se lo que es el reformismo, tranquilo. y si, entiendo que hablas del poder proletario, evidentemente sin el poder proletario y una situacion de doble poder no existe la revolucion. voy a hablar en todo momento de paises industrializados, en paises agrarios la gpp podria ser aplicable, aunque no me convence no voy a entrar.
el doble poder no se puede alargar indefinidamente, son momentos puntuales en la historia, bastante breves que duran mientras dura el flujo revolucionario en el animo de las masas, ambos poderes tampoco pueden coexistir de manera indefinida, mas pronto que tarde uno desaparece y el otro prevalece.
en cuanto a las medidas economicas y de "control" que propones sobre la industria capitalista, eso, de manera aislada es esteril, no es que la bruguesia tenga que entrar en un barrio y arrasarlo, es que con no comprar y vender a esas empresas se ahogan directamente, aun asi desarrollame un poco mas lo de como construir el poder obrero (politico y economico) en la ciudad, porque... y sobre todo, por que no el insurreccionalismo?
pd: a los que hablaban antes de "poder popular" en el imperio ruso despues de octubre, lo que se instauro fue la dictadura del proletariado, y la alianza "obrero y campesina" que muchas veces invocan derechistas pintados de izquierdistas no es sino la transformacion revolucionaria de la sociedad bajo la direccion del proletariado, y donde queda el campesinado? el proletariado tuvo que ganarselo pues era un pais donde estos eran mayoria, lo que trotsky llamaba "arrastrar al campesinado tras de si", aqui un capitulo del ABC del comunismo, donde queda bien claro (1918):
53.- El papel dirigente del proletariado
En nuestra revolución, que es una revolución comunista, el principal papel, el papel
dirigente, ha sido destinado al proletariado. El proletariado es la clase más unida y la mejor
organizada, el proletariado es la única clase cuyas condiciones de vida en la sociedad capitalista le
ha llevado a adoptar criterios comunistas; a él sólo esas condiciones le han descubierto la meta
verdadera y el camino correcto para alcanzarla. Naturalmente, por tanto, el proletariado, ha sido la
vanguardia en esta revolución.
Los campesinos (los campesinos medianos e incluso algunos de los campesinos pobres) no
fueron constantes. Sólo triunfaron cuando unieron sus fuerzas a las del proletariado. A la inversa,
siempre que los campesinos tomaron un camino diferente al del proletariado, fueron
inevitablemente esclavizados por Denikin, Kolchak, o por algún otro representante de los
terratenientes, de los capitalistas o de la casta militar.
Éste papel dirigente, está misión dominante del proletariado, encuentra su expresión
en la Constitución soviética. Nuestras leyes garantizan al proletariado ciertas prerrogativas
políticas. Por ejemplo, las disposiciones electorales para los Congresos de los Soviets son de tal
naturaleza que, proporcionalmente a su número, los trabajadores urbanos tienen más delegados que
los campesinos.
He aquí los párrafos relevantes de nuestra constitución.
"El Congreso Panruso de los Soviets está compuesto por los representantes de los
Soviets de las Ciudades, que tienen el derecho de enviar un diputado por cada 25.000 electores
y por los representantes de los Soviets Provinciales, que tiene el derecho de enviar un diputado
por cada 125.000 habitantes." (parte 3, cap. 5, párrafo 25).
"Los Congresos de los Soviets están compuestos por: (a) Los Congresos Regionales,
constituidos por los representantes de los Soviets de las ciudades (un diputado cada 5.000 electores)
y de los Congresos de los Soviets de Distritos (un diputado por cada 25.000 habitantes), con la
condición de que no haya más de 500 delegados por toda la Región- o por los representantes de los
Congresos Provinciales de los Soviets, elegidos sobre las mismas bases, cuando el Congreso
Provincial se reúne con inmediata anterioridad al Congreso Regional de los Soviets y (b) los
Congresos Provinciales, compuestos por los representantes de los Soviets de las ciudades (uno por
cada 2.000 habitantes) y de los Congresos de los Soviets de los Distritos Rurales (un delegado por
cada 10.000 habitantes), con la condición de que no haya más de 300 delegados por toda la
Provincia. Pero cuando un Congreso de los Soviets de Distrito tiene lugar con inmediata
anterioridad al Congreso Provincial de los Soviets, las elecciones se llevarán a cabo, no como las
del Congreso de los Soviets de Distrito Rural, sino como las del Congreso de los Soviets de
Distrito." (parte 3, cap. 10, párrafo 53).
Se ve que en las ciudades los delegados son elegidos proporcionalmente al número de
electores, mientras que en los pueblos lo son proporcionalmente al número de habitantes
(comprendidos no sólo los trabajadores en el sentido estricto del término, sino también los
campesinos ricos, los curas, la burguesía rural, etc., así como los niños, que no tienen derechos
electorales). Esto implica que la ventaja concedida a los trabajadores urbanos frente a los
campesinos es menos amplia a lo que podría parecer a simple vista. Pero el trato preferente es
indudable.
Estos privilegios constitucionalmente determinados tan sólo expresan lo que ocurre en la
realidad, en especial que el proletariado urbano sólidamente organizado dirige a las
desorganizadas masas campesinas.
El primer deber del Partido Comunista es hacer todo lo posible para dejar claro que estos
privilegios son temporales. En la misma medida en que las capas retrasadas de los habitantes del
país se vayan instruyendo, cuando la experiencia los haya convencido de que las medidas tomadas
por los obreros son correctas y beneficiosas, cuando se den cuenta de que no deben andar con la
burguesía sino sólo con el proletariado, es obvio que la desigualdad temporal arriba descrita dejará
de existir.
El Partido Comunista debe utilizar los privilegios del proletariado para influir en los
distritos rurales con el fin de unir a los obreros más avanzados con los campesinos. Sólo así se
logrará con éxito la instrucción revolucionaria de los campesinos más pobres. La posición ventajosa
de los obreros no les ha sido dada para que se excluyan o se separen de los habitantes de los
distritos rurales, sino para que hagan buen uso de ella con el fin de que, mediante su mayor
influencia en los soviets y en la administración, puedan llevar a la clase obrera a un contacto más
estrecho con la vida de la aldea, para que puedan inaugurar y mantener una unión de camaradería
entre el proletariado y los campesinos medianos y pobres. De este modo, los obreros podrán liberar
a los campesinos de la influencia de los campesinos ricos, del clero, de los ex-terratenientes, etc.