El 13 de octubre de 2010, el mundo sería testigo del rescate de 33 mineros en Chile luego de quedar atrapados por 69 días a 720 metros de profundidad tras el derrumbe de la mina donde se encontraban. La hazaña de hace cinco años, fue observada por más de mil millones de personas que siguieron por televisión todo el proceso de rescate. Durante esos días estuvieron presentes 1.600 periodistas de todo el mundo. Pero desde aquel momento histórico, no todo ha sido placentero para los protagonistas del suceso tras superar esa pesadilla. En diciembre de 2010, firmaron los contratos para ceder sus historias para libros y películas. Víctor, uno de los mineros rescatado manifestó que solo recibieron un poco más de la mitad de los 513 mil dólares que le habían ofrecido según lo estipulado. Pero no sería el único problema económico, la empresa San Estaban al momento de realizar la indemnización se declaró en quiebra, lo cual impedía que se efectuara el resarcimiento. Luego del incidente se habló de mejorar las condiciones de seguridad y buscar un responsable por el derrumbe, pero al igual que el furor de ‘Los 33’ se opacó a tal punto que todo quedó en el aire. La mayoría de los rescatados tienen que subsistir de trabajos temporales como transportistas, mecánicos o constructores. "Si yo fuera rico, gastaría toda la plata en volver a ser como antes. Me cambió harto la vida, pero a puro sufrimiento", relata Víctor Zamora, el minero "poeta", que durante la reclusión llegó a escribir 180 poemas, muchos de ellos dedicados a su hijo, que entonces tenía cuatro años, y a su esposa, embarazada de tres meses. "No me gusta que me vean derrotado", declara con una extraña mezcla de arrogancia y humildad este hombre, que en marzo pasado perdió su casa durante los aluviones que azotaron el norte del país. Otro minero, Omar Raigada, no ha podido tener la estabilidad laboral que él deseaba. "La verdad es que es difícil que nos den trabajo porque los empresarios tienen miedo de que denunciemos las malas condiciones de seguridad de sus minas". La película que se estrenó el pasado 6 de agosto, en donde actúa Antonio Banderas, logró tener recaudos de taquilla comparables con la de los grandes estrenos que ha tenido Hollywood en los últimos meses, pero de los recaudos los mineros recibieron solo 1.500 dólares cada uno. Pero más allá de las dificultades que se
han presentado, pleitos legales y otras, el accidente que marcó las vidas de estos 33 hombres hasta el extremo ha llevado a que hoy en día tengan un vínculo indestructible entre ellos.
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