El número de soldados estadounidenses muertos en Irak excede al de muertos en Vietnam
En la guerra del Golfo han muerto más soldados que en la guerra de Vietnam. Quizás esta noticia sea nueva para ti, pero la verdad se ha ocultado gracias a tecnicismos. Por este motivo aquí están las cifras.
Las cifras de Vietnam son bastante simples de comprender. Si un soldado moría en combate era una baja de guerra. Hay 58.195 nombres grabados en el monumento fúnebre de la guerra de Vietnam en Washington, DC.
Algunos de esos hombres murieron en la jungla de Vietnam, mientras que otros lo hicieron en las unidades médicas de campaña (conocidas como ‘Medivac’) o en hospitales de Japón y Estados Unidos.
Un soldado muerto puede entregar su vida en cualquier lugar mientras presta servicio a su país. No importa donde ocurra la muerte; el lugar de la muerte de un soldado realza su sacrificio por su país.
Pero con la guerra de Irak ha ocurrido algo extraño. El gobierno de Bush hizo algo deshonroso que tuvo como consecuencia una mentira que se mantiene desde que la guerra empezó, –y continúa a día de hoy– Decidieron informar de las bajas de guerra en Irak únicamente si el soldado moría con las botas puestas, en el campo de batalla y en una situación de combate. ¿Cuál es la diferencia? te preguntarás.
Los combates en Vietnam se producían en zonas rurales, muy alejadas de los centros sanitarios. Los soldados heridos eran atendidos por un sanitario de campaña. La mayoría morían en el campo de batalla antes de que los pudieran evacuar. Muchos morían en el camino o eran declarados muertos en las instalaciones sanitarias. La situación en Irak es tremendamente distinta.
Los combates en Irak se producen especialmente en zonas urbanas. A los soldados heridos los evacua personal armado o helicópteros. Es un sistema mucho más eficiente de lo que era posible hacer en Vietnam, pero para los que han sido heridos de gravedad eso significa que la muerte es más posible que ocurra mientras los trasladan o están en las instalaciones sanitarias de campaña.
Con el nuevo sistema de informar sobre las muertes de soldados, aquellas muertes que ocurren en el traslado o tras la evacuación no se cuentan como muertes en combate. Este es el motivo por el cual los números parecen tan inusualmente bajos –algo más de cuatrocientos hasta 2009.
Las cifras reales se han escondido a la opinión pública estadounidense al igual que el regreso, los féretros envueltos en la bandera han sido censurados para la prensa.
Pero las cifras ahora están disponibles y lo único que podemos esperar es que el pueblo estadounidense se sienta indignado cuando sepa cómo le han engañado.
Según el Departamento de Asuntos de los Veteranos, hasta mayo de 2007, el sistema de información de los veteranos de la guerra del Golfo revelaba estas sorprendentes cifras:
- Muertes en combate de soldados estadounidenses en la Guerra del Golfo: 73.846.
- Muertes entre los soldados desplegados: 17.847.
- Muertes entre los soldados no desplegados: 55.999.
Las cifras de los heridos no mortales son igualmente sorprendentes:
- Total “Enfermedades no diagnosticadas”: 14.874.
- Número total de solicitudes de reconocimiento de discapacidad: 1.620.906.
- Solicitudes entre los soldados desplegados: 40.911.
- Solicitudes entre los soldados no desplegados: 1.212.995.
- El porcentaje de tropas de combate que han solicitado el reconocimiento de discapacidad es de un 36%.
Quizás piense que esto es otra teoría conspiratoria, yo lo hice la primera vez que me enteré de esto, por lo que rogaría que se dirijan al informe original [1].
Más muerte y miseria
Más de 1.820 toneladas de basura nuclear (por ejemplo, uranio empobrecido) han estallado sólo en Irak en forma de revestimiento de munición y de búnqueres. Esto representa el peor desastre ecológico jamás creado por el hombre. En la bomba de Hiroshima se utilizaron 64 kilos de uranio. El holocausto nuclear estadounidense en Irak representa más de 14.000 veces el de Hirosima.
La basura nuclear estadounidense que han lanzado en Oriente Próximo seguirá matando durante cientos de años. Esto es debido a que las partículas de polvo radiactivo seguirán transportándose en el aire y terminarán en los pulmones o serán ingeridas por las personas. Los científicos estiman que en Irak hay suficiente material radiactivo para eliminar a un tercio de la población actual en el mundo.
En Irak jamás se encontraron armas de destrucción masiva, así que las hemos llevado nosotros. Las malformaciones congénitas entre los recién nacidos irakíes ascendían a un 600% antes de la guerra [de 2003].
Las malformaciones son las típicas que produce la exposición a venenos radiactivos y eso le ocurre a la población civil irakí, a esas personas a las que supuestamente íbamos a liberar.
Visité Irak en 2001, cuando Sadam Hussein estaba en el poder. Naciones Unidas había impuesto un embargo sobre todas las importaciones en un intento por castigar a Irak por haber invadido Kuwait. Recuerdo a la buena gente de Irak que me trataron con amabilidad y hospitalidad, incluso sabiendo que era estadounidense.
A pesar del embargo de productos vitales como medicamentos y material sanitario, los mercados estaban abastecidos con productos locales. Los niños jugaban a su antojo por las calles y se oían sus risas. Ver lo que esta guerra ha hecho en Irak es especialmente doloroso y habla alto y claro de la inmoralidad de lo que han hecho padecer a ese pueblo inocente.
Y ver cómo ahora esta misma inmoralidad se extiende al pueblo estadounidense en forma de ocultación y mentiras, es demasiado. Vivo en una pequeña ciudad de Nueva Inglaterra. Hemos tenido noticias de muchas muertes en Irak, demasiadas. Sin embargo, las cifras de las que informan los medios parece que las muertes son escasas. ¿Solo alrededor de 4.000? ¿Cómo puede ser? Simplemente no puede ser.
¿Qué hace falta para que la gente reaccione y se indignen lo suficiente como para exigir responsabilidades a nuestro gobierno por estas mentiras? Una democracia sólo es buena si el pueblo está informado. ¿Quién más puede tomar las decisiones sobre lo que es mejor para nosotros? Si nos ocultan la verdad somos una nación de setas.
Gary Vey / Viewzone Magazine (Traducción Paloma Valverde para Irak Solidaridad)
Nota: 1.- Disponible en: http://www1.va.gov/rac-gwvi/docs/GWVIS_May2007.pdf
http://www.librered.net/?p=8095
En la guerra del Golfo han muerto más soldados que en la guerra de Vietnam. Quizás esta noticia sea nueva para ti, pero la verdad se ha ocultado gracias a tecnicismos. Por este motivo aquí están las cifras.
Las cifras de Vietnam son bastante simples de comprender. Si un soldado moría en combate era una baja de guerra. Hay 58.195 nombres grabados en el monumento fúnebre de la guerra de Vietnam en Washington, DC.
Algunos de esos hombres murieron en la jungla de Vietnam, mientras que otros lo hicieron en las unidades médicas de campaña (conocidas como ‘Medivac’) o en hospitales de Japón y Estados Unidos.
Un soldado muerto puede entregar su vida en cualquier lugar mientras presta servicio a su país. No importa donde ocurra la muerte; el lugar de la muerte de un soldado realza su sacrificio por su país.
Pero con la guerra de Irak ha ocurrido algo extraño. El gobierno de Bush hizo algo deshonroso que tuvo como consecuencia una mentira que se mantiene desde que la guerra empezó, –y continúa a día de hoy– Decidieron informar de las bajas de guerra en Irak únicamente si el soldado moría con las botas puestas, en el campo de batalla y en una situación de combate. ¿Cuál es la diferencia? te preguntarás.
Los combates en Vietnam se producían en zonas rurales, muy alejadas de los centros sanitarios. Los soldados heridos eran atendidos por un sanitario de campaña. La mayoría morían en el campo de batalla antes de que los pudieran evacuar. Muchos morían en el camino o eran declarados muertos en las instalaciones sanitarias. La situación en Irak es tremendamente distinta.
Los combates en Irak se producen especialmente en zonas urbanas. A los soldados heridos los evacua personal armado o helicópteros. Es un sistema mucho más eficiente de lo que era posible hacer en Vietnam, pero para los que han sido heridos de gravedad eso significa que la muerte es más posible que ocurra mientras los trasladan o están en las instalaciones sanitarias de campaña.
Con el nuevo sistema de informar sobre las muertes de soldados, aquellas muertes que ocurren en el traslado o tras la evacuación no se cuentan como muertes en combate. Este es el motivo por el cual los números parecen tan inusualmente bajos –algo más de cuatrocientos hasta 2009.
Las cifras reales se han escondido a la opinión pública estadounidense al igual que el regreso, los féretros envueltos en la bandera han sido censurados para la prensa.
Pero las cifras ahora están disponibles y lo único que podemos esperar es que el pueblo estadounidense se sienta indignado cuando sepa cómo le han engañado.
Según el Departamento de Asuntos de los Veteranos, hasta mayo de 2007, el sistema de información de los veteranos de la guerra del Golfo revelaba estas sorprendentes cifras:
- Muertes en combate de soldados estadounidenses en la Guerra del Golfo: 73.846.
- Muertes entre los soldados desplegados: 17.847.
- Muertes entre los soldados no desplegados: 55.999.
Las cifras de los heridos no mortales son igualmente sorprendentes:
- Total “Enfermedades no diagnosticadas”: 14.874.
- Número total de solicitudes de reconocimiento de discapacidad: 1.620.906.
- Solicitudes entre los soldados desplegados: 40.911.
- Solicitudes entre los soldados no desplegados: 1.212.995.
- El porcentaje de tropas de combate que han solicitado el reconocimiento de discapacidad es de un 36%.
Quizás piense que esto es otra teoría conspiratoria, yo lo hice la primera vez que me enteré de esto, por lo que rogaría que se dirijan al informe original [1].
Más muerte y miseria
Más de 1.820 toneladas de basura nuclear (por ejemplo, uranio empobrecido) han estallado sólo en Irak en forma de revestimiento de munición y de búnqueres. Esto representa el peor desastre ecológico jamás creado por el hombre. En la bomba de Hiroshima se utilizaron 64 kilos de uranio. El holocausto nuclear estadounidense en Irak representa más de 14.000 veces el de Hirosima.
La basura nuclear estadounidense que han lanzado en Oriente Próximo seguirá matando durante cientos de años. Esto es debido a que las partículas de polvo radiactivo seguirán transportándose en el aire y terminarán en los pulmones o serán ingeridas por las personas. Los científicos estiman que en Irak hay suficiente material radiactivo para eliminar a un tercio de la población actual en el mundo.
En Irak jamás se encontraron armas de destrucción masiva, así que las hemos llevado nosotros. Las malformaciones congénitas entre los recién nacidos irakíes ascendían a un 600% antes de la guerra [de 2003].
Las malformaciones son las típicas que produce la exposición a venenos radiactivos y eso le ocurre a la población civil irakí, a esas personas a las que supuestamente íbamos a liberar.
Visité Irak en 2001, cuando Sadam Hussein estaba en el poder. Naciones Unidas había impuesto un embargo sobre todas las importaciones en un intento por castigar a Irak por haber invadido Kuwait. Recuerdo a la buena gente de Irak que me trataron con amabilidad y hospitalidad, incluso sabiendo que era estadounidense.
A pesar del embargo de productos vitales como medicamentos y material sanitario, los mercados estaban abastecidos con productos locales. Los niños jugaban a su antojo por las calles y se oían sus risas. Ver lo que esta guerra ha hecho en Irak es especialmente doloroso y habla alto y claro de la inmoralidad de lo que han hecho padecer a ese pueblo inocente.
Y ver cómo ahora esta misma inmoralidad se extiende al pueblo estadounidense en forma de ocultación y mentiras, es demasiado. Vivo en una pequeña ciudad de Nueva Inglaterra. Hemos tenido noticias de muchas muertes en Irak, demasiadas. Sin embargo, las cifras de las que informan los medios parece que las muertes son escasas. ¿Solo alrededor de 4.000? ¿Cómo puede ser? Simplemente no puede ser.
¿Qué hace falta para que la gente reaccione y se indignen lo suficiente como para exigir responsabilidades a nuestro gobierno por estas mentiras? Una democracia sólo es buena si el pueblo está informado. ¿Quién más puede tomar las decisiones sobre lo que es mejor para nosotros? Si nos ocultan la verdad somos una nación de setas.
Gary Vey / Viewzone Magazine (Traducción Paloma Valverde para Irak Solidaridad)
Nota: 1.- Disponible en: http://www1.va.gov/rac-gwvi/docs/GWVIS_May2007.pdf
http://www.librered.net/?p=8095