Yo he estado de emigrante en varios países ex-comunistas y he conocido a varios cubanos. Con dos de ellos he tenido más relación. Uno era muy interesante, porque estaba legalmente fuera, no tenía ningún problema con la política cubana, más bien era pro-castrista (digo era porque hace años que no le veo, ya que ahora vivo en otro país), simplemente emigró por motivos familiares. Era pintor (artístico, no de brocha gorda) y decía que nunca había tenido problemas con la censura y que en Cuba nadie le había dicho nada de qué tenía que pintar o no, pintaba lo que él quería y además decía que en Cuba se conoce y estudia perfectamente todo el arte moderno actual sin distinción y sin interferencias políticas. De hecho, en su opinión en Cuba se estaba más al tanto de lo que sucede en el arte mundial que en el país en el que nos conocimos (un país de Europa Central). Resulta que cuando este hombre llegó al país en cuestión, tenía muchas ideas, hacer diversas exposiciones sobre Cuba, etc. Se le ocurrió organizar una exposición de arte cubano en el que estuvieran representados tanto artistas de la isla como exiliados, al tío no le interesaba nada la política, se empezó a mover, contactó con la embajada, con grupos de exiliados, etc. En la embajada la idea les pareció muy buena y le prometieron ayuda. Los grupos de exiliados...pues bueno, con ellos fue imposible ponerse de acuerdo porque estaban obsesionados con que había que denunciar la política de Fidel Castro y la situación en Cuba, además no querían participar en ningún proyecto en el que estuviera la embajada. Mi amigo acabó hasta las narices de los exiliados y de su intransigencia. Estaba bastante desilusionado y sorprendido por la reacción tan agresiva que tenían los exiliados.
Luego ya aquí donde vivo ahora, por motivos de trabajo conocí a un intelectual cubano exiliado por motivos políticos. El tío era simpático, pero cuando hablaba de política se le iba la olla completamente, además de que era muy agresivo, tanto que no había manera de discutir con él. En Cuba estuvo en la cárcel, según él por motivos políticos, provenía de alguna familia cuyos miembros habían participado activamente en la revolución e incluso algunos de ellos habían sido personalidades relativamente importantes (su hermano trabajó con el Che), él era una personalidad relativamente conocida en Cuba, por presiones internacionales le dejaron salir. Como he dicho no había manera de discutir con él, su único criterio para analizar las cosas era qué relacción tenían con Cuba, admiraba a cualquier gobierno que apoyara el bloqueo o la política agresiva sobre Cuba, con lo cual estaba dispuesto a defender a Aznar o hasta el mismo Pinochet si hacía falta, pero luego, cualquier pequeña concesión sobre Cuba, para él era poco menos que un crimen, por eso odia por ejemplo a Zapatero (que no es que se caracterice por su política en favor de Cuba, precisamente). Además estaba tan obsesionado que para él, cualquier cosa de izquierda era ser un asesino stalinista. Yo me cabreé bastante con él varias veces porque en seguida empezaba a criticar a Zapatero cuando se encontraba conmigo, como si yo fuera simpatizante de Zapatero o algo así, y tenía que explicarle continuamente que yo no era socialista y que me la sudaba lo que dijera de Zapatero o del PSOE.Molestaba bastante. Durante una temporada le dio por mandarme textos anticastristas escritos por amigos suyos, eran basura. Al principio me tomé la molestia de explicarle por qué me parecían malos textos, pero se tomó las críticas muy mal (ojo que no fueron críticas desde el punto de vista comunista sino cosas razonables que cualquiera debería ver). Lo peor fue en una ocasión en que se me ocurrió respodonderle y le mandé un texto sobre norteamericanos que iban a Cuba a operarse. Bueno, la que me montó fue chica y eso que le avisé desde el principio que no estaba de acuerdo con ciertas cosas que decía el texto. Se ofendió brutalmente, llegó a insultarme y a llamarme de todo, yo me quedé flipado porque en ningún momento intenté defender Cuba, solo le mandé el texto para ver su opinión, pero no hice ninguna valoración. En fin, lamentable. Desde entonces pasé de hablar de política con él (contacto tenía que tener por cuestiones de trabajo). Lo bueno es que todo el mundo veía cómo era... recuerdo el día que llegó a la universidad soltando pestes de Cuba por alguna razón y diciendo que en Cuba internet estaba prohibido, las típicas chorradas de siempre, lo curioso es que muchos de los profesores de la facultad habían estudiado español en la época comunista precisamente en Cuba y hasta hoy tienen contacto con sus amigos cubanos ... por internet, así que todos sabían por experiencia propia que se estaba inventando todo. Fue alucinante, recuerdo que nos miramos todos, incluyendo el director de la sección de español, como diciendo, este tío está loco...