HOY LA LUCHA ES POR TRANSFORMACIONES SOCIALES PROFUNDAS, POR EL CONTRAATAQUE, POR DERROTAR AL GOBIERNO Y POR EL SOCIALISMO
Cada momento histórico, en el desarrollo de la lucha de clases, tiene su programa y su estrategia de fuerza para conquistar las posiciones que corresponden al desarrollo concreto de las contradicciones capital-trabajo.
La clase obrera y los sectores populares, en la situación de crisis estructural que transita el capitalismo español, tienen que priorizar aquellos elementos políticos que más pueden fortalecer su posición frente a las clases dominantes; gestionadas hoy por el PP y ayer por el PSOE en el gobierno central, y por los gobiernos autonómicos en los que participan diversas formaciones políticas que trabajan -todas ellas- en la misma dirección de obediencia al capital.
La convocatoria de CC OO y UGT para el 15 de septiembre, en Madrid, no va en esa dirección necesaria para el momento actual. Recurrir a la categoría de “la ciudadanía” para reclamar el “estado del bienestar” a través de un idealizado referéndum supone un paso atrás en las movilizaciones ascendentes de los últimos meses, donde la reclamación principal ha sido la de la convocatoria de una nueva y más combativa huelga general. La huelga general es la respuesta que se corresponde con la envergadura del ataque de la burguesía española contra la clase obrera y contra el pueblo. Exclusivamente será con ese análisis y con esas consignas claras como acudirá el PCPE a esa movilización para reconducirla a un clamor por la Huelga General y contra el capitalismo
Hoy la prioridad es organizar el contraataque de la clase obrera, y de todo el pueblo, contra el gobierno de la oligarquía, sus políticas, el euro, la UE y la OTAN. La propuesta del referéndum paraliza -durante un período- todo el ascendente movimiento de lucha obrera y lo desvía a una idealizada capacidad de decidir en el marco legal de la dictadura del capital. Es una distracción inaceptable en este momento de agudización de la lucha de clases, es un auténtico balón de oxígeno para el gobierno, diluyendo el carácter clasista de la confrontación.
La estrategia actual de las clases dominantes se orienta a establecer los mecanismos de legitimación social que les permitan avanzar hacia una nueva forma de poder, plasmada en un estado autoritario con consenso social. Las campañas contra la política, los partidos, los sindicatos, las autonomías, etc., se apoyan en problemas reales pero trabajan para crear la subjetividad necesaria para ese golpe de mano. La misma convocatoria que se extiende por la red sin convocantes identificados del 25 de septiembre frente al Parlamento hace de comparsa de esa estrategia, al tiempo que confronta con el movimiento obrero y con las estrategias de lucha obrera de mayor combatividad. La citada convocatoria más recuerda a la quema del Reichstag propiciada por los nazis para ilegalizar y criminalizar al Partido Comunista y al movimiento obrero, que a una lucha popular organizada y consecuente. El PCPE rechaza esta convocatoria y no participará en ella de ninguna manera.
El PCPE estará siempre en todas las movilizaciones obreras donde sea posible explicar su posición y difundir su propuesta política, pero nunca de una manera subsidiaria con posiciones que, en uno un otro grado, son funcionales a las estrategias de las clases dominantes.
El PCPE llama a toda la clase obrera y al pueblo a avanzar de forma urgente hacia la convocatoria de una huelga general para enfrentar al gobierno y sus políticas, para exigir la salida del euro, de la UE y de la OTAN, por la nacionalización de la banca, la reducción del gasto militar y por la exigencia de condiciones de vida dignas para el pueblo, y por el socialismo.
El momento es de confrontación y lucha. No podemos eludir nuestras responsabilidades. No hay consenso con la burguesía en la gestión de la crisis. O la burguesía o la clase obrera.
Comité Ejecutivo del PCPE a 5 de agosto de 2012
¡TODO EL PODER PARA LA CLASE OBRERA!
¡NADA SE MUEVE SIN NUESTRO TRABAJO!