¿Afecta la luna a nuestra vida?

Hoy de madrugada a las 3 de la mañana aprox, me desperte de repente la habitacion se encontraba en completa oscuridad, tan solo un haz de luz que entraba por la ventana, iluminaba parte de la misma, mire para fuera y vi que era el reflejo de la Luna llena, por un instante se me hizo dificil recuperar el sueño, no fue hasta que trancurrieron unos minutos que pude volver a dormir de nuevo, luego cuando me desperte (05:00am) para ir a trabajar, durante mi caminata diaria hasta la parada del omnibus, iba pensando al respecto de lo sucedido, reflecionaba y pensaba: "si la Luna es la que genera las mareas en los oceanos del planeta Tierra, Al estar compuesto el ser humano por un 70% de agua, ¿No generara algun tipo de efecto en nuestro otganismo? Y di con los siguientes datos al respecto...


¿Sabías que en los días próximos a la luna llena tardamos más en dormirnos y dormimos menos? En esos días la actividad cerebral relacionada con el sueño profundo disminuye un 30%. Un equipo internacional de investigadores estudia los patrones de sueño de miles de niños de todo el mundo para comprobar si se alteran a causa del satélite, aunque todo el mundo está de acuerdo en que la Luna llena no puede transformar a las personas en hombres lobo, no son pocos los que acusan a nuestro satélite de provocar alteraciones en el sueño o, incluso, en nuestro organismo y nuestra mente. ¿Pero qué base científica hay detrás de todas estas creencias?

Para establecer si las fases lunares pueden afectar de alguna manera a las personas, un equipo internacional de investigadores ha estudiado los patrones de sueño de miles de niños de todo el mundo, para comprobar si éstos se alteraban por culpa de la Luna y cómo estas alteraciones, de haberlas, modificaban sus vidas diarias. Los resultados de la investigación se acaban de publicar en la revista "Frontiers in Pediatrics".

"Consideramos que llevar a cabo este estudio con niños podía ser particularmente relevante -afirma Jean-Philippe Chaput, del Instituto de Investigación del Este de Ontario-, porque los niños son más susceptibles a los cambios de comportamiento que los adultos y sus necesidades de sueño son mayores".

El estudio se llevó a cabo sobre un total de 5.812 niños de los cinco continentes. Los pequeños procedían de un amplio rango de niveles económicos y socioculturales y se consideraron también variables como la edad, el sexo, la educación de sus padres, el día en que se efectuaba la medida, el índice de masa corporal, la duración del sueño nocturno, el nivel de actividad física y el tiempo diario de sedentarismo.

Los datos se fueron recogiendo a lo largo de 28 meses, lo que equivale al mismo número de ciclos lunares, que fueron a su vez divididos en tres fases: Luna llena, media Luna y Luna nueva. Las conclusiones del estudio revelaron que en general, la duración del sueño nocturno durante la Luna llena en comparación con la Luna nueva se reducía de media en 5 minutos (un 1% de variación). Ninguna otra actividad o comportamiento de lo pequeños sufrió modificaciones.

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"Nuestro estudio proporciona evidencias convincentes de que la Luna no parece influir en el comportamiento de las personas - asegura Chaput-. El único hallazgo significativo fue una alteración del 1% en el sueño nocturno durante la Luna llena, pero esta variación se explica en gran parte por el amplio tamaño de la muestra estadística".

A pesar de que los resultados de este estudio son concluyentes, la controversia sobre los efectos de la Luna podría desembocar en nuevas investigaciones que determinen si nuestra biología está sincronizada de algún modo con los ciclos lunares, o si la Luna llena tiene una mayor influencia entre personas que sufren trastornos mentales o enfermedades físicas.

Mmm, no sé, che. Puede que sólo tenga algún efecto el hecho de que las noches son más iluminadas cuando es una llena. Lo de las mareas no tiene mucho que ver con el hecho de que el cuerpo humano esté formado mayormente por agua porque es un efecto producido por la atracción gravitatoria de la luna y ésta actúa sobre todas las masas igual, independientemente de su composición. Si eso pudiera afectar a nuestro comportamiento debería poder hallarse, creo yo, alguna especie de órgano o parte de él capaz de responder a esos cambios en el campo gravitatorio. Me recuerda esto a la teoría de la orientación de los pájaros (algo que creo que si no me equivoco no está aun del todo claro) según la cuál podrían disponer de algún pequeño organo en el cerebro el cual sea sensible a los campos magnéticos estáticos, lo que les serviría para orientarse según el campo de la tierra. No es disparatado, ya que nuestros ojos, por ejemplo, son órganos sensibles a las ondas electromagnéticas. A esto último lo leí en un libro llamado "La naturaleza del magnetismo", del autor Kaganov.
Respecto a la luna y sus efectos hay una teoría (no se si cabe ese nombre) popular entre los pescadores y es la teoría solunar. Se publican tablas según eso para tratar de predecir los momentos de mayor actividad de los animales. No está comprobado completamente.