Por su componente revolucionario, moral y ejemplar de cara al mundo adormecido por el capitalismo, así como por su materialismo marxista práctico y notorio en las condiciones socio-económicas que se lograron en las sociedades, básicamente tres referentes:
· La presidencia de Thomas Sankara de Burkina Faso entre 1983, cuando logró la presidencia mediante un golpe de estado revolucionario
inaudito en el contexto, y 1987, cuando fue asesinado en el golpe de estado llevado a cabo por el ahora presidente Blaise Compaoré, que en el 83 había participado también en el golpe de estado, curiosamente. En la práctica de la doctrina marxista-leninista y anti-imperialista de Sankara, su gobierno aplicó grandes reformas contra la corrupción institucional y para la mejoría de la igualdad social, de la educación y de la agricultura. Este claro hoja de ruta revolucionario no caló entre los sectores más conservadores del mismo partido y de una pequeña parte de la sociedad, que finalmente acabarían por protagonizar el sangrante golpe de estado de 1987. Todo su programa fue rápidamente abolido por Compaoré y las beneficiosas reformas socio-económicas que se lograron, así como la revolución moral, ética, de la sociedad, fueron difuminándose. Fue un corto pero muy fructífero período de tiempo a partir del cual otros muchos países africanos quisieron tomar medida. Tanto por la dificultad del contexto como por los resultados, Sankara encabezó una revolución y país admirable durante un corto período de tiempo.
· Las dos primeras décadas de la Cuba socialista
auténtica y
original, del resultado real consecuente de la Revolución Cubana de mano de Fidel Castro y Che Guevara, dos hombres auténticos de principios universalmente humanos. La caída progresiva de la URSS, así como la necesidad de flexibilizar el socialismo revolucionario para poder mantener una economía coaccionada internacionalmente, hicieron restar la verdadera importancia de las importantes reformas económicas que se llevaron a cabo tras el derrumbamiento de la dictadura de Batista. La reforma agraria -imprescindible en todas las revoluciones socialistas/comunistas-, junto con la nacionalización de sectores estratégicos de la economía -aunque hubieron algunos errores puntuales, claro está, nada es perfecto-, la mejora de la calidad de la asistencia sanitaria -actualmente Cuba tiene la tasa de mortalidad más baja de toda América (5,6 por mil niños nacidos)-y educativa -el analfabetismo se situaba en un 22% en 1957, y casi nulo ya a principios del siglo XXI- , así como un mejor abastecimiento alimenticio a toda la población -aún se mantienen y reparten cartillas universales de alimentos básicos-, fueron pilares esenciales del éxito inicial y posible de la Cuba revolucionaria. Después de esta etapa de la
Cuba socialista, junto con la aprobación de la Constitución de 1976 -que redujo la vía
propiamente socialista de los primeros lustres, aunque aprobó medidas importantes como la constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular- y el deterioro de la situación económica por el derrumbamiento de la URSS, su trayectoria ha ido en declive, hasta llegar al punto que con Raúl Castro las reformas capitalistas son ya una realidad. Actualmente, el problema de la estabilidad económica, la mala calidad de muchas viviendas y los problemas del sistema de agua potable dejan en evidencia el declive de la influencia
realmente socialista revolucionaria en el país, por todas las razones dadas.
· La URSS durante el gobierno, presidencia, de Lenin. La transformación
radical, de raíces de
necesidades radicales, de la estructuración social rusa supuso uno de los mayores logros para el proletariado de cualquier revolución socialista/comunista. Tanto el éxito primario de la revolución bolchevique como su moral revolucionaria son todo un referente aún hoy en día.
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"La humanidad se ve obligada -si quiere subsistir- a trabajar para las clases dominantes del grupo de países de economía capitalista desarrollada: esa es la esencia, el motor, del capitalismo".
"El socialismo revolucionario, con el subsiguiente comunismo, es el proyecto histórico de la clase obrera".
Marxismo es futuro.
Fight the supression, we will survive.
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