por AlejoSola Dom Ago 25, 2013 1:16 am
Creo más factible la primera; hacer desaparecer los pequeños negocios manteniendo emplazamientos de distribución de los productos del proletariado a un precio que éste se pueda permitir más haciéndole que le sobrase para el transporte (que se mantendría a un muy bajo precio de coste, por su nacionalización) y para más gastos. Obviamente, los beneficios de las ditribuidoras van a parar al Estado, que los volverá a emplear para volver a retribuir a los trabajadores en función a su trabajo, capacidades, etc...
¿Y qué pasa con los pequeños empresarios? Bien, en los pequeños negocios, normalmente el jefe trabaja junto a sus empleados, teniendo así práctica amplia en el campo del trabajo al que relacionaba su negocio. Así, se pueden permitir ganarse la vida, ya bajo la dictadura del proletariado, trabajando de igual manera pero eliminando el sometimiento a las grandes empresas y la necesidad de dar cuentas de inversiones privadas, etc...
Salud!