uno de los 3 grupos principales trotskistas que atendieron el llamado de Chávez en 2007 de integrar una sola organización política que uniera a toda la izquierda venezolana.
Habida cuenta que trotskista que no es sectario es "entrista", acataron el llamado los grupos Marea Socialista, El Topo Obrero (estas dos organizaciones de influencia trotskista argentina) y la Corriente Marxista Revolucionaria (notoria pupila de la sección española de la MIT inglesa, cuyo distanciamiento obligaría a la Marxist International Tendency a reagruparse en Venezuela en torno a la pág. web "Lucha de Clases"). El Partido Comunista por su parte, se negó a fundirse con el PSUV y conservó su organización partidista, pues no conciben la "doble militancia".
Lo que ha pasado es que presenciamos un relativamente exitoso ejemplo de táctica entrista de los comunistas en partidos reformistas tradicionales, muy con la línea política que bajó Lenin en su discurso a los comunistas ingleses que entraron al partido laborista en 1920.
Marea Socialista antes de la era de Chávez solo consistía en un grupo sindicalista, producto de la influencia del trotskismo argentino en Venezuela. Con motivo del golpe de Estado contra Chávez del 11 de abril de 2002, momentos en que desaperecieron las comunicaciones oficiales y la izquierda quedó prácticamente aislada de la opinión pública, un grupo de activistas de Marea Socialista celebraron una Asamble Popular Revolucionaria en la parroquia El Valle de Caracas, donde se propusieron romper el silencio mediático al que estaba sometido el gobierno. De esta idea surgió la iniciativa de la página web "Aporrea" (especie de acrónimo de Asamblea Popular Revolucionaria).
Dicha página se convirtió en una referencia nacional al pensamiento de izquierda, chavista y contestatario. Este uso de Internet rememora al periódico Iskra de la revolución rusa.
Pero las posibilidades de crecer dentro del PSUV están limitadas por las características de partido de masas - maquinaria electoral del mismo. El PSUV no es un partido de cuadros y las decisiones están supeditadas a organismos de dirección preeestablecidos por Chávez y seleccionados por cooptación.
Los "críticos" a la dirección nacional son marginados, y han venido nucleando en Marea Socialista (como por ejemplo, Nicmer Evans, Héctor Navarro y Ana Elisa Osorio, antiguos cuadros y ex-ministros del chavismo).
Han venido apareciendo una serie de "Casas de Marea Socialista" a nivel nacional (van unas 20) que no son otra cosa que las residencias personales de chavistas.
Llega el momento del establecimiento de un Partido a nivel Nacional
Desde noviembre de 2014 esa disidencia del PSUV reservó el nombre y las siglas de Marea Socialista en el Consejo Nacional Electoral, y está a la espera de su aprobación. Pero en la Conferencia Nacional de Promotores, efectuada el 26 y el 27 de abril, acordó, por mayoría absoluta, optar por una tarjeta electoral y postular candidatos a la Asamblea Nacional. En esa misión trabajan 150 promotores en 19 estados del país.
Si el CNE no autoriza la denominación, militantes de Marea Socialista, entre ellos el politólogo Nicmer Evans y el fundador de Aporrea, Gonzalo Gómez, indicaron que irán al organismo comicial para que no les conculquen el derecho a la organización y a la participación política.
Marea Socialista se declara “chavista, socialista” y niega que el propósito sea dividir el chavismo, aunque sí erosiona el apoyo a la cúpula del PSUV.
Marea Socialista es uno de los 3 grupos principales trotskistas que atendieron el llamado de Chávez en 2007 de integrar una sola organización política que uniera a toda la izquierda venezolana.
Habida cuenta que trotskista que no es sectario es "entrista", acataron el llamado los grupos Marea Socialista, El Topo Obrero (estas dos organizaciones de influencia trotskista argentina) y la Corriente Marxista Revolucionaria (notoria pupila de la sección española de la MIT inglesa, cuyo distanciamiento obligaría a la Marxist International Tendency a reagruparse en Venezuela en torno a la pág. web "Lucha de Clases"). El Partido Comunista por su parte, se negó a fundirse con el PSUV y conservó su organización partidista, pues no conciben la "doble militancia".
Lo que ha pasado es que presenciamos un relativamente exitoso ejemplo de táctica entrista de los comunistas en partidos reformistas tradicionales, muy con la línea política que bajó Lenin en su discurso a los comunistas ingleses que entraron al partido laborista en 1920.
Marea Socialista antes de la era de Chávez solo consistía en un grupo sindicalista, producto de la influencia del trotskismo argentino en Venezuela. Con motivo del golpe de Estado contra Chávez del 11 de abril de 2002, momentos en que desaperecieron las comunicaciones oficiales y la izquierda quedó prácticamente aislada de la opinión pública, un grupo de activistas de Marea Socialista celebraron una Asamble Popular Revolucionaria en la parroquia El Valle de Caracas, donde se propusieron romper el silencio mediático al que estaba sometido el gobierno. De esta idea surgió la iniciativa de la página web "Aporrea" (especie de acrónimo de Asamblea Popular Revolucionaria).
Dicha página se convirtió en una referencia nacional al pensamiento de izquierda, chavista y contestatario. Este uso de Internet rememora al periódico Iskra de la revolución rusa.
Pero las posibilidades de crecer dentro del PSUV están limitadas por las características de partido de masas - maquinaria electoral del mismo. El PSUV no es un partido de cuadros y las decisiones están supeditadas a organismos de dirección preeestablecidos por Chávez y seleccionados por cooptación.
Los "críticos" a la dirección nacional son marginados, y han venido nucleando en Marea Socialista (como por ejemplo, Nicmer Evans, Héctor Navarro y Ana Elisa Osorio, antiguos cuadros y ex-ministros del chavismo).
Han venido apareciendo una serie de "Casas de Marea Socialista" a nivel nacional (van unas 20) que no son otra cosa que las residencias personales de chavistas.
Llega el momento del establecimiento de un Partido a nivel Nacional
Gonzalo Gómez escribió:“Marea Socialista es una corriente del PSUV, pero al negarnos el derecho a la crítica y a denunciar las desviaciones tuvimos que decidir e irnos ante el sectarismo”.
Desde noviembre de 2014 esa disidencia del PSUV reservó el nombre y las siglas de Marea Socialista en el Consejo Nacional Electoral, y está a la espera de su aprobación. Pero en la Conferencia Nacional de Promotores, efectuada el 26 y el 27 de abril, acordó, por mayoría absoluta, optar por una tarjeta electoral y postular candidatos a la Asamblea Nacional. En esa misión trabajan 150 promotores en 19 estados del país.
Si el CNE no autoriza la denominación, militantes de Marea Socialista, entre ellos el politólogo Nicmer Evans y el fundador de Aporrea, Gonzalo Gómez, indicaron que irán al organismo comicial para que no les conculquen el derecho a la organización y a la participación política.
Marea Socialista se declara “chavista, socialista” y niega que el propósito sea dividir el chavismo, aunque sí erosiona el apoyo a la cúpula del PSUV.
Nicmer Evans escribió:“Si Marea no participa en elecciones se corre el riesgo de que la revolución se pierda desde el punto de vista electoral. En este momento somos el factor que garantiza que los chavistas descontentos no voten por la oposición o que se abstengan porque no tienen una referencia. Marea rescata la revolución desde la raíz, se aparta de la cúpula vinculada con la corrupción. Si no sale al ruedo una verdadera alternativa, se perdería la revolución”