La Guerra en Mali y la Agenda del AFRICOM.
Objetivo: China
por F. William Engdahl
10 de Febrero de 2013
Parte I: ¿La Nueva Guerra de los Treinta Años de África?
Mali a primera vista parece el lugar más improbable para que las potencias de la OTAN, conducidas por un gobierno francés neo-colonialista del presidente socialista François Hollande (y silenciosamente respaldadas absolutamente por la administración de Obama), lancen la que está siendo llamada por algunos una nueva Guerra de los Treinta Años contra el terrorismo.
Mali, con una población de aproximadamente 12 millones, y un territorio tres veces y medio el tamaño de Alemania, es un país en gran parte del desierto del Sahara, sin salida al mar, en el centro de África Occidental, que limita con Argelia al Norte, Mauritania al Oeste, y Senegal, Guinea, Costa de Marfil, Burkina Faso y Níger por el Sur. La gente que conozco que ha pasado el tiempo allí antes de los esfuerzos recientes conducidos por EE.UU. para la desestabilización, lo ha calificado como uno de los sitios más pacíficos y hermosos en la Tierra, el hogar de Timbuktú. Su gente es musulmana, de diversas parcialidades, en aproximadamente un noventa por ciento. Tiene una agricultura de subsistencia rural y un analfabetismo adulto de casi un 50%. Pero este país es de repente el centro de una nueva "guerra global contra el terrorismo".
El 20 de Enero el Primer Ministro británico David Cameron anunció la curiosa resolución de su país de dedicarse a tratar con "la amenaza del terrorismo" en Mali y África del Norte. Cameron declaró: "Esto requerirá una respuesta que puede durar años, incluso décadas, más bien que meses, y requiere una respuesta que... tiene una resolución absolutamente mediante el hierro..." [1]. Gran Bretaña en su apogeo colonial nunca tuvo una participación en Mali. Hasta que obtuvo su independencia en 1960, Mali era una colonia francesa.
El 11 de Enero, después de más de un año de presión entre bastidores ejercida sobre la vecina Argelia para involucrarla en una invasión de su vecino Mali, Hollande decidió hacer una intervención militar francesa directa con apoyo estadounidense. Su gobierno lanzó ataques aéreos en el Norte de Mali, controlado por rebeldes, contra una banda salafista fanática de matarifes yihadistas que se llaman a sí mismos Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQIM). El pretexto para la aparentemente rápida acción francesa fue un movimiento militar realizado por un grupo diminuto de yihadistas islámicos del pueblo tuareg, Asnar Dine, afiliado al más grande AQIM. El 10 de Enero Asnar Dine —apoyado por otros grupos islamistas— atacó la sureña ciudad de Konna. Esto marcó la primera vez desde la rebelión tuareg a principios de 2012 que los rebeldes yihadistas salieron del territorio tuareg tradicional en el desierto del Norte para extender la ley islámica al Sur de Mali.
Como el periodista francés Thierry Meyssan notó, las fuerzas francesas estaban notablemente bien preparadas: "El presidente de transición, Dioncounda Traoré, declaró un estado de emergencia y pidió ayuda a Francia. París intervino dentro de unas horas para impedir la caída de la capital, Bamako. Clarividentemente, el Elíseo había colocado de antemano en Mali tropas del 1er Regimiento de Paracaidistas de Infantería de Marina ("los Coloniales") y del 13er Regimiento de Dragones Paracaidistas, helicópteros del COS (Comando de Operaciones Especiales), tres aviones Mirage 2000D, dos Mirage F-1, tres C135, un Hércules C130 y un Transall C160" [2]. Qué conveniente coincidencia.
Hacia el 21 de Enero aviones de transporte de la Fuerza Aérea de Estados Unidos comenzaron a transportar a cientos de soldados franceses de élite y equipo militar a Mali, aparentemente para revertir lo que se nos dijo que era un avance terrorista fuera de control hacia el Sur, hacia la capital de Mali [3]. El Ministro de Defensa francés Jean-Yves Le Drian dijo a los medios que el número de sus "botas en terreno" en Mali sumaban ya 2.000 hombres, añadiendo que "alrededor de 4.000 hombres serán movilizados para esta operación" en Mali y otras bases exteriores [4].
Pero hay fuertes señales de que la agenda francesa en Mali es todo menos humanitaria. En una entrevista televisiva en el canal France 5, Le Drian descuidadamente confesó que "El objetivo es la reconquista total de Mali. No exceptuaremos ninguna región". Y el presidente François Hollande dijo que las tropas francesas permanecerían en la región el tiempo necesario "para derrotar al terrorismo". Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Bélgica, Alemania y Dinamarca han dicho todos que apoyarían la operación francesa contra Mali [5].
Mali mismo, como la mayor parte de África, es rico en materias primas. Tiene grandes reservas de oro, uranio, y más recientemente, aunque las compañías petroleras occidentales traten de esconderlo, de petróleo, mucho petróleo. Los franceses prefirieron ignorar los enormes recursos de Mali, manteniéndolo como un país pobre, con una agricultura de subsistencia. Bajo el depuesto presidente democráticamente elegido Amadou Toumani Touré, por primera vez el gobierno inició un catastro sistemático de la enorme riqueza que estaba bajo su suelo. Según Mamadou Igor Diarra, el anterior ministro de minería, el suelo de Mali contiene cobre, uranio, fosfato, bauxita, gemas y, en particular, un gran porcentaje de oro, además de petróleo y gas. Así, Mali es uno de los países en el mundo que tiene más materias primas. Con su minería de oro, el país es ya uno de los explotadores principales, directamente detrás de Sudáfrica y Gana [6]. Dos tercios de la electricidad de Francia provienen de la energía nuclear, y nuevas fuentes de uranio son esenciales. Actualmente, Francia realiza importaciones significativas de uranio del vecino Níger.
Ahora el cuadro se hace un poco más complejo.
Según antiguos expertos militares estadounidenses usualmente confiables, con familiaridad directa con la región, que han hablado bajo la condición del anonimato, las Fuerzas Especiales estadounidenses y de la OTAN realmente entrenaron a las mismas bandas "terroristas" que ahora están justificando una invasión neo-colonial de Mali por parte de Francia con respaldo estadounidense. La pregunta principal es por qué Washington y París entrenarían a los terroristas que ellos tratan ahora de destruír en una "guerra contra el terrorismo". ¿Realmente estuvieron sorprendidos ellos de la carencia de lealtad hacia la OTAN de sus aprendices?. ¿Y qué es lo que hay detrás de la toma francesa de posesión de Mali con el respaldo estadounidense del AFRICOM?.
Parte II: AFRICOM y los "Victoria's Secrets"
La verdad sobre lo que realmente está ocurriendo en Mali y con los países del AFRICOM y la OTAN, sobre todo Francia, es un poco como un "Victoria's Secret" geopolítico: lo que usted piensa que ve no es definitivamente lo que usted conseguirá.
Se nos ha dicho repetidamente en los meses recientes que algo que supuestamente se llama a sí mismo Al-Qaeda —la organización oficialmente acusada por el gobierno estadounidense como responsable de pulverizar tres torres del Centro Mundial de Comercio y de provocar un enorme agujero en un costado del Pentágono el 11 de Septiembre de 2001— se ha reagrupado.
Según la popular narración de los medios y las declaraciones de varios funcionarios de gobierno de países miembros de la OTAN, el grupo original del fallecido Osama bin Laden, refugiado —se supone que debemos creer— en algún lugar en las cuevas de Tora Bora en Afganistán, ha adoptado por lo visto un modelo de negocios moderno, y está entregando franquicias oficiales de Al-Qaeda, en un estilo algo como el "McDonald's del Terrorismo", desde Al-Qaeda en Iraq al Grupo de Combate Islámico Libio (LIFG) en Libia y ahora Al-Qaeda en el Magreb Islámico.
Incluso he escuchado informes de que una nueva franquicia "oficial" de Al-Qaeda ha sido dada recién, por extraño que pueda parecer, a algo llamado DRCCAQ o Al-Qaeda Cristiana (sic) de la República Democrática del Congo [7]. Ahora esto es una extensión que recuerda una secta igualmente extraña llamada Judíos por Jesús creada en la época de los hippies y la Guerra de Vietnam. ¿Puede ser que los arquitectos de todos estos turbios grupos tengan tan poca imaginación?.
Si debemos creer la historia oficial, el grupo que está siendo culpado en Mali de la mayoría de los problemas es Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQIM). El turbio AQIM mismo es realmente un producto de varios mecanismos detrás del escenario. Originalmente estaba basado en Argelia a través de la frontera con Mali y se llamaba el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC).
En 2006 el principal gurú de Al-Qaeda en ausencia de Osama bin Laden, el yihadista egipcio Ayman Al-Zawahiri, anunció públicamente la concesión al argelino GSPC de la franquicia de Al-Qaeda. El nombre fue cambiado a Al-Qaeda en el Magreb Islámico, y las operaciones argelinas de contraterrorismo los empujó durante los dos años pasados hacia la frontera del desierto en Mali del Norte. El AQIM según se informa es poco más que una banda criminal bien armada que consigue su dinero traficando cocaína sudamericana desde África a Europa, o por medio del comercio de armas y tráfico de personas [8].
Un año más tarde, en 2007, el emprendedor Al-Zawahiri añadió otro componente básico a su cadena de matones de Al-Qaeda, cuando él oficialmente anunció la fusión entre el libio LIFG y Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQIM).
El LIFG o Grupo de Combate Islámico Libio, fue formado por el yihadista nacido en Libia Abdelhakim Belhaj. Belhaj fue entrenado por la CIA como parte de los muyahidines de Afganistán financiados por EE.UU. durante los años '80 junto con otro aprendiz de la CIA llamado Osama bin Laden. En esencia, como el periodista Pepe Escobar hace notar, "para todos los objetivos prácticos, desde entonces, el LIFG y AQIM han sido uno y lo mismo, y Belhaj era/es su emir" [9].
Se hace aún más interesante que averigüemos que los hombres de Belhaj —quienes, como Escobar escribe, estuvieron en la vanguardia de una milicia de bereberes de las montañas del sudoeste de Trípoli, la llamada Brigada de Trípoli— fueron entrenados en secreto durante dos meses por Fuerzas Especiales estadounidenses [10].
El LIFG desempeñó un papel fundamental en el derrocamiento, respaldado por EE.UU. y Francia, de Qaddafi, que ha convertido a la Libia de hoy en lo que un observador describe como "el bazar de armas al aire libre más grande del mundo". Aquellas armas supuestamente se están desbordando desde Benghazi a Mali y a otros varios lugares críticos, objetivos para una desestabilización, incluyendo —según lo que fue sugerido recientemente por el testimonio ante el comité de Relaciones Extranjeras del Senado estadounidense de la Ministra de Asuntos Exteriores saliente Hillary Clinton— el embarque desde Libia a Turquía, donde dichas armas estaban siendo canalizadas hacia varios insurgentes terroristas extranjeros enviados a Siria para alimentar la destrucción de ese país [11].
Ahora, ¿qué pretende este extraño conglomerado, esta organización terrorista globalizada, LIFG-GPSC-AQIM, en Mali y más allá, y cómo conviene esto al AFRICOM y a los objetivos franceses?.
Parte III: Curioso Golpe de Estado en Mali y Preciso Cronometraje del Terrorismo de AQIM
Los acontecimientos en el antes pacífico y democrático Mali comenzaron a hacerse muy extraños el 22 de Marzo de 2012 cuando el Presidente maliense Amadou Toumani Touré fue expulsado y conducido al exilio por un golpe militar un mes antes de una programada elección presidencial. Touré había instituído antes un sistema democrático multipartidario. El líder del golpe de Estado, el capitán Amadou Haya Sanogo, recibió entrenamiento militar en EE.UU., en Fort Benning, Georgia, y en la base de Infantería de Marina en Quantico, Virginia, según el portavoz del AFRICOM [12]. Sanogo afirmó que el golpe militar había sido necesario porque el gobierno de Touré no estaba haciendo lo suficiente para reprimir los disturbios de los tuaregs en el Norte de Mali.
Como Meyssan señala, el golpe militar de Marzo de 2012 contra Touré era sospechoso en todos sus aspectos. Un grupo del que no se sabía nada llamado CNRDRE (Comité Nacional para la Recuperación de la Democracia y la Restauración del Estado) derrocó a Touré y declaró su intención de restaurar el orden público de Mali en el Norte.
"Esto causó una gran confusión", continúa Meyssan, "ya que los golpistas eran incapaces de explicar cómo sus acciones mejorarían la situación. El derrocamiento del presidente era incluso más extraño ya que una elección presidencial debía efectuarse cinco semanas más tarde y el presidente saliente no estaba postulando al cargo. El CNRDRE está formado por oficiales que fueron entrenados en Estados Unidos. Ellos detuvieron el proceso eleccionario y entregaron el poder a uno de sus candidatos, que resultó ser el francófilo Dioncounda Traoré. Este juego de manos fue legalizado por la CEDEAO (Comunidad Económica de Estados Africanos del Oeste), cuyo presidente no es ni más ni menos que Alassane Ouattara, quien fue colocado en el poder en Costa de Marfil por el ejército francés un año antes" [13].
Alassane Ouattara, con estudios de Economía en EE.UU., es un antiguo importante funcionario del Fondo Monetario Internacional que en 2011 sacó a la fuerza a su rival presidencial en Costa de Marfil con la ayuda militar francesa. Él debe su cargo no al "New York Times" sino a las Fuerzas Especiales francesas [14].
En el momento del golpe militar, los disturbios en cuestión eran causados por una tribu étnica, los tuareg, un grupo secular y nómada de gente dedicada al pastoreo de ganado que exigía independizarse de Mali a principios de 2012.
La Rebelión Tuareg fue supuestamente armada y financiada por Francia, que repatrió a los tuaregs que habían estado luchando en Libia para lograr la secesión del Norte de Mali del resto del país, a lo largo de la frontera de Argelia, y la declaración de la ley de la sharia. Esto sólo duró desde Enero hasta Abril de 2012, momento en el cual los combatientes tuareg nómadas regresaron a sus lugares predilectos en el Sahara central y las fronteras del Sahel, una enorme área del desierto, carente de límites, entre Libia, Argelia, Mali y Níger. Esto dejó al libio-argelino LIFG/Al-Qaeda en el Magreb Islámico y a sus socios del yihadista Asnar Dine realizar el trabajo sucio para París [15].
En su batalla de 2012 por independizarse de Mali, los tuareg habían hecho una alianza impía con el yihadista AQIM. Ambos grupos se asociaron brevemente con Asnar Dine, otra organización islamista liderada por Iyad Ag Ghaly. Se cree que Asnar Dine tiene lazos con Al-Qaeda en el Magreb Islámico que es conducido por el primo de Ag Ghaly, Hamada Ag Hama. Ansar Dine busca la imposición de la estricta ley de la sharia en todo Mali.
Los tres grupos principales brevemente unieron fuerzas en el momento en que Mali fue sumergido en el caos después del golpe militar de Marzo de 2012. El líder del golpe había sido el capitán Amadou Haya Sanogo, quien había recibido entrenamiento militar en el campo de Infantería de Marina en Quantico, Virginia, y con las Fuerzas Especiales en Fort Benning, Georgia, en EE.UU. En un extraño juego de acontecimientos, a pesar de la afirmación de que el golpe fue llevado a cabo producto del fracaso del gobierno civil para contener la rebelión en el Norte, los militares malienses perdieron el control de las capitales regionales de Kidal, Gao y Timbuctú diez días después de que Sanogo tomara posesión del cargo. Reuters describe el farsesco golpe de Estado como "un espectacular autogol" [16].
La violación de la Constitución de Mali por los militares fue usada para desencadenar severas sanciones contra el gobierno militar central. Mali fue suspendido como miembro de la Unión Africana; el Banco Mundial y el Banco de Desarrollo Africano también han suspendido la ayuda. Estados Unidos ha recortado a la mitad sus 140 millones de dólares en ayuda que envía cada año, todo lo cual creó el caos en Mali e hizo prácticamente imposible para el gobierno responder a la creciente pérdida de territorio en el Norte a manos de los salafistas.
Parte IV: Terror Anti-Terrorista
Lo que entonces siguió parece una página sacada del libro de texto de insurgencia y contra-insurgencia del general de brigada británico Frank E. Kitson durante las operaciones británicas contra los Mau Mau en Kenia en los años '50. La insurrección yihadista en el Norte y el simultáneo golpe militar en la capital condujo a una situación en la cual Mali fue inmediatamente aislado y fuertemente castigado con sanciones económicas.
Actuando con prisa indecente, la regional Comunidad Económica de Estados Africanos Occidentales, de 15 miembros, y controlada por estadounidenses y franceses, exigió que los líderes del golpe de Estado restauraran el gobierno civil. El 26 de Marzo EE.UU. cortó toda la ayuda militar al empobrecido país, asegurando el máximo caos justo cuando los yihadistas hacían su más importante avance en el Sur. Posteriormente, en una reunión el 2 de Abril en Dakar, Senegal, los miembros de la CEDEAO cerraron las fronteras de sus países con el enclaustrado Mali y le impusieron severas sanciones, incluso cortándole el acceso al banco regional, creciendo la posibilidad de que Mali será pronto incapaz de pagar por suministros esenciales, incluída la gasolina.
Los mismos militares que "entrenan" a los terroristas también entrenan a los "anti-terroristas". Esto parece una extraña contradicción en política, sólo cuando dejamos de comprender la esencia de los métodos desarrollados por estadounidenses y británicos para la guerra irregular empleados activamente desde principios de los años '50.
El método fue originalmente llamado Guerra de Baja Intensidad por el oficial del Ejército británico que desarrolló y refinó el método para el control de las zonas conquistadas en Malasia, en Kenia durante las luchas libertarias de los Mau Mau en los años '50, y más tarde por el Ejército británico en Irlanda del Norte. La guerra de baja intensidad, como él la llamó en un libro de ese mismo nombre [17], implica el uso del engaño, la infiltración de agentes dobles, provocadores, y el uso de desertores en movimientos populares legítimos, tales como las luchas por la independencia colonial después de 1945.
El método es a veces referido como "Gang / Counter-Gang". Su esencia consiste en que la agencia instrumental de inteligencia o la fuerza de ocupación militar, ya sea el ejército británico en Kenia o la CIA en Afganistán, de facto controla las acciones de ambos lados en un conflicto interno dado, creando pequeñas guerras civiles o guerras de bandas con el objetivo de dividir el movimiento legítimo total y crear el pretexto para una fuerza militar exterior, en lo que EE.UU. ahora ha renombrado engañosamente como "Operaciones de Pacificación" (Peace-Keeping Operations, PKO) [18].
En su curso avanzado sobre Intervención Militar Estadounidenses Desde Vietnam, Grant Hammond del Colegio de Guerra Aérea estadounidense se refiere abiertamente al Conflicto de Baja Intensidad, alias Operaciones de Pacificación, como "guerra con otro nombre" [19].
Comenzamos a ver las huellas sangrientas de una no muy bien disfrazada re-colonización de la antigua África francesa, esta vez usando el terrorismo de Al-Qaeda como el trampolín para la presencia militar directa por primera vez en más de medio siglo. Las tropas francesas se quedarán probablemente para ayudar a Mali en una "operación de mantenimiento de la paz". Estados Unidos apoya totalmente a Francia como la "mano del gato" del AFRICOM. Y Al-Qaeda en el Magreb Islámico y sus productos derivados hacen posible la entera intervención militar de la OTAN.
Washington afirmó que había sido cogido por sorpresa por el golpe militar. Según reportajes de prensa, una evaluación interna confidencial completada en Julio de 2012 por el Comando de África (AFRICOM) del Pentágono concluyó que el golpe se había desplegado demasiado rápido como para que los analistas estadounidenses de inteligencia hubieran descubierto algún claro signo de advertencia. "El golpe en Mali progresó muy rápidamente y con muy poca advertencia", dijo el portavoz de AFRICOM, coronel Tom Davis. "La chispa que lo encendió ocurrió dentro de sus filas militares menores, quienes en última instancia derrocaron al gobierno, no en el nivel de mando superior, donde la advertencia de signos podría haber sido más fácilmente notada" [20]. Ese punto de vista es fuertemente contradicho. En una entrevista extra-oficial con The New York Times, un oficial de Operaciones de Fuerzas Especiales discrepó diciendo: "Esto se ha estado fraguando durante cinco años. Los analistas se han complacido en sus presunciones y no vieron los grandes cambios y los impactos de ellos, como el numeroso armamento que está saliendo de Libia y los combatientes diferentes, más islámicos, que regresaron" [21].
Más exacto parece ser que el AFRICOM había estado fraguando la crisis durante cinco años desde que comenzó sus operaciones a fines de 2007. Mali para el Pentágono es sólo el siguiente componente básico en la militarización de toda África por AFRICOM, utilizando fuerzas delegadas, como Francia, para hacer el trabajo sucio. La intervención en Mali usando a Francia como vanguardia es sólo un elemento básico en un proyecto para la militarización total de África, cuyo objetivo principal no es capturar recursos estratégicos como el petróleo, gas, uranio, oro o mineral de hierro. El objetivo estratégico es China y la velozmente creciente presencia comercial china a través de África durante la década pasada. El objetivo de AFRICOM es sacar a empujones a China de África o al menos mutilar irreparablemente su acceso independiente a los recursos africanos. Una China económicamente independiente, así piensan en varias oficinas del Pentágono o grupos de expertos neo-conservadores de Washington, puede ser una China políticamente independiente. De aquello ¡Dios nos libre!. Eso creen ellos.
Parte V: La Agenda del AFRICOM en Mali: China como Objetivo
La operación en Mali es sólo la punta de un enorme iceberg africano. AFRICOM, el Comando estadounidense de África del Pentágono, fue creado por el presidente George W. Bush a fines de 2007. Su objetivo principal era responder a la dramáticamente creciente influencia económica y política china a través de África. Las campanas de alarma se activaron en Washington en Octubre de 2006 cuando el presidente chino fue el anfitrión una histórica cumbre en Pekín, el Foro para la Cooperación China-África (FOCAC), que llevó a casi cincuenta jefes de Estado y ministros africanos a la capital china. En 2008, antes de un viaje de doce días por ocho naciones de África —el tercero de tales viajes desde que asumió el cargo en 2003— el presidente chino Hu Jin-Tao anunció un programa de tres años de 3 mil millones de dólares en préstamos preferentes y ayuda ampliada para África. Estos fondos venían a agregarse a otros 3 mil millones de dólares en préstamos y 2 mil millones en créditos de exportación que Hu había anunciado antes.
El comercio entre China y los países africanos se desencadenó en los cuatro años siguientes mientras la influencia francesa y estadounidense en el "Continente Negro" se desvanecía. El comercio de China con África alcanzó 166 mil millones de dólares en 2011, según las estadísticas chinas, y las exportaciones africanas a China —principalmente recursos para abastecer las industrias chinas— se elevaron a 93.000 millones de dólares desde 5.600 millones durante la década pasada. En Julio de 2012 China ofreció a los países africanos 20 mil millones de dólares en préstamos durante los próximos tres años, el doble de la cantidad prometida en el período de los tres años anteriores [22].
Para Washington, hacer que AFRICOM estuviese operacional cuanto antes era una prioridad geopolítica urgente. Entró en funciones el 1º de Octubre de 2008 desde su cuartel central en Stuttgart, Alemania. Desde que la Administración de Bush-Cheney firmó la directiva que creó AFRICOM en Febrero de 2007, aquél ha sido una respuesta directa a la exitosa diplomacia económica de China en África.
El AFRICOM define su misión como sigue: "El Comando de África tiene la responsabilidad administrativa de apoyar militarmente a la política del gobierno estadounidense en África, y de relacionarse con los ejércitos de las 53 naciones africanas". Ellos reconocen trabajar estrechamente con las Embajadas estadounidenses y el Departamento de Estado a través de África, una admisión inusual que también incluye a la USAID (United States Agency for International Development): "El Comando estadounidense de África proporciona personal y apoyo logístico a las actividades financiadas por el Departamento de Estado. El personal del Comando trabaja estrechamente con las embajadas estadounidenses en África para coordinar programas de entrenamiento para mejorar la capacidad de la seguridad de las naciones africanas" [23].
Hablando ante la Asociación de Operaciones Internacionales de Paz (IPOA) en Washington D.C. el 27 de Octubre de 2008, el general Kip Ward, Comandante de AFRICOM, definió la misión del Comando como "en coordinación con otras agencias estadounidenses de gobierno y asociados internacionales, [para manejar] compromisos sostenidos de seguridad por medio de programas de ejército a ejército, actividades patrocinadas por el ejército, y otras operaciones militares en tanto dirigidas para promover un estable y seguro medioambiente africano en apoyo de la política exterior estadounidense" [24].
Varias fuentes de Washington afirman abiertamente que AFRICOM fue creado para responder a la presencia creciente de China en África y al creciente éxito de China para asegurar acuerdos económicos a largo plazo sobre materias primas de África a cambio de ayuda china y acuerdos de producción compartida e impuestos. De acuerdo a informes confiables, los chinos han sido lo suficientemente sagaces. En vez de ofrecer la salvaje austeridad y el caos económico que dicta el FMI, como éste lo hace en Occidente, China está ofreciendo grandes créditos y préstamos suaves para construír caminos y escuelas a fin de crear buena voluntad.
El doctor J. Peter Pham, una persona informada de Washington y consejero de los Departamentos de Defensa y Estado estadounidenses, afirma abiertamente que entre los objetivos del nuevo AFRICOM está el de "proteger el acceso a los hidrocarburos y otros recursos estratégicos que África tiene en abundancia... una tarea que incluye asegurarse contra la vulnerabilidad de aquellas riquezas naturales y asegurarse de que ningún otro tercero interesado, como China, India, Japón o Rusia, obtengan monopolios o tratamiento preferencial".
En un testimonio delante del Congreso estadounidense apoyando la creación de AFRICOM en 2007, Pham, quien está estrechamente asociado con el grupo de expertos neo-conservador Fundación para la Defensa de las Democracias, declaró:
"Esta riqueza natural hace de África un objetivo atractivo para las atenciones de la República Popular China, cuya economía dinámica... tiene una sed casi insaciable de petróleo, así como una necesidad de otros recursos naturales para sustentarla... China importa actualmente aproximadamente 2,6 millones de barriles de crudo por día, aproximadamente la mitad de su consumo; más de 765.000 de aquellos barriles —aproximadamente un tercio de sus importaciones— proviene de fuentes africanas, especialmente de Sudán, Angola y Congo (Brazzaville). No es maravilla, entonces, que... quizá ninguna otra región extranjera rivaliza con África como el objeto de interés estratégico ininterrumpido de Pekín en los años recientes...
Intencionalmente o no, muchos analistas esperan que África —especialmente los Estados a lo largo de su costa occidental rica en petróleo— cada vez más se irá convirtiendo en un teatro para la competencia estratégica entre Estados Unidos y su único verdadero cercano competidor en la escena global, China, en tanto ambos países procuran ampliar su influencia y su acceso seguro a los recursos" [25].
Para responder a la creciente influencia china a través de África, Washington ha reclutado a la económicamente débil y políticamente desesperada Francia con promesas de apoyar un renacimiento francés de su antiguo Imperio colonial africano de una forma u otra. La estrategia, como se hace evidente a consecuencia del uso francés-estadounidense de terroristas de Al-Qaeda para derrocar a Gadafi en Libia y ahora causar estragos a través del Sahara desde Mali, es fomentar guerras étnicas y odio sectario entre bereberes, árabes, y otros en el Norte de África: dividir para gobernar.
Parece que ellos incluso se han apropiado de una fórmula francesa más antigua para el control directo. En un innovador análisis, el analista geopolítico y sociólogo canadiense Mahdi Darius Nazemroaya escribe: "El mapa usado por Washington para combatir el terrorismo bajo la Iniciativa Pan-Sahel dice mucho. El ámbito o área de actividad para los terroristas, dentro de las fronteras de Argelia, Libia, Níger, Chad, Mali y Mauritania, según la designación de Washington, es muy similar a los límites o fronteras de la entidad territorial colonial que Francia intentó sostener en África en 1957. París había planeado apoyar esta entidad africana en el Sahara central occidental como un departamento francés (provincia) directamente ligada a Francia, junto con Argelia" [26].
Los franceses la llamaron la Organización Común de las Regiones Saharianas (OCRS). Comprendía los límites interiores del Sahel y los países saharianos de Mali, Níger, Chad y Argelia. París la usó para controlar los países ricos en recursos para la explotación francesa de materias primas tales como el petróleo, gas y uranio.
Mapa francés del Sahara en 1958 comparado con un mapa de USAFRICOM sobre la Iniciativa Pan-Sahel (abajo) de la amenaza terrorista en el Sahara hoy.
Nazemroaya añade que Washington claramente tuvo en mente esta área rica en energía y recursos cuando dibujó las áreas de África que necesitaban ser "limpiadas" de presuntas células y bandas terroristas. Al menos ahora el AFRICOM tenía "un plan" para su nueva estrategia africana. El Instituto Francés de Relaciones Internacionales (IFRI) planteó abiertamente esta conexión entre los terroristas y las áreas ricas en energía en un informe de Marzo de 2011 [27].
El mapa usado por Washington para combatir el terrorismo bajo la Iniciativa Pan-Sahel del Pentágono muestra un área de actividad para los terroristas, dentro de Argelia, Libia, Níger, Chad, Mali y Mauritania, de acuerdo a la identificación hecha por Washington. La Iniciativa de Contraterrorismo Trans-Sahariana (TSCTI) fue comenzada por el Pentágono en 2005. A Mali, Chad, Mauritania y Níger se les agregó ahora Argelia, Mauritania, Marruecos, Senegal, Nigeria y Túnez, en un anillo de cooperación militar con el Pentágono. La Iniciativa de Contraterrorismo Trans-Sahariana fue transferida a la autoridad del AFRICOM el 1º de Octubre de 2008 [28].
El mapa del Pentágono es notablemente similar a los límites o las fronteras de la entidad territorial colonial que Francia intentó mantener en África en 1957. París había planeado apoyar esta entidad africana en el Sahara central occidental, la Organización Común de las Regiones Saharianas (OCRS), como una provincia francesa. Ésta comprendía los límites interiores del Sahel y los países saharianos de Mali, Níger, Chad y Argelia. Los proyectos fueron frustrados durante la Guerra Fría por las guerras de independencia argelina y de otros países africanos contra el gobierno colonial francés, el "Vietnam" de Francia. Se obligó a que Francia disolviera la OCRS en 1962 debido a la independencia argelina y a la disposición anti-colonial en África [29]. Las ambiciones neo-coloniales de París, sin embargo, no desaparecieron.
Los franceses no hacen ningún secreto de su alarma sobre la creciente influencia china en la antigua África francesa. El Ministro de Hacienda francés Pierre Moscovici declaró en Abidjan (Costa de Marfil) en Diciembre pasado que las compañías francesas deben pasar a la ofensiva y luchar contra la creciente influencia de su rival China por una participación en los mercados cada vez más competitivos de África. "Es evidente que China está cada vez más presente en África... las compañías (francesas) que tienen los medios deben pasar a la ofensiva. Ellas deben estar más presentes en terreno. Ellas tienen que luchar", declaró Moscovici durante un viaje a Costa de Marfil [30].
Es evidente que París tenía en mente una ofensiva militar para respaldar la ofensiva económica que preveía para las empresas francesas en África.–