Veteranas de guerra en EE.UU. sufren traumas nerviosos
Washington, 8 feb (PL) Las mujeres estadounidenses, veteranas de las guerras de Iraq o Afganistán, sufren cada vez mayores trastornos nerviosos al reintegrarse a la vida familiar, destaca hoy un dossier del diario The New York Time.
Numerosos testimonios avalan las consecuencias de los conflictos bélicos para las féminas, quienes sufren desórdenes y estres post traumático evidenciado en distorsiones de la personalidad, problemas con el sueño o paranoia alrededor de sus hijos.
Muchas, evidencian las investigaciones, han perdido su rol en la vida doméstica y se siguen sintiendo soldados, tardando meses en recuperar sus vidas, aún influenciadas por las situaciones de la guerra, por lo que se aíslan y siente culpables ante la familia y la sociedad.
Según el Departamento de los asuntos de Veteranos, en junio de 2008, 19 mil 84 mujeres que estuvieron en Iraq o Afganistán habían recibido diagnósticos de desórdenes mentales, incluyendo ocho mil 454 con estres postraumático.
En este número, advirtieron, no están incluidas las damas aún enlistadas en la guerra, o las que nunca utilizaron el servicio de Veteranos.
Muchas mujeres dejan a sus pequeños para irse a la contienda y al regresar ya no logran retomar la rutina, afectando también a los menores.
Antes de 2001 eran poco usuales las féminas soldados que participaban en los conflictos armados, pero las guerras promovidas por el exmandatario norteamericano, George W. Bus, a raíz de los atentados del 11 de septiembre, cambiaron eso, apunta el estudio.
The New York Times dedica un espacio para explorar cómo las contiendas que duran hasta el presente, han redefinido profundamente el papel de las mujeres en la sociedad estadounidense, y todos los trastornos que dejan.
http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=160921&Itemid=1
Washington, 8 feb (PL) Las mujeres estadounidenses, veteranas de las guerras de Iraq o Afganistán, sufren cada vez mayores trastornos nerviosos al reintegrarse a la vida familiar, destaca hoy un dossier del diario The New York Time.
Numerosos testimonios avalan las consecuencias de los conflictos bélicos para las féminas, quienes sufren desórdenes y estres post traumático evidenciado en distorsiones de la personalidad, problemas con el sueño o paranoia alrededor de sus hijos.
Muchas, evidencian las investigaciones, han perdido su rol en la vida doméstica y se siguen sintiendo soldados, tardando meses en recuperar sus vidas, aún influenciadas por las situaciones de la guerra, por lo que se aíslan y siente culpables ante la familia y la sociedad.
Según el Departamento de los asuntos de Veteranos, en junio de 2008, 19 mil 84 mujeres que estuvieron en Iraq o Afganistán habían recibido diagnósticos de desórdenes mentales, incluyendo ocho mil 454 con estres postraumático.
En este número, advirtieron, no están incluidas las damas aún enlistadas en la guerra, o las que nunca utilizaron el servicio de Veteranos.
Muchas mujeres dejan a sus pequeños para irse a la contienda y al regresar ya no logran retomar la rutina, afectando también a los menores.
Antes de 2001 eran poco usuales las féminas soldados que participaban en los conflictos armados, pero las guerras promovidas por el exmandatario norteamericano, George W. Bus, a raíz de los atentados del 11 de septiembre, cambiaron eso, apunta el estudio.
The New York Times dedica un espacio para explorar cómo las contiendas que duran hasta el presente, han redefinido profundamente el papel de las mujeres en la sociedad estadounidense, y todos los trastornos que dejan.
http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=160921&Itemid=1