Los trabajadores estamos sufriendo en nuestras carnes la brutal explotación capitalista. El número de parados crece sin cesar, cada día son desahuciadas más de doscientas familias, las condiciones laborales de los obreros son absolutamente precarias y, sin embargo, el gobierno y el Congreso continúan dictando y aplicando leyes anti-obreras que restringen cada día más los derechos de los trabajadores.
No cabe duda de que el Estado, o sea, su gobierno, sus parlamentos, sus leyes, su policía, sus jueces y sus instituciones, están al servicio de las grandes empresas, y no de la gran mayoría del pueblo, que son los trabajadores y las trabajadoras. El Estado capitalista es una herramienta en manos de la clase dominante, la burguesía, para ejercer su dictadura sobre el pueblo trabajador.
Así pues, el Estado burgués representa unos intereses antagónicos a los nuestros, a los intereses de la clase obrera. No podemos sentirnos identificados con él, ni tratar de reformarlo, sino tan solo aspirar a destruirlo, a emancipar a nuestra clase mediante la superación del sistema criminal e inhumano que permite la explotación de la gran mayoría de la población a manos de una minoría parásita; es decir, el sistema capitalista.
Los obreros, los campesinos, y los demás sectores populares, debemos constituir nuestro propio poder, el Poder Popular, al margen del poder de la burguesía, materializado en el Estado burgués.
El Frente Único del Pueblo es esta estructura misma de Poder Popular. Debemos organizarnos en nuestros centros de trabajo en Asambleas de Comités, Delegados y Trabajadores (ACDT); éste es el eje central del Frente Único del Pueblo, es decir, del Poder Popular.
A su vez, debemos organizarnos en nuestros centros de estudio –institutos y universidades-, constituyendo Asambleas de Estudiantes; y también en los barrios de nuestras ciudades y pueblos, creando las Asambleas Populares.
Tan solo organizando a las clases explotadas por el capitalismo, erigiéndonos todos en Poder Popular a través del Frente Único del Pueblo, podremos contar con una estructura de poder en manos de los trabajadores y las trabajadoras. Un poder que no solo es ajeno al poder burgués, sino antagónico a él.
Las asambleas del Frente Único del Pueblo serán los legítimos órganos de poder de las clases trabajadoras.
Nuestra reivindicación, la reivindicación de los obreros y las obreras, es clara: la destrucción del sistema capitalista y la construcción, sobre sus cenizas, del único sistema capaz de servir a los intereses de los trabajadores, el socialismo.
El potencial revolucionario de nuestra clase es abrumador, pero para lograr nuestra propia emancipación es necesario que nos unamos y construyamos el Frente Único del Pueblo. Éste no es un partido, ni un sindicato, ni una asociación; es el mismo Poder Popular, o sea, la clase obrera, en alianza con las demás clases explotadas, organizadas en asambleas democráticas y revolucionarias coordinadas entre ellas, formando el embrión del futuro Estado obrero.
Es necesario emprender la lucha revolucionaria, que nos unamos todos los trabajadores para crear el Poder Popular, un poder democrático del que formemos parte y que represente de verdad nuestros intereses. Este poder es el Frente Único del Pueblo.
Obrero, obrera, estudiante, ¡contribuye a la creación del poder obrero y popular!
No cabe duda de que el Estado, o sea, su gobierno, sus parlamentos, sus leyes, su policía, sus jueces y sus instituciones, están al servicio de las grandes empresas, y no de la gran mayoría del pueblo, que son los trabajadores y las trabajadoras. El Estado capitalista es una herramienta en manos de la clase dominante, la burguesía, para ejercer su dictadura sobre el pueblo trabajador.
Así pues, el Estado burgués representa unos intereses antagónicos a los nuestros, a los intereses de la clase obrera. No podemos sentirnos identificados con él, ni tratar de reformarlo, sino tan solo aspirar a destruirlo, a emancipar a nuestra clase mediante la superación del sistema criminal e inhumano que permite la explotación de la gran mayoría de la población a manos de una minoría parásita; es decir, el sistema capitalista.
Los obreros, los campesinos, y los demás sectores populares, debemos constituir nuestro propio poder, el Poder Popular, al margen del poder de la burguesía, materializado en el Estado burgués.
El Frente Único del Pueblo es esta estructura misma de Poder Popular. Debemos organizarnos en nuestros centros de trabajo en Asambleas de Comités, Delegados y Trabajadores (ACDT); éste es el eje central del Frente Único del Pueblo, es decir, del Poder Popular.
A su vez, debemos organizarnos en nuestros centros de estudio –institutos y universidades-, constituyendo Asambleas de Estudiantes; y también en los barrios de nuestras ciudades y pueblos, creando las Asambleas Populares.
Tan solo organizando a las clases explotadas por el capitalismo, erigiéndonos todos en Poder Popular a través del Frente Único del Pueblo, podremos contar con una estructura de poder en manos de los trabajadores y las trabajadoras. Un poder que no solo es ajeno al poder burgués, sino antagónico a él.
Las asambleas del Frente Único del Pueblo serán los legítimos órganos de poder de las clases trabajadoras.
Nuestra reivindicación, la reivindicación de los obreros y las obreras, es clara: la destrucción del sistema capitalista y la construcción, sobre sus cenizas, del único sistema capaz de servir a los intereses de los trabajadores, el socialismo.
El potencial revolucionario de nuestra clase es abrumador, pero para lograr nuestra propia emancipación es necesario que nos unamos y construyamos el Frente Único del Pueblo. Éste no es un partido, ni un sindicato, ni una asociación; es el mismo Poder Popular, o sea, la clase obrera, en alianza con las demás clases explotadas, organizadas en asambleas democráticas y revolucionarias coordinadas entre ellas, formando el embrión del futuro Estado obrero.
Es necesario emprender la lucha revolucionaria, que nos unamos todos los trabajadores para crear el Poder Popular, un poder democrático del que formemos parte y que represente de verdad nuestros intereses. Este poder es el Frente Único del Pueblo.
Obrero, obrera, estudiante, ¡contribuye a la creación del poder obrero y popular!
¡Por el Frente Único del Pueblo!
Comité Regional de las Islas Baleares del Partido Comunista Obrero Español (P.C.O.E)
Comité Regional de las Islas Baleares del Partido Comunista Obrero Español (P.C.O.E)