La Brujula escribió:Supongo que lo dice porque no considera el tema económico.Razion escribió:Pero eso considero que es una buena política.
Por un lado gastos enormes. Era necesario mantener un flota inmensa de autobuses para trasladar a los estudiantes, con un enorme consumo de combustible y piezas de repuesto. Además estaba la alimentación para todos esos estudiantes y profesores. Esto sólo era sostenible con la ayuda "fraternal, solidaria y desinteresada" de Tío Ruso.
Por otro lado los rendimientos agrícolas serían muy bajos con manos inexpertas atendiendo los plantíos. Me comentan algunos cubanos que hoy tienen mi edad, que en esa época ellos dañaban los cultivos como una forma de protestar a la obligación de trabajar en el campo para poder estudiar.
¿Tantos gastos? En teoría se tiene que aplicar con cultivos locales para evitar grandes traslados. En la provincia de donde provengo es una herramienta para aumentar la productividad agraria ya que los chicos que se forman en esas escuelas técnicas (que muchas veces tienen sus propias chacras), luego se vuelcan "al mercado local" si es que no siguen otra formación. Termina sirviendo para dar capacitación técnica en lugares donde de otra manera se produciría empíricamente lo que lleva muchas veces a manejos que atentan con el desarrollo productivo. No se trata de inundar y entorpecer el desarrollo de aquellas plantaciones, o explotaciones donde ya se trabaja con una técnica avanzada y sino formar futuro personal capacitado para desarrollar esas tareas, o mejorar aquellas producciones donde la técnica todavía sea anticuada. Lo mismo se puede aplicar para el caso industrial.
Volviendo al tema de mi ejemplo, también había muchos estudiantes que se quejaban y no aprovechaban esta formación, lamentablemente terminan haciendo labores fútiles después -muchas veces boyando- y sin un título técnico pierden competitividad en el mercado laboral, accediendo a trabajos peores pagos y que no están muchas veces relacionados con la cadena productiva. A veces lo que se nos impone no es lo que más nos gusta -más en nuestra educación secundaria o primaria-, pero nos sirve mucho más que no hacer nada.