Dos novelas de ciencia-ficción en las que autores no marxistas escriben sobre sociedades igualitarias: Úrsula K. Leguin y James P. Hogans

En la novela se produce el encuentro entre unos militares que vienen de nuestro planeta de sistema capitalista y unos colonos humanos que han nacido en el planeta Quirón en una sociedad comunista. Lo primero que les resulta chocante a los terrícolas es que la gente va a los supermercados y toma lo que necesita sin pagar y sin otra restricción que su propio sentido común social. ¿Para qué querría nadie llevarse lo que no necesita? Es un relato de ciencia ficción que aborda el cambio social, no de manera científica, pero tiene elementos coherentes con el análisis marxista. Por ello se puede considerar algo más que un simple relato de entretenimiento, en donde aventura, tecnología y reflexión social se entremezclan en un ejemplo claro del significado socio-político de la novela.

Shevek, un físico brillante, originario de Antares, un planeta aislado y "anarquista", decide emprender un insólito viaje al planeta madre Urras, en el que impera un extraño sistema llamado el "propietariado". Shevek cree por encima de todo que los muros del odio, la desconfianza y las ideologías, que separan su planeta del resto del universo civilizado, deben ser derribados. En este contexto la autora explora algunos de los problemas de nuestro tiempo: la posición de la mujer en la estructura social, la complejidad de las relaciones humanas, los méritos y las promesas de las ideologías igualitarias, las perspectivas del idealismo político en el mundo actual.