Algunas reflexiones en torno al crecimient o elect oral del FIT
Alejandro Schneider
El notable crecimiento electoral del Frente del Izquierda en todo el país en los pasados comicios del 11 de agosto evidenció toda una serie de cuestiones. En primer lugar, reflejó un largo proceso de construcción, gris, cotidiano y silencioso en el seno de la clase obrera. En este sentido, los partidos que conforman el frente son una parte activa y constitutiva de las dificultades diarias en las que nos encontramos sometidos los laburantes. La participación en numerosos combates contra la sagrada alianza entre la patronal, la burocracia sindical y los gobiernos se encontró expresada en esta importante elección. Si bien existen significativos antecedentes en estos enfrentamientos, en los últimos años la acción gremial de la izquierda ha sido más notoria en diferentes espacios laborales. Desde las multitudinarias protestas por el crimen ejecutado por la patota ferroviaria contra Mariano Ferreyra y demás trabajadores, hasta la lucha por la precarización laboral y la conformación de distintas organizaciones de base, se fue erigiendo lentamente una fuerte presencia de la izquierda con una clara posición clasista dentro del movimiento obrero. En segunda instancia, la izquierda trotskista ha crecido en forma significativa entre los jóvenes. El incremento descomunal de la inflación, los problemas habitacionales y de salud, la falta de oportunidades laborales, la imposibilidad de acceder a una mejor oportunidad de vida, entre otras cuestiones, ha llevado a que muchos jóvenes vean en el FIT una alternativa real y concreta para dar a conocer esos problemas.
Tercero, el crecimiento del trotskismo reflejó cada vez más la falsedad del kirchnerismo de presentarse como un movimiento político combativo y antineoliberal. Su actuación a favor de los grandes capitales como Monsanto y Chevron, su aparente política a favor de los derechos humanos que se desenmascara con socios como Gerardo “601” Martínez, el Proyecto X y el represor César Milani, y su escandaloso nivel de enriquecimiento de la mano de personajes como Ricardo Jaime y Lázaro Báez, impactaron en el aumento del voto hacia el Frente de Izquierda. A eso se suma que el resto de las variantes patronales (radicalismo, macrismo, socialistas sojeros, etc.) tampoco representan una posición o una alternativa distinta. Más aún, en los territorios que gobiernan tienen una política similar al Poder Ejecutivo Nacional: inundaciones en la Capital Federal y en Buenos Aires, nulo control a las empresas privatizadas como se expresó con la explosión en Rosario, extracción ilimitada de recursos minerales en las provincias andinas, etc. De esta manera el giro a una opción de izquierda, manifestada en los comicios, muestra un cierto rechazo anticapitalista y la aceptación de un programa de corte socialista.
En cuarto lugar, el FIT fue la única agrupación que propuso un programa político que no sólo condensó las demandas más profundas de la clase trabajadora, sino que lo pudo hacer en forma clara por medio de una atractiva campaña electoral.
En este escenario, la notable elección del FIT expresó el crecimiento de una corriente abiertamente de izquierda y clasista. El trotskismo lentamente se está convirtiendo en una alternativa seria y coherente ante otras procedentes del campo de la izquierda. El trotskismo es la única corriente política que ha continuado con las posiciones principistas del marxismo, o sea, la lucha irreconciliable contra el capitalismo por el socialismo junto con la necesidad de crear un partido obrero revolucionario a escala mundial.
Si bien no creo que la solución de los verdaderos problemas del capitalismo pase por tener diputados o leyes sancionadas en el parlamento, considero que es muy importante disponer de una voz dentro de las instituciones burguesas. Entre otros factores, esa participación es necesaria porque permite dar a conocer los mecanismos de explotación en los que se encuentra sometida la clase trabajadora. Creo que en octubre, por todas las razones antes mencionadas, el Frente de Izquierda puede seguir mejorando su presencia electoral.
fuente: ideasdeizquierda.org/la-derrota-del-gobierno-el-peronismo-y-los-desafios-de-la-izquierda/