"Asaltar un furgon blindado y robarlo y matar a 2 de sus guardas no me parece muy revolucionario". Pues es lo que hacían los bolcheviques: ¿tampoco te parece muy revolucionario? El mayor atraco a un furgón blindado en la Rusia zarista lo hizo el famoso "Kamo" Petrosian, un especialista en las acciones de comando de los bolcheviques, que está considerado como un héroe en el movimiento comunista internacional, hasta el punto de que Gorki escribió sobre él un perfil literario. Había perdido una de sus orejas en una acción armada y fue cuatro veces condenado a muerte, que le fueron conmutadas por una pena de 20 años de reclusión.
En abril de 1907 se celebró el V Congreso de Londres del POSDR donde se discutió un punto clave: las expropiaciones y asaltos a mano armada que practicaban los destacamentos armados bolcheviques, una cuestión era muy importante, como expuso Lenin que lo analizó en su obra "La guerra de guerrillas".
Es una de las cuestiones más desconocidas del trabajo revolucionario de los bolcheviques y en la que Stalin tuvo una destacada intervención. En plena Revolución de 1905 y cumpliendo los acuerdos del III Congreso, Stalin había creado un destacamento de combate y un laboratorio clandestino para la fabricación de explosivos.
En la noche del 12 al 13 de abril de 1906, cerca de Tiflis, seis militantes bolcheviques armados vestidos con uniforme de soldados de un regiminto de infantería, haciéndose pasar por guardias, penetraron en la oficina local del tesoro público y recuperaron 315.000 rublos, una cifra astronómica para aquella época.
Otra de las acciones más espectaculares de estos destacamentos armados fue ejecutada el 13 de junio de 1907 cuando asaltaron en Tiflis un furgón blindado del Banco del Estado. El jefe del destacamento que operaba en el Cáucaso, formado por 20 militantes y 5 adjuntos, entre ellos dos mujeres, era Kamo.
El dinero llegaba desde Moscú escoltado por un vehículo con cuatro soldados y un escuadrón de 50 cosacos a caballo. En Solalaskaia, una calle en pleno centro de Tiflis, no lejos del Palacio del Virrey Vorontzov-Dashkov, los bolcheviques se apostaron y, a la llegada del convoy, lanzaron una granada en medio del escuadrón cosaco. La explosión fue tan violenta que destrozó todos los cristales en dos kilómetros a la redonda. Después lanzaron otras dos bombas contra el furgón y abrieron fuego contra los cosacos desde los dos extremos de la calle. Con la primera explosión salió despedido el conductor del furgón, que perdió también sus cuatro ruedas. Pero los caballos se espantaron arrastrando el furgón y Petrosian tuvo que arrojar otra bomba para detener su marcha, tras lo cual entró en los restos calcinados del mismo y se llevó la caja fuerte en un caballo.
El 26 de abril de 1906 se había producido otra expropiación en Dusheté, cerca de Tiflis cuando seis combatientes bolcheviques vestidos de oficiales penetraron en una delegación de Hacienda y se apoderaron de 315.000 rublos.
Hubo otras muchas acciones armadas de los destacamentos militares del Partido bolchevique, especialmente durante aquella etapa de reflujo de la Revolución. A Stalin la Ojrana le atribuyó siempre el lanzamiento de una bomba desde el tejado del Palacio del Príncipe Sumbatov.
La trampa de los oportunistas que critican la lucha armada es siempre la misma: ellos pueden decir mentiras como que "el Grapo se estaba dedicando unicamente a tráfico de drogas y a extorsión a empresarios". Saben que nadie les va a poder replicar como se merecen. Hay que tener la cara muy dura. Está prohibido hacer apología de la lucha armada porque te juegas 10 años de cárcel, pero sin embargo se pueden lanzar toda clase de mentiras impunemente. Eso no está castigado con la cárcel. Y hay que ver cómo los oportunistas aprovechan las situaciones que les brinda el fascismo para largar lo que les da la gana...