Psicología social, teoría marxista y el aporte de Vigostky
Fernando González Rey
diumenge 16 d'agost de 2009
par Fernando González Rey
popularité : 44%
RESUMEN
El artículo recoge la disertación del autor en la I Conferencia de Investigación Socio Cultural, celebrada en Madrid, en 1992. Se hace una valoración crítica del modelo positivista aplicado a la Psicología Social y se presenta un marco conceptual de esta disciplina desde el marxismo, otorgándole un peso fundamental a la categoría subjetividad en ello. El autor retoma el aporte de L. S. Vigotsky en torno a la proyección social cultural en el campo de la Psicología Social y nos presenta sus propios puntos de vista al respecto.
La psicología social como esfera aplicada de la ciencia psicológica, está indisolublemente ligada a otras ciencias sociales, como sociología, antropología y economía, sin embargo, durante, muchos años, el predominio del positivismo en la psicología social norteamericana tuvo un rol predominate en la expresión de esta disciplina, conduciendo a la proliferación de microdiseños sobre el comportamiento de variables individuales parciales en relación con variables sociales igualmente parciales, que iban desde la condición social,racial u otra, de los individuos estudiados, hasta formas muy puntuales de influencia social. En este contexto la psicología social perdió completamente su capacidad de integración con otras ciencias para el estudio del hombre y la sociedad.
La psicología social positivista se caracterizó por:
1. La fragmentación de sus investigaciones, la cual impidió completamente su aproximación a la sociedad como integración Interactiva, viva, entre distintos grupos, clases e instituciones, unidades de integración social que nunca fueron estudiadas desde el sentido psicológico que tenían para el Individuo ni desde sus interrelaciones esenciales dentro de la trama general de la sociedad.
2. El individualismo de la investigación, entendido como la búsqueda de respuestas individuales, conductuales, y/o valorativas, ante determinadas situaciones de significación social. Lo emocional se declaraba, pero metodológicamente no se integraba en la investigación.
3. Hipertrofia del experimento y de la neutralidad del investigador en el planteamiento metodológico. La comunicación como instrumento metodológico de la psicología social estaba completamente ausente.
4. Total rechazo a la subjetividad. La psicología social producida en esta dirección fue parte inseparable de una cultura de la conducta que se extendió a todas las esferas de la sociedad. Lo más importante para toda política asociada al hombre es la conducta, ignorándose completamente el sentido que las cosas tenían para él.
Esta cultura se expresa con toda claridad en las instituciones sociales, así, en la escuela, lo más importante es que el niño lea en su primer grado, pasando por alto si en este proceso se vuelve inseguro, desinteresado y dependiente, no perteneciendo estas consecuencias a la responsabilidad de la escuela.
5. Esta psicología social no logró construir unidades cualitativas diferentes al individuo que, portadoras de una significación social, permitieran explicar simultáneamente el comportamiento individual y social del hombre- en urf nivel específico de su vida social.
6. Desarticulación entre diseños parciales, microdiseños y el estudio de la sociedad como totalidad.
Para esta psicología en su afán de encontrar la validez y estandarización de sus métodos, se perdió el hombre vivo, y con él, la historia y la cultura, elementos esenciales para la psicología social.
Uno de los aportes esenciales del marxismo para la psicología social, fue definir la integración de determinantes en la configuración de la esencia humana, presentando esto en toda su expresión socio-histórica. Por supuesto, Marx no fue un psicólogo y no desarrolló una teoría de la subjetividad a nivel particular, pero sus postulados generales fueron muy significativos para el desarrollo de un enfoque histórico y socio cultural en la psicología.
Por otro lado, Marx desarrolló implícitamente una concepción sobre el sujeto social en el papel que le dio a las clases en el desarrrollo de la sociedad, el cual después fue interpretado de forma muy mecánica en la tradición marxista más ortodoxa, de los países del Este europeo y evitada con clara intencionalidad ideológica en todo occidente.
REVISTA CUBANA dE PSICOLOGÍA Vol. 10, No. 2-3,1993
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Fernando González Rey
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RESUMEN
El artículo recoge la disertación del autor en la I Conferencia de Investigación Socio Cultural, celebrada en Madrid, en 1992. Se hace una valoración crítica del modelo positivista aplicado a la Psicología Social y se presenta un marco conceptual de esta disciplina desde el marxismo, otorgándole un peso fundamental a la categoría subjetividad en ello. El autor retoma el aporte de L. S. Vigotsky en torno a la proyección social cultural en el campo de la Psicología Social y nos presenta sus propios puntos de vista al respecto.
La psicología social como esfera aplicada de la ciencia psicológica, está indisolublemente ligada a otras ciencias sociales, como sociología, antropología y economía, sin embargo, durante, muchos años, el predominio del positivismo en la psicología social norteamericana tuvo un rol predominate en la expresión de esta disciplina, conduciendo a la proliferación de microdiseños sobre el comportamiento de variables individuales parciales en relación con variables sociales igualmente parciales, que iban desde la condición social,racial u otra, de los individuos estudiados, hasta formas muy puntuales de influencia social. En este contexto la psicología social perdió completamente su capacidad de integración con otras ciencias para el estudio del hombre y la sociedad.
La psicología social positivista se caracterizó por:
1. La fragmentación de sus investigaciones, la cual impidió completamente su aproximación a la sociedad como integración Interactiva, viva, entre distintos grupos, clases e instituciones, unidades de integración social que nunca fueron estudiadas desde el sentido psicológico que tenían para el Individuo ni desde sus interrelaciones esenciales dentro de la trama general de la sociedad.
2. El individualismo de la investigación, entendido como la búsqueda de respuestas individuales, conductuales, y/o valorativas, ante determinadas situaciones de significación social. Lo emocional se declaraba, pero metodológicamente no se integraba en la investigación.
3. Hipertrofia del experimento y de la neutralidad del investigador en el planteamiento metodológico. La comunicación como instrumento metodológico de la psicología social estaba completamente ausente.
4. Total rechazo a la subjetividad. La psicología social producida en esta dirección fue parte inseparable de una cultura de la conducta que se extendió a todas las esferas de la sociedad. Lo más importante para toda política asociada al hombre es la conducta, ignorándose completamente el sentido que las cosas tenían para él.
Esta cultura se expresa con toda claridad en las instituciones sociales, así, en la escuela, lo más importante es que el niño lea en su primer grado, pasando por alto si en este proceso se vuelve inseguro, desinteresado y dependiente, no perteneciendo estas consecuencias a la responsabilidad de la escuela.
5. Esta psicología social no logró construir unidades cualitativas diferentes al individuo que, portadoras de una significación social, permitieran explicar simultáneamente el comportamiento individual y social del hombre- en urf nivel específico de su vida social.
6. Desarticulación entre diseños parciales, microdiseños y el estudio de la sociedad como totalidad.
Para esta psicología en su afán de encontrar la validez y estandarización de sus métodos, se perdió el hombre vivo, y con él, la historia y la cultura, elementos esenciales para la psicología social.
Uno de los aportes esenciales del marxismo para la psicología social, fue definir la integración de determinantes en la configuración de la esencia humana, presentando esto en toda su expresión socio-histórica. Por supuesto, Marx no fue un psicólogo y no desarrolló una teoría de la subjetividad a nivel particular, pero sus postulados generales fueron muy significativos para el desarrollo de un enfoque histórico y socio cultural en la psicología.
Por otro lado, Marx desarrolló implícitamente una concepción sobre el sujeto social en el papel que le dio a las clases en el desarrrollo de la sociedad, el cual después fue interpretado de forma muy mecánica en la tradición marxista más ortodoxa, de los países del Este europeo y evitada con clara intencionalidad ideológica en todo occidente.
REVISTA CUBANA dE PSICOLOGÍA Vol. 10, No. 2-3,1993
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Última edición por SS-18 el Jue Jun 21, 2012 3:02 am, editado 1 vez