Una nueva Constitución
En Diciembre de 1936 el 8º Congreso Extraordinario de los Soviets aprobó el borrador de la nueva constitución soviética. Convocó una votación secreta y unas elecciones abiertas. (Zhukov, Inoy 307-9)
Se admitieron candidatos no solo del Partido Bolchevique -denominado entonces Partido Comunista de la Unión (bolchevique)- sino también de otros grupos de ciudadanos, basados en la residencia, afiliación (tales como grupos religiosos), u organizaciones de empresa. Esto nunca se llevó a cabo. Nunca hubo elecciones abiertas.
Los aspectos democráticos de la Constitución se incluyeron ante la expresa insistencia de Joseph Stalin. Junto a sus más cercanos colaboradores en el Politburó del Partido Bolchevique, Stalin luchó tenazmente para mantener este proyecto (Getty, "State"). El, y ellos, cedieron sólo cuando se enfrentaron al rechazo total por parte del Comité Central del Partido, y ante el pánico que rodeó el descubrimiento de serias conspiraciones, en colaboración con el fascismo alemán y japonés para derrocar el gobierno soviético.
En Enero de 1935 el Politburó asignó el trabajo de delinear los contenidos de una nueva constitución a Avel Ynukidze (6) quien, algunos meses mas tarde, volvió con una sugerencia de elecciones abiertas. Casi inmediatamente, el 25 de Enero de 1935, Stalin expresó su desacuerdo con la propuesta de Yenukidze, insistiendo en elecciones secretas (Zhukov, Inoy 116-21).
Stalin hizo público este desacuerdo de una manera muy notoria en Marzo de 1936, durante una entrevista con el magnate de la prensa americana Roy Howard. Stalin declaró que la Constitución soviética que todas las votaciones serian secretas. El voto tendría una base de igualdad, teniendo el mismo valor el voto de un campesino que el de un obrero (7); una base territorial, como en Occidente, en vez de acuerdo con el status, como en la época zarista, o lugar de empleo.; y directo: todos los Soviets se elegirian por los ciudadanos, no por representantes indirectos. (Entrevista Stalin-Howard, Zhukov, Repressii" 5-6).
Stalin: "Adoptaremos probablemente nuestra nueva constitución a finales de este año. La comisión encargada de redactarla esta trabajando y terminará pronto su trabajo. Como ya se ha anunciado, de acuerdo con la nueva constitución, el sufragio será universal, igual, directo y secreto". (Entrevista Stalin-Howard 13).
Y lo más importante es que Stalin declaró que en todas las elecciones participarían diferentes fuerzas políticas:
“Usted ahora está confundido por el hecho de que solo un partido se presentará a las elecciones. Y no puede ver como una contienda electoral puede tener lugar en estas condiciones. Evidentemente, los candidatos serán presentados no solo por el Partido Comunista, sino por toda clase de organizaciones públicas, ajenas al Partido. Y tenemos centenares de ellas. No tenemos partidos en liza más que en la medida en que tenemos una clase capitalista en lucha con una clase trabajadora que es explotada por los capitalistas. Nuestra sociedad consiste exclusivamente de trabajadores libres del campo y de la ciudad; trabajadores, campesinos e intelectuales. Cada una de estas capas tienen sus especiales intereses y los expresan a través de las numerosas organizaciones que existen.” (13-14)
Diferentes organizaciones ciudadanas presentarían candidatos que competirían con los candidatos del Partido Comunista. Stalin declaró a Howard que los ciudadanos tacharían los nombres de todos los candidatos excepto de aquellos a quienes votaran.
También apoyó la importancia de unas elecciones en competencia para luchar contra la burocracia:
“Usted podría pensar que no se darán elecciones. Pero las habrá, y preveo campañas muy movidas. No son pocas las instituciones en nuestro país que funcionan mal. Se dan casos en que este o aquel gobierno local no son capaces de satisfacer esta o aquella de las variadas y crecientes necesidades de los trabajadores de la ciudad y del campo. ¿Ha construido una buena escuela o no? ¿Ha mejorado las condiciones de vivienda? ¿Es usted un burócrata? ¿Ha contribuido usted a hacer más eficaz nuestro trabajo y nuestras vidas mas cultivadas? Así serán los criterios con los que millones de electores medirán lo adecuado de los candidatos, rechazarán los no aptos, suprimirán sus nombres de las listas de candidatos y favorecerán y elegirán a los mejores. Si, las campañas electorales serán reñidas, y girarán en torno a numerosos y agudos problemas, sobre todo de naturaleza práctica, de primera importancia para el pueblo. Nuestro nuevo sistema electoral reforzará todas las instituciones y organizaciones y las obligará a mejorar su trabajo. El sufragio universal, igualitario, directo y secreto será un látigo en manos del pueblo contra los órganos gubernamentales que funcionen mal. En mi opinión, la nueva constitución soviética será la constitución más democrática del mundo” (15).
A partir de este punto, Stalin y los miembros del Politburó más cercanos a él, Vyacheslav Molotov y Andrei Zhadanov se declararon a favor de elecciones abiertas y secretas en todas las discusiones dentro del liderazgo del Partido. (Zhukov, Inoy, 207-10; Entrevista Stalin-Howard).
Stalin también insistió en el hecho de que muchos ciudadanos soviéticos, que habían sido privados de sus derechos, los recuperarían. Esto incluía miembros de las clases explotadoras tales como terratenientes, y aquellos que habían luchado contra los bolcheviques durante la Guerra Civil de 1918-1921, los conocidos como "guardias blancos", así como aquellos condenados por algunos crímenes (como hoy en día en los EEUU). Los grupos mas importantes y probablemente mas numerosos entre los lishentsy ("despojados") fueron dos: los "kulaks", los principales objetivos durante los movimientos por la colectivización, unos años antes, y los que habían violado la "ley de los tres oídos" (
que habían robado propiedades estatales, a menudo cereal, a veces simplemente para evitar el hambre. (Zhukov, Inoy 187)
Estas reformas electorales hubieran sido innecesarias, excepto si la dirección estalinista quería cambiar los modos en que era gobernada la Unión Soviética. Lo que perseguían era sacar al Partido Comunista de la dirección directa de la Unión Soviética.
Durante la Revolución Rusa y los críticos años que siguieron, la URSS había sido gobernada por una jerarquía electa de "soviets" ("consejos"), del nivel local hasta el nacional, con el Soviet Supremo como la sección legislativa, el Consejo de Comisarios del Pueblo como el ejecutivo, y el Secretario de este Consejo como cabeza del Estado. Pero en realidad, a todos los niveles, la elección de estos había estado en manos del Partido bolchevique. Hubo elecciones, pero el nombramiento directo por parte de los líderes del Partido, denominada "cooptación" era también habitual. Incluso las elecciones fueron controladas por el Partido, ya que nadie podía optar a presentarse a menos que contara con la aprobación de los dirigentes del Partido.
Esto para los bolcheviques era lógico. Era la forma que la dictadura del proletariado tomaba en las condiciones históricas específicas en la Unión Soviética revolucionaria y post-revolucionaria. Bajo la Nueva Política Económica, o NEP, (9), el trabajo y las capacidades de los explotadores se necesitaron. Pero solamente en orden a ponerse al servicio de la dictadura del proletariado, del socialismo. No se permitió reconstruir las relaciones capitalistas mas allá de ciertos límites, ni recuperar poder político.
Durante los años 20 y principios de los 30 el Partido bolchevique reclutó miembros entre la clase trabajadora de forma intensa. Hacia el fin de los años 20 la mayoría de los miembros del Partido eran trabajadores y un alto porcentaje de los trabajadores estaban en el Partido. Este reclutamiento masivo y los grandes proyectos de educación política tuvieron lugar simultáneamente a las tremendas tensiones del primer Plan quinquenal, la industrialización a marchas forzadas, y la colectivización en gran medida forzada de granjas individuales, a colectivas (kolkhoz) o soviéticas (sovkhoz). La dirección bolchevique fue tan sincera en su intento de proletarizar el Partido como exitosa en los resultados (Rigby, 167-8; 184; 199).
Stalin y sus seguidores dentro del Politburó dieron determinados motivos para respaldar su voluntad de democratizar la Unión Soviética. Esas razones refuerzan la creencia de esa dirección de que un nuevo estado de socialismo se había alcanzado.
La mayor parte de los campesinos estaban en granjas colectivas. Con un descenso mensual de granjas individuales, la dirección estalinista pensó que, objetivamente, los campesinos ya no constituían una clase socio-económica independiente. Los campesinos eran más parecidos que diferentes a los trabajadores.
Stalin argumentaba que, con el rápido crecimiento de la industria soviética, y sobre todo con la clase obrera controlando el poder político a través del Partido bolchevique, la palabra "proletariado" ya no era adecuada. "Proletariado", declaró Stalin, define la clase trabajadora bajo una explotación capitalista, o trabajando bajo relaciones capitalistas de producción, tales como las existentes durante los primeros doce años de la Unión Soviética, especialmente durante la NEP. Pero una vez abolida la explotación directa de los trabajadores por los capitalistas para beneficio, la clase trabajadora no debiera de ser llamada "proletariado".
Según este punto de vista, los explotadores de trabajo ajeno ya no existían. Los trabajadores, que ahora dirigían el país en su propio interés a través del Partido Bolchevique, no eran ya el clásico proletariado. Por tanto, la "dictadura del proletariado" ya no era un concepto pertinente. Esas condiciones nuevas suponían un nuevo tipo de estado. (Zhukov, Inoy, 231; 292; Stalin, "Borrador" 800-1).