por Jordi de Terrassa Mar Sep 08, 2015 3:30 pm
A veces mira que nos gusta complicarnos la vida, practicar el onanismo mental y debatir nimiedades, en lugar de establecer el programa de transformaciones en cada formación social, por ejemplo cómo se financia el estado si se denuncia la deuda y no se paga por ser un robo.
No obstante no sé qué puede tener de malo jugar unas patidas de parchís, de dominó, de tute subastado, al mus, hacer una porra o cualquier otro juego de azar.
En el socialismo ganes más o ganes menos si no trabajas no comes, es decir, todos los días que te toque a tu hora en tu tajo. Luego con el producto de tu trabajo puedes gastarlo en lo que más te plazca, y si eres hombre en lo que le plazca a tu pareja.
La Bolsa resulta un buen ejemplo práctico para explicar la diferencia entre el precio de mercado y el valor, que en el intercambio no se genera valor sino que en todo caso dicho valor cambia de manos, ya que las ganancias de unos son las pérdidas de otros.
En el socialismo la propiedad de los medios de producción es social, los recursos naturales son propiedad común de todos los trabajadores, por lo que nadie puede ganar ni perder propiedad sobre los recursos naturales. Los medios de trabajo son propiedad común de los trabajadores que los usan, por lo que nadie puede ganar propiedad sobre medios de trabajo a no ser que todos los días que toque a la hora en el tajo, y solo se pierde la propiedad sobre los medios de trabajo si se deja de trabajar, pero si no es por discapacidad declarada pues no comes.
Por otro lado, las minusvalías que puede producir el juego en unos, sin duda son plusvalías en otros, y aunque en principio puede representar un aumento de la desigualdad social, si verdaderamente existe una tributación directa y verdaderamente progresiva, mayor será la recaudación para hacer una redistribución más igualitaria.
Saludos.