Textos de Marx y de Lenin, sirenas, una potente orquesta sinfónica, ametralladoras, dos coros, acordeones, una banda de música e incluso Stalin prometiendo lealtad a unos principios socialista que luego traicionaría.
Entre los años 1936 y 1937 Sergei Prokofiev compone una extraordinaria cantata dedicada al vigésimo aniversario de la Revolución de Octubre.
Es verdad que muchas personas abandonaron la Unión Soviética por unos motivos o por otros. También lo es que muchos de los que se quedaron no pudieron hacer todo cuanto hubiesen deseado y en la forma que quisieron. En eso la URSS con una vida total de poco más de 70 años e innumerables dificultades no era una milagrosa excepción. Pero considerar a Shostakovich y Prokofiev como “disidentes” cuando no como “presos del Estado” es sencillamente ridículo y pocos esfuerzos intelectuales nos debe ocupar semejante despropósito. Aunque a muchos no guste bueno sería reconocer que también hubo personas que de buena fe y en libertad construyeron el comunismo, sus logros y las consecuencias que desde la caída de la URSS han tenido lugar en cuanto a "La desvalorización del mundo humano en razón directa de la valorización del mundo de las cosas". Algo a lo que sin duda podría contribuir la lectura rigurosa en lugar de la repetición de pueriles libelos propagandísticos de carácter exclusivamente difamatorio.
Conviene recordar que en el difícil año 1936 Prokofiev fija su residencia voluntaria y definitivamente en la Unión Soviética tras casi dos décadas viviendo entre Europa y los Estados Unidos. Del año 1943 al 1951 recibe ni más ni menos que seis veces el Premio Stalin y el año 1947 es distinguido con el galardón de Artista del Pueblo.
Estoy convencido de que pocos de los detractores del marxismo han leído una sola obra de Marx. Tampoco parecen haber tenido suerte con la música. [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
Entre los años 1936 y 1937 Sergei Prokofiev compone una extraordinaria cantata dedicada al vigésimo aniversario de la Revolución de Octubre.
Es verdad que muchas personas abandonaron la Unión Soviética por unos motivos o por otros. También lo es que muchos de los que se quedaron no pudieron hacer todo cuanto hubiesen deseado y en la forma que quisieron. En eso la URSS con una vida total de poco más de 70 años e innumerables dificultades no era una milagrosa excepción. Pero considerar a Shostakovich y Prokofiev como “disidentes” cuando no como “presos del Estado” es sencillamente ridículo y pocos esfuerzos intelectuales nos debe ocupar semejante despropósito. Aunque a muchos no guste bueno sería reconocer que también hubo personas que de buena fe y en libertad construyeron el comunismo, sus logros y las consecuencias que desde la caída de la URSS han tenido lugar en cuanto a "La desvalorización del mundo humano en razón directa de la valorización del mundo de las cosas". Algo a lo que sin duda podría contribuir la lectura rigurosa en lugar de la repetición de pueriles libelos propagandísticos de carácter exclusivamente difamatorio.
Conviene recordar que en el difícil año 1936 Prokofiev fija su residencia voluntaria y definitivamente en la Unión Soviética tras casi dos décadas viviendo entre Europa y los Estados Unidos. Del año 1943 al 1951 recibe ni más ni menos que seis veces el Premio Stalin y el año 1947 es distinguido con el galardón de Artista del Pueblo.
Estoy convencido de que pocos de los detractores del marxismo han leído una sola obra de Marx. Tampoco parecen haber tenido suerte con la música. [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]