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Cuba sigue apostando por la telefonía móvil
El número de teléfonos móviles activos en Cuba aumentó un 61 por ciento al cierre del pasado año pasado y ya supera a los fijos existentes en la isla, aunque para funcionarios estatales del sector esas cifras aún "son muy bajas".
Al finalizar el 2010 había en la isla poco más de un millón de teléfonos móviles, frente a los 621.000 registrados en el 2009 y los 330.000 del 2008, año en el que a todos los cubanos residentes en el país se les permitió comprarlos por primera vez, indicaron esta semana datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
La gestión de esas líneas es monopolio de la estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), una compañía que, en un inicio con capital mixto italiano y cubano, comenzó a operar en 2003 cuando en Cuba apenas había 43.000 teléfonos móviles, por lo general en poder de diplomáticos y empresarios extranjeros o ciudadanos isleños ligados a empresas foráneas.
El uso de esa tecnología se disparó en 2008, cuando el gobierno permitió la contratación del servicio para todos los ciudadanos, con lo que la cifra de 330.000 de líneas que había en el país creció al año siguiente a 621.000, con cobertura en el 70 por ciento de la isla.
Los servicios móviles han tenido una notable reducción de los costos en la activación desde 111 pesos convertibles cubanos (equivalentes a unos 119,88 dólares) en 2008, a los actuales 40 (43,20).
A mediados del pasado año, el vicepresidente de ETECSA, Máximo La Fuente, dijo que la empresa aspira a que ese tipo de telefonía siga creciendo en la isla, tras considerar que "es muy bajo" tener un millón de líneas móviles en Cuba, en una población que sobrepasa los 11,2 millones de habitantes.
"Hay que seguir creciendo", dijo La Fuente, quien insistió en la inconformidad de la empresa y subrayó la necesidad de ingresar tecnologías cuyos costos permitan mayores inversiones en esa rama.
Según las cifras proporcionadas por La Fuente, el 96 por ciento de los usuarios son "prepagos" por el sistema de tarjetas, mientras que sólo el cuatro por ciento corresponde a "postpagos", por lo general las empresas u hombres de negocios asentados en el país.
La Fuente indicó que Cuba ha invertido más de 1.000 millones de dólares en su telefonía en estos 10 años, 200 de los cuales se han canalizado al sistema móvil.
Las perspectivas de ETECSA son alcanzar unos 2,4 millones de usuarios en 2015, mientras planea finalizar este año con cobertura celular total en el territorio cubano, donde unos 20 municipios aún carecen de esa facilidad.
La isla tiene acuerdos de servicios de roaming con operadoras de 128 países, aunque la próxima entrada en operaciones de un cable submarino de fibra óptica, que enlazara a Cuba y Venezuela, beneficiará la red nacional de telefonía móvil, en especial los servicios de roaming.
"Por supuesto que el cable aumentará la posibilidad de salida internacional de Cuba y mejorará su tráfico", expresó La Fuente al referirse al proyecto que está en fase de pruebas y cubre los 1.500 kilómetros entre La Guaira, en Venezuela, y la oriental ciudad de Santiago de Cuba, a más de 860 kilómetros al sureste de La Habana.
La existencia del cable permitirá a Cuba multiplicar por 3.000 veces las velocidades actuales de transmisión de datos, imágenes y voz, con un ancho de banda de 640 gigabytes y capacidad para 10 millones de transmisiones telefónicas simultáneas.
Esa es la primera conexión de fibra óptica de Cuba, que debido al bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos no tiene permitido conectarse a los cables submarinos que pasan a pocas millas de sus costas.
Uno de esos cables de fibra óptica enlaza el balneario mexicano de Cancún con la sureña ciudad estadounidense de Miami y pasa a sólo 32 kilómetros de La Habana.
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El número de teléfonos móviles activos en Cuba aumentó un 61 por ciento al cierre del pasado año pasado y ya supera a los fijos existentes en la isla, aunque para funcionarios estatales del sector esas cifras aún "son muy bajas".
Al finalizar el 2010 había en la isla poco más de un millón de teléfonos móviles, frente a los 621.000 registrados en el 2009 y los 330.000 del 2008, año en el que a todos los cubanos residentes en el país se les permitió comprarlos por primera vez, indicaron esta semana datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
La gestión de esas líneas es monopolio de la estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), una compañía que, en un inicio con capital mixto italiano y cubano, comenzó a operar en 2003 cuando en Cuba apenas había 43.000 teléfonos móviles, por lo general en poder de diplomáticos y empresarios extranjeros o ciudadanos isleños ligados a empresas foráneas.
El uso de esa tecnología se disparó en 2008, cuando el gobierno permitió la contratación del servicio para todos los ciudadanos, con lo que la cifra de 330.000 de líneas que había en el país creció al año siguiente a 621.000, con cobertura en el 70 por ciento de la isla.
Los servicios móviles han tenido una notable reducción de los costos en la activación desde 111 pesos convertibles cubanos (equivalentes a unos 119,88 dólares) en 2008, a los actuales 40 (43,20).
A mediados del pasado año, el vicepresidente de ETECSA, Máximo La Fuente, dijo que la empresa aspira a que ese tipo de telefonía siga creciendo en la isla, tras considerar que "es muy bajo" tener un millón de líneas móviles en Cuba, en una población que sobrepasa los 11,2 millones de habitantes.
"Hay que seguir creciendo", dijo La Fuente, quien insistió en la inconformidad de la empresa y subrayó la necesidad de ingresar tecnologías cuyos costos permitan mayores inversiones en esa rama.
Según las cifras proporcionadas por La Fuente, el 96 por ciento de los usuarios son "prepagos" por el sistema de tarjetas, mientras que sólo el cuatro por ciento corresponde a "postpagos", por lo general las empresas u hombres de negocios asentados en el país.
La Fuente indicó que Cuba ha invertido más de 1.000 millones de dólares en su telefonía en estos 10 años, 200 de los cuales se han canalizado al sistema móvil.
Las perspectivas de ETECSA son alcanzar unos 2,4 millones de usuarios en 2015, mientras planea finalizar este año con cobertura celular total en el territorio cubano, donde unos 20 municipios aún carecen de esa facilidad.
La isla tiene acuerdos de servicios de roaming con operadoras de 128 países, aunque la próxima entrada en operaciones de un cable submarino de fibra óptica, que enlazara a Cuba y Venezuela, beneficiará la red nacional de telefonía móvil, en especial los servicios de roaming.
"Por supuesto que el cable aumentará la posibilidad de salida internacional de Cuba y mejorará su tráfico", expresó La Fuente al referirse al proyecto que está en fase de pruebas y cubre los 1.500 kilómetros entre La Guaira, en Venezuela, y la oriental ciudad de Santiago de Cuba, a más de 860 kilómetros al sureste de La Habana.
La existencia del cable permitirá a Cuba multiplicar por 3.000 veces las velocidades actuales de transmisión de datos, imágenes y voz, con un ancho de banda de 640 gigabytes y capacidad para 10 millones de transmisiones telefónicas simultáneas.
Esa es la primera conexión de fibra óptica de Cuba, que debido al bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos no tiene permitido conectarse a los cables submarinos que pasan a pocas millas de sus costas.
Uno de esos cables de fibra óptica enlaza el balneario mexicano de Cancún con la sureña ciudad estadounidense de Miami y pasa a sólo 32 kilómetros de La Habana.
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