Extractos de "Democratización y Revolución en la URSS 1985-91" de Jerry F. Hough
“…Como fue visto, la estructura básica de poder dentro del Partido Comunista envolvía la elección del Secretario General y otros miembros por parte del Comité Central, que era elegido por un Congreso del Partido, cuyos delegados estaban controlados por los secretarios provinciales, que eran supervisados por el Secretario General…
El Flujo Circular de poder no fue una consecuencia no esperada de la estructura del partido. Fue deliberadamente instituida por Lenin en 1919…
Desde antes de la revolución, el líder del partido ha sido selecto por el Comité Central, y el Comité Central electo por un Congreso del Partido compuesto por delegados electos en organizaciones regionales del partido. Esta estructura estaba bien calculada para aislar al líder de otros políticos moscovitas, y la forma de mantener la independencia del líder del Politburó fue la de subordinar este buró al Comité Central. Entonces el líder tendría un único problema: cómo controlar el Congreso del Partido. Delegados al Congreso del Partido eran electos en Conferencias republicanas y provinciales del partido, y los delegados a éstas conferencias eran electos en conferencias del partido del siguiente nivel territorial correspondiente. El primer objetivo de Lenin era asegurarse de que los líderes provinciales fueran leales a él. Su segundo objetivo era conseguir que los delegados al Congreso del Partido estuvieran bajo el control de los líderes provinciales.
Para conseguir esto, Lenin estableció el principio de que los secretarios provinciales del partido, aunque aparentemente electos por sus organizaciones partidistas correspondientes, eran designados (formalmente “recomendados”) desde arriba. A su vez, los secretarios provinciales recomendaban a secretarios de más bajo nivel. Lenin luego prohibió el faccionalismo en el partido comunista para prevenir que otros miembros del Politburó organizaran listas de candidatos para competir en la elección de delegados. Por lo tanto, otros miembros del Politburó tenían poca influencia en el Congreso del Partido, y la selección de una delegación estaba efectivamente bajo el control del secretario regional del partido, que dirigía a la delegación.
Mientras Lenin fue líder del Politburó, éste usó a José Stalin como secretario del Comité Central, y luego como Secretario General, para controlar la selección de secretarios provinciales. Cuando Lenin murió, los secretarios locales, no sorprendentemente, demostraron ser leales a Stalin. Stalin usó estas máquinas para controlar el Congreso, el Comité Central que éste elegía, y el Politburó electo por éste, y de esa forma consolidar su gobierno dictatorial...
…Había, por supuesto, otro lado de este poder del secretario general… también tenía la prerrogativa de remover a los secretarios locales.
El secretario local (regional, distrital, provincial, etc.)… era una figura clave en el sistema de poder. Recibía su cargo y enorme poder no del pueblo, no de una elección competitiva, sino de la mano de Moscú – El Politburó, el Secretariado, y personalmente del Secretario General. Ésta era la base de la dualidad y vulnerabilidad de la posición de secretario regional. Cada uno sabía muy bien que perdería su cargo en el momento… en que perdiera la confianza del Secretario General.
En estas circunstancias, los secretarios locales continuaban llevando delegaciones al Congreso del Partido, que fueran leales al Secretario General… como se esperaba, los delegados votaban por un Comité Central que apoyaría al Secretario General, y ellos mismos formaban un alto porcentaje de la membresía del Comité Central. Esto le daba al Secretario General control sobre el Politburó, pues era electo por el Comité Central…”
“…Como fue visto, la estructura básica de poder dentro del Partido Comunista envolvía la elección del Secretario General y otros miembros por parte del Comité Central, que era elegido por un Congreso del Partido, cuyos delegados estaban controlados por los secretarios provinciales, que eran supervisados por el Secretario General…
El Flujo Circular de poder no fue una consecuencia no esperada de la estructura del partido. Fue deliberadamente instituida por Lenin en 1919…
Desde antes de la revolución, el líder del partido ha sido selecto por el Comité Central, y el Comité Central electo por un Congreso del Partido compuesto por delegados electos en organizaciones regionales del partido. Esta estructura estaba bien calculada para aislar al líder de otros políticos moscovitas, y la forma de mantener la independencia del líder del Politburó fue la de subordinar este buró al Comité Central. Entonces el líder tendría un único problema: cómo controlar el Congreso del Partido. Delegados al Congreso del Partido eran electos en Conferencias republicanas y provinciales del partido, y los delegados a éstas conferencias eran electos en conferencias del partido del siguiente nivel territorial correspondiente. El primer objetivo de Lenin era asegurarse de que los líderes provinciales fueran leales a él. Su segundo objetivo era conseguir que los delegados al Congreso del Partido estuvieran bajo el control de los líderes provinciales.
Para conseguir esto, Lenin estableció el principio de que los secretarios provinciales del partido, aunque aparentemente electos por sus organizaciones partidistas correspondientes, eran designados (formalmente “recomendados”) desde arriba. A su vez, los secretarios provinciales recomendaban a secretarios de más bajo nivel. Lenin luego prohibió el faccionalismo en el partido comunista para prevenir que otros miembros del Politburó organizaran listas de candidatos para competir en la elección de delegados. Por lo tanto, otros miembros del Politburó tenían poca influencia en el Congreso del Partido, y la selección de una delegación estaba efectivamente bajo el control del secretario regional del partido, que dirigía a la delegación.
Mientras Lenin fue líder del Politburó, éste usó a José Stalin como secretario del Comité Central, y luego como Secretario General, para controlar la selección de secretarios provinciales. Cuando Lenin murió, los secretarios locales, no sorprendentemente, demostraron ser leales a Stalin. Stalin usó estas máquinas para controlar el Congreso, el Comité Central que éste elegía, y el Politburó electo por éste, y de esa forma consolidar su gobierno dictatorial...
…Había, por supuesto, otro lado de este poder del secretario general… también tenía la prerrogativa de remover a los secretarios locales.
El secretario local (regional, distrital, provincial, etc.)… era una figura clave en el sistema de poder. Recibía su cargo y enorme poder no del pueblo, no de una elección competitiva, sino de la mano de Moscú – El Politburó, el Secretariado, y personalmente del Secretario General. Ésta era la base de la dualidad y vulnerabilidad de la posición de secretario regional. Cada uno sabía muy bien que perdería su cargo en el momento… en que perdiera la confianza del Secretario General.
En estas circunstancias, los secretarios locales continuaban llevando delegaciones al Congreso del Partido, que fueran leales al Secretario General… como se esperaba, los delegados votaban por un Comité Central que apoyaría al Secretario General, y ellos mismos formaban un alto porcentaje de la membresía del Comité Central. Esto le daba al Secretario General control sobre el Politburó, pues era electo por el Comité Central…”